Según reportes sobre Keith Richards, la banda británica opta por la creación musical en vez de los escenarios
Cuando era una nena, fue llevada por su mamá a una fiesta de la banda inglesa. Allí conoció a Bill Wyman. El silencio de la prensa, el casamiento cuando cumplió 18 y los efectos sobre su cuerpo
Llueve en Brooklyn y Meshell Ndegeocello viene demorada. "Hablemos en una hora", dice, para ganar tiempo y superar el atascamiento de tránsito en el que se encuentra. Algo tienen en común Buenos Aires con Nueva York. A Meshell le gusta vivir donde vive, tanto como salir de gira con su música. Nació en Berlín porque su padre cumplía allí con un destino como militar. Pero fue criada en la ciudad de Washington. Cuando tenía 19 años, las puertas de las grandes ligas de la música comenzaron a abrirse. Y ya como veinteañera, logró trabajar como bajista sesionista en grabaciones de The Rolling Stones, o en giras de Madonna y Alanis Morissette. Pero con el paso de los años comenzó a perfilarse como solista, especialmente para discos que podían redondear conceptos. Tenían puntos de partida pero finales abiertos, para cumplir con una regla no escrita del arte que tienen que ver con la manera cómo se llega a un público.El martes 20 y miércoles 21 de mayo estará en Buenos Aires. Ya estuvo aquí, hace casi una década. En ese momento agendó una función en un teatro, esta vez serán cuatro en un club de jazz. Allí podrán moverse de otro modo, repasar su carrera en solitario y hacer foco en sus últimas grabaciones.Justamente por la última, No More Water: The Gospel of James Baldwin, tuvo el honor de haber recibido un Grammy. Cuando se publicó, en el portal Every Thing Jazz, Jumoké Fashola escribió: "Deberían escuchar completo este álbum, con auriculares, para apreciar sus matices, porque el viaje, aunque a veces incómodo, vale la pena". Seguramente quien escuche el álbum, con sus canciones, con sus monólogos absolutamente interpelativos, estará de acuerdo con este comentario. "La verdad del dolor y la experiencia de alguien a veces es difícil de digerir -dice Meshell, que logró sortear el tránsito y ya está sentada frente a su computadora-. [El novelista y activista] James Baldwin dice: 'Es difícil dejar ir la ira, porque te verás obligado a lidiar con la tristeza'. Creo que es difícil vivir en la realidad, especialmente ahora. ¿Cómo están las cosas en tu país?".La bajista, compositora y cantante olvida por un rato que se trata de una entrevista y convierte la comunicación en una charla. Quiere saber con qué se encontrará en esta nueva visita a Buenos Aires. Pero desde aquí, queremos saber quién era James Baldwin, el autor a quien ha decido invocar para su más reciente álbum."James Baldwin fue un escritor nacido en los años 50. Creció en Harlem durante un renacimiento de la escritura y la superación de la comunidad negra, pero creció cuando no había derechos civiles. Asesinaron a dos de sus amigos. Para mí, Baldwin es mi guía".Y si también se puede hablar de él en tiempo presente, a pesar de que murió en 1987, es porque el pensamiento de este novelista, dramaturgo, ensayista, poeta y activista es bellamente reinterpretado en canciones y en declamaciones. "Crecí con demasiada religión y poca razón -dice Meshell-. Y tener a Baldwin en mi vida me ayudó a encontrar un propósito y una razón. Y me ayuda a comprender la historia de mi país. No sé en tu país, pero aquí, en los Estados Unidos, no quieren que los jóvenes conozcan el pasado. Y yo no lo hice. Y Baldwin me ayudó a comprender mucho mejor mi pasado".Recién a los 30 llegó a la obra de este autor. "Ahora tengo 56 años. Creo que eso es bueno. Cuando uno es joven se preocupa por ser joven y hermoso. Y cuando te hacés mayor, empezás a cuestionarte tus valores. ¿Cuál es tu fundamento moral? Así que me alegro de haberlo encontrado cuando estaba lista para tomar decisiones sobre cómo vivir mi vida".De todos modos, había inquietudes muy anteriores que esta artista había demostrado de manera bien concreta. Su nombre real es Michelle Lynn Johnson, pero a los 17 eligió llamarse Ndegeocello, que en suajili -lengua bantú que se habla en el África central- significa "libre como un pájaro". Meshell asiente y explica: "Sí, creo que en muchas culturas eligen un nombre al que aspirar, y creo que por eso elegí ese nombre. Simplemente aspiro a tener libertad interior, no la libertad de la que todos hablan o la libertad de expresión, solo libertad interior conmigo misma. He conseguido algunas cosas que quería. Y no quiero cosas diferentes de las que quería en aquel momento. Tengo ciertas libertades que realmente aprecio, pero todavía estoy trabajando en mi interior. Todavía estoy tratando de descubrir algunas cosas".Enojos del pasadoAlguna vez, Meshell confesó que se enfrentó a su propia historia familiar y a la de sus padres -su madre era empleada doméstica, su padre militar- al pensar que por ser afroamericanos no podrían conseguir ciertas cosas, como ascensos de rango. "De joven, estaba enojada con mis padres. Muy enojada, muy dolida. Pero al leer a Baldwin, vi una vida muy parecida y me ayudó a ver que debo ser humilde y amar a mis padres porque no puedo imaginar por todo lo que pasaron. Hoy las cosas son diferentes. Mis padres crecieron cuando alguien podía golpearlos y echarlos a la calle. Los derechos civiles son tan viejos como yo". Meshell nació meses después del asesinato de Martin Luther King y de una nueva modificación que ese año se hizo sobre la Enmienda de los Derechos Civiles.En el disco hay un texto escrito por Josh Johnson y Stacyann y Chin llamado "Raise the Roof", que apunta directamente al señalamiento del afroamericano y a tantos asesinatos cometidos, la mayoría a manos de la policía. "Este no es el sueño del que habló el Dr. Martin Luther King en Washington D. C." recitan. Y más adelante se escucha: "Esto debe significar algo más que una nota al pie en el frenesí mediático de nuestro tiempo". Travel / Eyes / Trouble / Pride II - Live at Le Guess Who?">-¿Después de Luther King, Malcolm X o el presidente Obama, ¿debería ser ahora el turno de las mujeres?-[El rostro de Meshell muestra falta de certezas al respecto] No puedes legislar. No puedes legislar el amor, la bondad, la razón, solo porque Obama sea presidente. No puedes legislar ni votar por ese tipo de cambio. ¿Qué hay en mi corazón? Realmente tuve que revisarlo en mí misma y me estoy dando cuenta de que tienes que cultivar esto como un árbol, como una fruta. Tienes que alimentarlo, regarlo y mejorarte para poder hablar, leer y aprender sobre música, comida, gente y cultura en lugar de pensar en otras razas que puedes odiar para sentirte mejor contigo mismo. Y luego, el dinero; nadie quiere ser pobre. Estoy lejos de ser pobre y lejos de ser rica. Eso es difícil en esta vida. Aquí, en los Estados Unidos, tratamos a los pobres como si hubieran hecho algo malo y a los ricos como si supieran algo. Pero no tienen sabiduría, solo saben cómo ganar dinero. Y creo que Baldwin lo explica muy bien en The Fire Next Time.El libro, a través de dos cartas escritas a su sobrino James, analiza las consecuencias de la segregación racial, la hipocresía religiosa y la necesidad de una transformación profunda tanto individual como social. "Sacrificamos la belleza de la vida por iglesias, mezquitas, religiones, banderas, países -continúa Meshell- porque todos tenemos miedo a morir. Nos cuesta encontrarle sentido a esta vida. Intento experimentar la música en vivo como tratar con un niño, como algo que cuidar y aprender. Quiero hablar con el niño y saber lo que siente. Y eso es lo que intento hacer con mi país, con mis amigos, con mi familia. Tengo dos hijos. Y lo que más me gusta de la música es conocer gente y viajar, y que una sola canción pueda unir a tanta gente, y eso es lo que me encanta de la música. Eso es mi alegría y mi pasión. Es lo que realmente me hace feliz. Simplemente tocar.-¿No se extrañan esos años en los que trabajaste con grandes figuras? Habrá gente que se sorprenda al saber que grabaste con The Rolling Stones y rapeaste con Madonna.-Sí, conocí a Mick Jagger. Y sí, quería conocer a Keith [Richards], creo que es un genio. Y al principio, no crecí sintiéndome atraída por ellos. Pero me tomó un minuto entrar en los Rolling Stones. Toqué con Madonna. Toqué con Marcus Miller. Esos momentos fueron geniales porque trabajé muy duro para lograrlo y le doy gracias a Dios por esos logros. Pero vivo muy en el presente. Realmente no extraño a la gente. No soy nostálgica ni sentimental, es difícil enamorarse de mi. Mi afición es seguir para adelante. Casi nunca pienso en el pasado. Me gusta leer, ver películas y cocinar para mi familia.-¿Quiénes llegarán la semana que viene a Buenos Aires?-Somos un quinteto con Chris Bruce, Abe Rounds, Justin Hicks y Jake Sherman. Tomo música de discos anteriores, algo de The Omnichord Real Book y mucho de Baldwin. El concierto tiene, también algunos aspectos de improvisación. Quiero que la gente venga con la mente y el oído abiertos.-¿Es fácil encontrar público así?-Solo intento transmitirles mi buena energía porque estamos teniendo un intercambio. El público es tan importante como la banda y solo intento conectar con ellos y espero que se sientan bien a través de la música. Y que las ondas sonoras les lleguen de buena manera. Para agendarMeshell Ndegeocello en Buenos Aires. Funciones: martes 20 y miércoles 21 de mayo, ambas fechas a las 20 y 22.30. Sala: Bebop Club (Uriarte 1658).
Si bien los Stones son sinónimo del rock más enérgico, la banda también suele ponerse romántica con más un tema lento. Consultado por Mojo, el legendario guitarrista marcó una canción como "la balada más significativa de la banda"
Durante una entrevista, Ledher aclaró la versión que él habría llevado a dos famosos músicos contra su voluntad a su isla en Bahamas
Las dos bandas británicas protagonizaron una rivalidad histórica que incluyó momentos de admiración y creatividad. Algunas canciones subrayan esta influencia mutua, según Far Out
El vocalista británico expresó su postura crítica hacia una pieza incluida en el álbum debut de la banda. Qué dijo sobre su vínculo con el blues, según Far Out
Custodio del ritmo único de los Stones, dueño de un estilo original, el reconocido baterista enfrentó un reto único durante la grabación, según Far Out
El baterista de la banda británica recordó en una entrevista con Far Out cómo una canción cambió su visión sobre el grupo. Su paso de seguidor a miembro esencial está marcado por un capítulo histórico
Mick quiso jugar solo, esto le molestó a Keith y, por varios meses, pareció que era el fin de los Stones... Finalmente hubo paz y otra vez juntos en la ruta, recuerda Far Out
La foto con Carlos Menem fue una de tantas curiosidades de aquel quinteto histórico de shows, que certificó el fanatismo local y habilitó otras tres visitas.
En 1995, la banda hizo historia en nuestro país con cinco shows en River Plate, reuniendo a más de 60 mil personas por noche.
"¡Buenas noches! ¡Bienvenidos al Voodoo Lounge!", fueron las primeras palabras que Mick Jagger dirigió al efervescente público argentino en perfecto castellano esa calurosa (en todo concepto) noche del 9 de febrero de 1995, cuando finalmente, después de 30 años de espera, los Rolling Stones hicieron su tan soñado y ansiado debut en la Argentina, tierra Stone por antonomasia. El saludo antecedió al tercer tema de la noche, el potente "You Got Me Rocking", que fuera el segundo simple del gran disco que presentaban formalmente y daba nombre a la gira de 1994/1995, Voodoo Lounge, trabajo que había vuelto a poner a la banda en el número uno de los charts en el Reino Unido y les hiciera ganar el Grammy a mejor álbum de rock de 1995 en los EE.UU. También fue el primer disco y gira sin Bill Wyman, su bajista original.Que los primeros dos temas del concierto hayan sido "Not Fade Away" y "Tumbling Dice" tuvo una especial significación para los seguidores más añejos o acérrimos de la banda. "Not Fade Away" (original de Buddy Holly) fue la cara A de su tercer simple en Inglaterra y uno de sus primeros éxitos. Grabada en enero de 1964 y lanzada por Decca Records el 21 de febrero de 1964, con "Little by Little" como lado B, fue su primer éxito en el Top 10 del Reino Unido, alcanzando el número tres. En los Estados Unidos, London Records lo lanzó el 6 de marzo de 1964 como su primer simple allí. "Not Fade Away" no estaba en la versión británica de su álbum debut, The Rolling Stones, pero fue la canción de apertura de la versión norteamericana de éste, lanzada un mes después como parte de los England's Newest Hitmakers (los nuevos hacedores de éxitos de Inglaterra). "Tumbling Dice" fue nada menos que el primer simple y carta de presentación del legendario y venerado álbum doble Exile on Main St., de 1972. Así fue como los Stones de la "Era Brian Jones" y los de la "Era Mick Taylor" se hicieron presentes con dos temas para los más incondicionales, antes que Mick diera la bienvenida protocolar. El set list de esa inolvidable noche inaugural, la "noche de bodas" de los fans argentinos con la banda, mostró un perfecto equilibrio del amplio repertorio Stone en 23 temas donde combinaron lo nuevo con lo clásico y los hits con algunas rarezas: hubo sorpresa por no ser "Happy" de la partida en el usual bloque donde canta Keith Richards, que se lució con el "Before They Make Me Run" de Some Girls y la balada "The Worst" del por entonces nuevo disco, y también sorprendió la inclusión de "Undercover Of The Night" (con sus referencias a detenidos y cárceles secretas en Sudamérica) del flojito Undercover de 1983, que algunos interpretarían (como por ejemplo Charly García en algunas declaraciones posteriores al concierto) como un guiño político. Y si bien todo el concierto fue una suerte de montaña rusa de emociones, el tramo final de las últimas cinco canciones fue realmente demoledor: la banda pisó el acelerador e hizo levantar aún más a todo el enfervorizado estadio con sus más queridos y celebrados rocanroles: "Street Fighting Man", "Start Me Up", "It's Only Rock 'n' Roll (But I Like It)", "Brown Sugar" (donde nació el posterior tradicional revoleo de las remeras por arriba de la cabeza que hasta Capusotto inmortalizara luego en un sketch) y el bis de "Jumpin' Jack Flash"."Fue una manía absoluta -escribió Ron Wood sobre la primer visita a la Argentina en su autobiografía de 2007-. La llegada al aeropuerto fue bastante loca, con multitudes alineadas en las calles cuando entramos a la ciudad. A la noche había millares de personas acampando debajo de nuestras ventanas y cantando. Me asomaba al balcón y miraba abajo el gentío que me cantaba a mí. "Olé, olé, olé, oléeeee". Los Stones fueron más grandes que nunca. Los sudamericanos tienen esa fiebre que no existe en ningún otro lugar del mundo. Supongo que estuvieron hambrientos de grupos de rock por mucho tiempo." Números increíblesLa banda sobre el escenario era de 12 personas: además de Jagger, Richards, Wood y Watts, el (nuevo) bajista Darryl Jones, el gran tecladista y director musical Chuck Leavell (ex The Allman Brothers Band) en piano, el histórico saxofonista Bobby Keys (un verdadero plus), Lisa Fischer -de destacada participación en "Gimme Shelter" cubriendo perfectamente la original vocalización de Merry Clayton- y Bernard Fowler en coros, más una sección de vientos integrada por Andy Snitzer en saxo, Michael Davis en trombón y Kent Smith en trompeta. Además de los músicos, la comitiva Stone estuvo integrada por 180 personas más: familiares, amigos, técnicos, asistentes, sonidistas, guardaespaldas y cocineros. El escenario, el sonido, la escenografía (cuyo diseño y producción estuvo a cargo de Mark Fisher, Charlie Watts, Mick Jagger y Patrick Woodroffe) y toda la logística del concierto fueron algo nunca visto (en esa magnitud) en el país: el escenario tenía 28 metros de alto y 70 de largo. Trajeron 200 toneladas de equipos (que fueron trasladados en dos Boeing 747), 178 de aluminio y una estructura con 1000 luces que flotaba sobre la banda y que simulaba ser una cobra gigante. La pantalla de video era de 16 metros de ancho y ocho de alto. El sonido era de 1,5 megawatts y todo funcionaba con 37 motores. En el estadio, por el que se había pagado un alquiler de 150.000 pesos de la época por día, funcionaban 17 oficinas para la producción de la banda, once camarines, más de 2000 policías y agentes de cinco empresas de seguridad privada, seis ambulancias y tres carpas de la Cruz Roja, con 100 médicos y un hospital móvil.Para Diego Perri, autor del libro República Stone (2012), uno de los fans más reconocidos y fieles que tiene la banda en la Argentina, "Los Stones patentaron los shows de estadios en la década del 70, los profesionalizaron en los 80 y se tornaron megagiras multimillonarias en los 90. Fue precisamente a partir de este tour que los Stones alcanzaron enorme popularidad en la Argentina, una plaza que venía calentando terreno desde hace varios años, con el aperitivo que habían sido las visitas de Mick Taylor en 1990 y la de Keith Richards dos años después. "Voodoo Lounge fue un concierto nunca visto en el país, con una puesta impactante que incluía la cobra gigante echando fuego desde su extremo, largas pasarelas, Jagger emergiendo desde el piso del escenario, muñecos inflables, una planta lumínica formidable y un sonido inmaculado. guardo hermosos recuerdos de ese inolvidable debut", continúa. "La atmósfera fue explosiva, eufórica, idílica. Buenos Aires era un hervidero. Los medios radiales, televisivos, las revistas, los diarios, todo giraba en torno a los Stones. El famoso isotipo de la lengua aparecía en todas partes: botellas y latas de gaseosas, stickers y paquetes promocionales hasta en casas de comida rápida. Inclusive se lanzó un auto. Un verano revolucionado por el desembarco fundacional de sus Majestades que quedó tatuado en el corazón de todos los seguidores. La banda completa, con Keith Richards colgado del hombro del presidente Carlos Menem en la residencia de Olivos, es una postal muy gráfica de los años 90, con todo lo bueno y lo malo de esos tiempos. Cada integrante disfrutó de lo suyo. Mick de permanentes salidas para cenar, Ronnie de pintar y pasear por el campo, Charlie de escuchar jazz, tango y ver caballos y Keith del sol, la piscina del hotel y de largas charlas con su padre, Bert, y su amigo Roy."Otro fan destacado, que además participó activamente en ese debut (como músico y como espectador), es el baterista Black Amaya, integrante de bandas seminales del rock argentino como Pappo's Blues, Pescado Rabioso o La Pesada del Rock & Roll, cuenta: "Mi primer ídolo de la batería fue Charlie Watts, creo que eso ya dice todo, soy fanático de la banda desde que escuché su primer disco, en 1966. Muchos años después, a mitad de los 90, estábamos de gira con Pappo y recuerdo perfectamente una noche en una casa donde parábamos, en Villa Carlos Paz, que Pappo se alejó para atender una llamada desde Buenos Aires, algo que hacía unos días lo tenía muy nervioso pero no nos decía nada. Al rato, entró eufórico gritando: "¡Somos soporte de los Rolling Stones!". Empezamos a saltar y a abrazarnos y de la alegría nos empezamos a tirar con almohadas en la cabeza. La primera noche que los Rolling Stones tocaron en el estadio, cuando Jagger presentó a los miembros de la banda, al llegar el turno de Charlie Watts (ya con algunas canas), lo vi en la pantalla y casi me pondo a llorar. Me emocioné mucho esa noche del debut, la comunión con el público fue algo increíble, que creo que ni ellos se lo esperaban".La lista de temas"Not Fade Away""Tumbling Dice" "You Got Me Rocking""It's All Over Now""Undercover of the Night" "Sparks Will Fly""(I Can't Get No) Satisfaction""Out of Tears""Angie""Rock and a Hard Place""Love Is Strong""I Go Wild""Miss You""Honky Tonk Women""Before They Make Me Run""The Worst""Sympathy for the Devil""Gimme Shelter""Street Fighting Man""Start Me Up""It's Only Rock 'n' Roll (But I Like It)""Brown Sugar""Jumpin' Jack Flash"* El domingo 9 de febrero, LA NACION 104.9 celebra los 30 años de la primera visita de The Rolling Stones a la Argentina con una programación especial, que incluye los mejores clásicos de la banda, testimonios, anécdotas y un concurso de un vinilo triple más DVD.
Si bien la banda repetiría la experiencia volviendo al país en 1998, 2006 y 2016, nada sería como la primera vez.
El histórico trabajador de la Casa Rosada capturó los momentos más emblemáticos de la historia argentina, como el regreso de la democracia en 1983 y la crisis del 2001. Forjó lo que llamó fotografía "oficial, no oficialista". Leer más
En vísperas de un nuevo Super Bowl, recordamos la vez que los Stones fueron censurados en el medio tiempo de la cita deportiva.
Conocida durante mucho tiempo por su tempestuosa relación con Mick Jagger de los Rolling Stones, quien, con su compañero de banda Keith Richards, escribió su inquietante éxito "As Tears Go By" en 1964, la cantante y compositora británica se sacudió el manto de "musa" para forjar su propio nicho musical único. Leer más
Su intensa relación con Mick Jagger dio como resultado algunos de los éxitos más grandes de la banda
La activista estadounidense cumple 81 años. Nació en 1944. Sufrió el racismo. Fue perseguida por el FBI. Estuvo encarcelada. Participó de las panteras negras. Su libro "Mujeres, raza y clase" es una obra clásica. John Lennon y los Rolling Stones le dedicaron canciones en donde es evocada como un ángel. Frente a la ola reaccionaria, la persecución de migrantes y la baja en las políticas de inclusión llamó enfrentar la "decepción" con "esperanza infinita"