Con apenas pocos días de diferencia, tres importantes restaurantes porteños bajaron la persiana. Uno ofrecía cocina nórdica de autor. Otro, fue creado por un chef que no paraba de recibir elogios por su propuesta de fuego y vino. El tercero, un local mexicano muy popular, se despidió con una frase breve y melancólica: "Lo hacemos con tristeza, pero con la tranquilidad de haberlo dado todo".No son casos aislados.Los cierres de Sál, de Franca y de Ya Cabrón encendieron la alarma en un sector que venía tambaleando, pero ahora enfrenta una caída abrupta del consumo, el retiro del turismo y el alza sostenida de los costos fijos y variables. La gastronomía, durante años motor de empleo, cultura urbana y deseo, se convirtió en un termómetro sensible de lo que pasa en la calle. Donde había cola para entrar, hoy hay mesas vacías. Donde había planes, hoy hay cálculos. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por @yacabron "Está muy flojo": la mirada de un referenteMartín Rebaudino es dueño y cocinero de Roux, un restaurante de alta cocina en Recoleta que comanda desde 2014. No necesita presentación, pero siempre elige hablar con modestia: cuenta que nació en La Cumbre, Córdoba, que su padre fue cocinero, y que antes de abrir su propio lugar trabajó casi veinte años en Oviedo, bajo la dirección de Emilio Garip. También pasó por las cocinas de Pedro Subijana, Juan Mari Arzak, Martín Berasategui y los hermanos Roca.Sabe lo que está pasando. Y lo dice sin vueltas: "Está muy flojo. Ha bajado bastante. Prácticamente no hay turismo. Con este valor del dólar, estamos muy caros para el mundo. Y no ayudan los impuestos: todo quedó muy caro".Rebaudino compara los valores de los platos con los que había hace apenas unos meses: "Antes promediábamos 25 o 30 dólares. Hoy estamos arriba de 60. También aumentaron los sueldos, hoy están más altos que la media internacional. Aumentaron todos los costos".Para él, la solución no es mágica, pero sí urgente: "Van a tener que bajar impuestos, para que baje el costo de los productos. Si no, esto se va a complicar cada vez más. Fue igual en los 90"."El rubro está aterrado": radiografía de un momento frágilCecilia Boullosa, periodista especializada en gastronomía, cuenta que hace unas semanas su cuenta de Instagram estalló después de abrir un debate: ¿qué está pasando realmente con los restaurantes?El disparador fue el cierre de dos espacios recomendados por la Guía Michelin y el dato concreto de que otros, también reconocidos, optaban por no abrir ciertos días por tener cero reservas. En el universo del fine dining, eso equivale a una señal de alarma.Lo que sigue, explica Boullosa, es un paisaje de precariedad silenciosa. Un cocinero con restaurante en Belgrano que, ante cenas vacías, decide abrir al mediodíaâ?¦ pero la demanda tampoco aparece. Otro, con un restaurante desde 2007, opta por cerrar temporalmente para repensar su estructura: la facturación de junio le cayó un 30% respecto a mayo.Hay quienes buscan vender su fondo de comercio, aunque no lo anuncian porque no tienen ni siquiera el dinero suficiente para liquidar todo. Otros siguen funcionando "en piloto automático", hasta que el desfasaje entre estructura y realidad se vuelve imposible de sostener."Es un momento raro, de aguas turbulentas", sintetiza Boullosa. Y describe un fenómeno que muchos cocineros le confiaron en los últimos meses: la pérdida de previsibilidad."Un martes viene gente, pero el viernes está vacío. El sábado se llena, pero el martes no entra nadie. Tener un restaurante vacío es desmoralizante. Todos trabajan peor. Y el cliente, cuando ve un lugar sin gente, no quiere entrar".Algunos, incluso, hacen el servicio más lento a propósito, para que las pocas mesas ocupadas no se vayan rápido y el salón no luzca desierto.El margen que desaparecióEn este contexto, hay una certeza incómoda: la rentabilidad, incluso para los locales llenos, se achicó o desapareció. Todo aumentó â??productos, alquileres, cargas socialesâ?? y del otro lado, el comensal exige precios más bajos. El equilibrio parece inalcanzable."Muchos dicen que siempre hubo rotación, que abrir y cerrar es parte del juego. Pero el problema es que a los que están abiertos, tampoco les está yendo bien", advierte Boullosa. El miedo crece. Se ve cómo otros cierran o prueban estrategias nuevas que no funcionan. Y la promoción, lejos de ser garantía de éxito, requiere hoy una inversión que muchos no pueden afrontar.Los lugares más golpeados, dice, son los más de nicho: gastronomías alternativas o conceptuales con márgenes acotados y menos público. "Hoy se vuelve a las bases. No hay más lugar para todos. Los que mejor se están defendiendo son los que tienen buena relación precio-calidad".Cerrado por recesiónSegún la Asociación de Hoteles Restaurantes Confiterías y Cafés (AHRCC), la baja del consumo fue del 20% en abril y mayo respecto a marzo, y del 30% en términos interanuales. Hay locales en venta en Puerto Madero, Palermo, Recoleta y más allá de las avenidas, las persianas bajas se multiplican.Daniel Prieto, titular de la asociación, lo resume así: "Hay una estabilidad macroeconómica con una crisis de consumo". La gente dejó de salir. El turismo cayó -según datos oficiales, el derrumbe es de 20% en lo que va del año-, los salarios no alcanzan, y el margen para el ocio se achicó al mínimo.En Liniers, San Telmo, Bahía Blanca, Rosario o Mendoza, el relato se repite: familias que prefieren cocinar en casa, grupos que abandonaron la previa en bares, y jóvenes que ahora preguntan los precios antes de pedir un postre o una bebida. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Citadino (@citadinoba) ¿Qué buscan los que todavía salen?Según datos de Kantar, el 76% de los argentinos redujo las salidas a comer afuera. Las razones: alto costo (74%), esperas prolongadas (41%) y malas experiencias previas (30%), sobre todo entre los más jóvenes.Los que siguen saliendo lo hacen para socializar (66%) o celebrar algo puntual. Eligen restaurantes casuales, cafeterías o bodegones. Solo el 12% opta por alta cocina.El problema no es solo de ventas. Es emocional. Abrir un restaurante y ver el salón vacío desanima. Pensar en promociones, reducir carta, cambiar de rubro o cerrar unos días, ya no son decisiones estratégicas: son defensas de último recurso.El rubro gastronómico, clave para el dinamismo urbano y el empleo en Argentina, atraviesa uno de sus momentos más frágiles. Lo que antes era un plan, ahora es un lujo. Y lo que parecía estable, ahora está en duda.
El estado concentra incautaciones récord de hidrocarburo ilegal; las autoridades locales ejecutan operativos en cuatro municipios clave; han detenido a siete personas por estos hechos
La caída en las tarifas del servicio eléctrico no duraron mucho y volvieron a subir para este miércoles
El principal índice de referencia del mercado nacional avanzó casi un punto porcentual al cierre de mercados de este miércoles
"Está muy amesetado, muy complicado y aparte los comerciantes con márgenes más reducidos", aseguró el secretario de Prensa de la entidad. Leer más
El ascenso del precio de los carburantes, que contrasta con la bajada experimentada en el mismo periodo del año anterior, ha empujado dos décimas al alza la tasa interanual de inflación este mes
El alto el fuego entre Israel e Irán dio luz verde para volver a los activos de mayor riesgo y dejar de lado las preocupaciones inmediatas sobre una crisis energética.
La actividad económica revierte la contracción de 2024 pero esa mejora no permea en el mercado laboral. En marzo, se perdieron más de 7.000 empleos privados y, en simultáneo, crece el cuentapropismo. Leer más
En mayo, los despachos de cemento marcaron una caída del 1 por ciento interanual y del 8 por ciento con relación a abril.
Las ventas de lácteos crecieron 15% en el primer cuatrimestre de 2025. El consumo sigue primarizado, pero la producción se recupera con fuerza.
La actividad industrial en España muestra un crecimiento en mayo, con un índice PMI de 50,5 puntos que indica un incremento en la confianza empresarial y la contratación de personal
El Banco de México pronóstico 4.1%
También aumentaron las ventas internas y las exportaciones de productos lácteos
Desde diciembre de 2023 hasta febrero de 2025, los salarios mostraron una suba del 18,7% en el sector formal, sin embargo, "todavía queda un tramo muy largo para recuperar", indicó el economista, Maximiliano Ramírez. Leer más
La eurozona logró un repunte inesperado al inicio de 2025, pero enfrenta un camino incierto, amenazado por tensiones comerciales, debilidad estructural y una recuperación aún frágil.
Un informe exhibió el fuerte retroceso de hasta 22% en la comercialización en los establecimientos comerciales de mayor y menor tamaño. Qué pasó con el resto de la actividad económica. Leer más
Entre enero y marzo se notificaron 45 ataques en todo el mundo, lo que representa un incremento de casi el 35% en comparación con los 33 incidentes del mismo período de 2024
Tanto supermercados como autoservicios siguen presentando una retracción en las ventas, aunque se desaceleró la caída. Cuáles son las canastas que crecieron levemente
Estos delitos cibernéticos son alentados por el auge de los pagos digitales; los intentos de estafa cada vez son más sofisticados, revela estudio
Los números de la gestión del actual Gobierno muestran que la actividad económica se va recuperando y anticipan buenos augurios para el 2025. En números concretos, creció 5,5% en diciembre de 2024, respecto del mismo mes de 2023; además, tuvo un alza de 0,5% en comparación con noviembre, según datos del Indec, en su informe Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE). Aún así, los números de un sector específico, siguen sin mostrar mejoras: el rubro de la construcción. Efectivamente, las cifras muestran que los costos de construcción en dólares acumulan un aumento del 107% desde octubre de 2023, según números del portal inmobliario Zonaprop. Muchos rubros de la economía subieron en el último año, pero lo alarmante para el sector de la construcción es que los precios de los inmuebles no acompañaron el aumento en los costos. "Desde fines del Gobierno anterior, los costos de construcción en dólares subieron, en promedio, el doble respecto de fines del Gobierno anterior, pero los precios de las propiedades crecieron tan sólo un 10%", explica Damián Tabakman, presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos.ARBA: cuáles son las condiciones para estar libre de pagar el impuesto inmobiliarioEn este sentido, una reciente medida del Gobierno de Javier Milei, difundida ayer por Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, en su red social X representaría un alivio para este sector del mercado inmobiliario. Su mensaje, en concreto, asegura: "Quiero resaltar la Disposición 1/25 del Secretario de Comercio @emarzoratiok de hace unos días que liberó el comercio de cemento. Y la Resolución 915/25 de @Mariolugones_ar de hoy que elimina engorrosos testeos para la importación de pinturas (los tests eran, a su vez, una farsa: según los que conocían como se hacían, resulta que no había test alguno sino que se transcribía lo que decía la etiqueta del producto)".Se trata de dos medidas publicadas en el boletín oficial (la del cemento y la de la pintura) que buscan generar una economía más abierta, tomando medidas que vuelven la importación de materiales un proceso más ágil y que ayudarían a que el sector de la construcción empiece a despegar. En palabras del ministro, la economía fue creciendo, pero "un sector que queda rezagado en el conjunto es el de la construcción". En ese sentido, agrega que "es un buen momento para empezar a abrir la economía generando una presión a la baja y mejorando las opciones en materiales para la construcción".Cuáles son las 7 ciudades de Sudamérica que podrían quedar tapadas por el agua en 75 añosDe esta forma, se abre un camino nuevo para poder importar insumos del exterior, sin contar con las trabas que existían anteriormente. "Las cementeras locales tenían el monopolio, pero ahora se podrán conseguir productos de afuera sin tanta burocracia, para un producto (cemento) que representan un costo grande a la hora de construir un inmueble", opina Tabakman. Además, explica que, con el Gobierno anterior, no estaba prohibido importar, pero existían "trabas paraancelarias", que incluían testeos o requisitos que, en la práctica volvían muy burocrática la importación y los desarrolladores inmobiliarios preferían comprar en la Argentina, para evitar esas trabas. "Estamos felices con la medida, hace que las empresas compitan con una economía más abierta y accesible", agrega Tabakman."Si la apertura de importaciones en pintura y cemento generan una caída en los precios del 25% en esos rubros, por cuánto implican esos materiales en el costo de construcción total de un inmueble (sin tener en cuenta los impuestos o el valor de un terreno) te generaría una baja del costo total de entre el 5% y el 8%, por lo que estamos hablando de un alivio muy relevante", explica Federico González Rouco, economista especialista en vivienda y miembro de la consultora Empiria.Alquileres: dos formas sencillas para calcular los aumentos por inflación en marzo 2025¿Por qué la construcción no creció como otros sectores de la economía?A la hora de explicar el crecimiento de los sectores de la economía y el rezago en el alza del mercado de la construcción, Sturzenegger señala en X: "Una hipótesis es que quedó con precios escalados en 2023 anticipando un escenario macro que luego no se materializó. En algunos rubros, como acero, hubo luego una caída importante de precio. Pero en otros no".Expertos del sector explican que, a lo que alude el ministro de Desregulación habría que agregar otros motivos. En el último año, la economía argentina en su conjunto se encareció en dólares, algo que también vivió el mundo de la construcción. Y dado que los precios subieron en pesos por la inflación y el dólar se mantuvo bastante estable a lo largo del 2024, cada vez se necesitaban más dólares para comprar lo mismo.Sumado a esa situación, si nos trasladamos un año atrás, se recordará que el dólar oficial subió abruptamente y se achicó la brecha con el blue, que anteriormente era muy alta. Para los productos de la construcción que eran importados, esto implicó un golpe fuerte. "Aunque el dólar billete estaba a $1300, estabas comprando algo que se había importado a $300. Pero, cuando desaparece la brecha en el tipo de cambio, se empezó a pagar algo que se importaba al nuevo valor del oficial, es decir, aproximadamente $1000, por lo que los costos subieron fuertementeâ?³, explica Federico González Rouco.Por qué aparecen lagartijas en una casa y cuál es su significadoSumado al tema dólar, estaba la dificultad para importar debido a los requisitos y condiciones que se imponían a las empresas que querían comprar insumos afuera y traerlos al país. "Los materiales necesarios para una obra residencial tenían cada uno su propio 'curro'. Yo estuve en China en marzo del 2024, cuando los costos se dispararon en la Argentina, y un porcelanato me costaba la mitad de lo que valía acá y era de mejor calidad. Pero si quería importarlo, tenía que viajar a la empresa china alguien del INTI de la Argentina, a quien tenía que pagarle el pasaje para que vaya a la fábrica y revise el porcelanato. Si había otro material que me interesaba en otra fábrica tenía que pagar el viaje a otra persona. Todos estos trámites hacían que cada insumo te terminara costando el doble que en la Argentina. Además, corrías el riesgo de pagar la verificación y que no te lo aprobaran. Ahora, con esto que liberan, asumimos que lo que hacen en China está bien y no hay nada que chequear. Y si el producto llega a ser malo, termina siendo responsabilidad del desarrollador que lo compra, que se hará cargo de las consecuencias.", cuenta Juan Manuel Tapiola, CEO de la desarrolladora Spazios. Y agrega: "Otro caso es el de las industrias más oligopólicas, como el cemento, donde entre dos o tres ponen las reglas de juego. En el caso de ese material, necesitabas certificados nacionales para poder importar, que tomaban meses y meses hasta que los otorgaban. Ahora este certificado nacional ya no será necesario".En resumen, los costos de la construcción, tanto de los materiales como de la mano de obra tuvieron un aumento fuerte, pero, además, el mercado inmobiliario es un sector que tradicionalmente responde lento a los cambios de precios. El real estate está mostrando signos de mejora, pero a un ritmo más incipiente, ya que los valores de los inmuebles no suben de un día al otro, sino que se caracterizan por tener un aumento más escalonado.
El último dato del EMAE mostró que la actividad económica de diciembre siguió acelerando. Los activos locales no se recuperan y esperan más "señales" para avanzar. Hoy el gobierno realiza un nuevo llamado a licitación de Lecap y Boncer. Leer más
La caída del euro por debajo de los 1,05 dólares coincide con un aumento de la inflación en EE.UU., mientras el BCE y la Fed preparan cambios en sus políticas monetarias
Incremento significativo del coste laboral en España, destacando un aumento del 7,2 % en sectores profesionales y un ascenso del 6,3 % en la industria hostelera durante el tercer trimestre
Las ventas minoristas en pymes arrancaron 2025 con una suba interanual de 25,5% a precios constantes, según el Índice de Ventas Minoristas elaborado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).Aunque la cifra refleja una tendencia positiva en comparación con el mismo mes del año anterior, los comerciantes advierten que el repunte no es suficiente para compensar la caída histórica de enero de 2024, cuando las ventas se desplomaron un 28,5%.El inicio del año estuvo marcado por un contexto desafiante: menor liquidez tras las Fiestas, una temporada de vacaciones que llevó a muchos consumidores al exterior y costos operativos que continúan en alza. A pesar de ello, los empresarios sostienen expectativas positivas para los próximos meses, impulsadas por la estabilidad de los precios y la reactivación del consumo con el inicio del ciclo lectivo."Este aumento en las ventas no alcanza a cubrir lo que se perdió a finales de 2023 e inicios de 2024. Sin embargo, si simplificamos el análisis, podemos decir que hay una tendencia positiva hacia la recuperación. El año pasado, casi todos los meses fueron negativos y cerramos con una caída del 10%", explicó a LA NACION el Ricardo Diab, Secretario General de CAME.Los siete rubros relevados por la entidad mostraron aumentos interanuales en enero. Entre los que más crecieron se destacan bazar, decoración y textiles para el hogar (+33,8%), seguido por alimentos y bebidas (+32,5%) y textil e indumentaria (+27,6%). No obstante, en la comparación mensual desestacionalizada, el comercio pyme registró una baja del 0,5% frente a diciembre, lo que sugiere que, si bien la tendencia es positiva, aún persisten desafíos estructurales.Uno de los principales obstáculos sigue siendo la pérdida de poder adquisitivo. A principios de 2024, la inflación provocó un deterioro significativo en los salarios, lo que impactó de manera directa en el consumo. En paralelo, muchos comerciantes ajustaron sus precios a un valor del dólar que finalmente no se materializó, lo que generó un desajuste en la demanda. "Hubo un comportamiento preventivo por parte de algunos sectores, con aumentos de precios y acumulación de stock, lo que agravó la situación", explicó el directivo.Otro factor clave es la financiación. La posibilidad de acceder a pagos en cuotas con tasas más bajas permitió sostener las ventas en sectores como indumentaria, calzado y marroquinería, además de generar un leve impulso en rubros como bazar y decoración. Sin embargo, este alivio no es suficiente para compensar el peso de los costos operativos, que siguen en aumento. La actualización de tarifas y servicios, sumada a la presión impositiva, afecta la rentabilidad y competitividad de las pymes.Mientras tanto, los comerciantes también observan con atención la apertura de importaciones, una medida que si bien beneficia al consumidor al ampliar la oferta y reducir algunos precios, genera incertidumbre en la producción local debido a las diferencias en las cargas impositivas entre países. "Es un factor a considerar. En el corto plazo, puede representar un alivio para el bolsillo del consumidor, pero a largo plazo puede comprometer a muchos sectores que ya operan con márgenes ajustados", advirtió el secretario general de CAME.A pesar de estos desafíos, la mayoría de los comerciantes mantiene una mirada optimista sobre el futuro. Según el relevamiento de CAME, el 58% de los encuestados espera que la situación de su empresa mejore en los próximos meses, mientras que un 37% cree que se mantendrá igual y solo un 5% prevé un deterioro.La expectativa se sostiene en la moderación de la inflación, la posible reactivación de la demanda interna y un contexto de mayor estabilidad económica. "Tenemos la convicción de que, en algún punto de este año, el consumo va a empezar a repuntar", concluyó Diab.