El ilustrador estuvo dentro del movimiento del simbolismo y tuvo influencias de artistas alemanes
La ciudad que inspiró al artista Paul Cézanne, con esa luz tan especial que tienen los pueblos de la Provenza francesa recuerda su legado con una serie de reaperturas, visitas guiadas a los lugares que habitaba y frecuentaba, y hasta recorridos artísticos por la montaña Sainte-Victoire, un macizo que veía desde su ventana y que fue como una musa, a la que retrató en más de 80 obras, entre óleos y acuarelas. En Aix-en-Provence, en el sur de Francia, cerca de Marsella, donde nació en 1839, pasó la mayor parte de su vida y murió en 1906, se desarrolla Cézanne 2025, entre junio y octubre, para sumergirse en su legado posimpresionista. ¿Qué hace que una pareja dure? 3 componentes que no pueden faltarLos eventos más destacados son la reapertura, el 28 de junio, tanto de la renovada Bastide du Jas de Bouffan -la mansión familiar del artista construida en el siglo XVIII- como del Atelier des Lauves, su último taller. Esta celebración es un gran reconocimiento que no tuvo en vida. Los habitantes de Aix, en general, despreciaron al pintor: los impresionistas buscaban agradar con su paleta encantadora; el posimpresionista Cézanne impactaba con sus colores audaces y formas geométricas. "Se necesita tiempo para que te guste Cézanne porque es más complejo de lo que parece", dijo Bruno Ely, director del Musée Granet, que presentará la mayor colección de obras de Cézanne hasta la fecha como parte de Cézanne 2025.La historia de Cézanne está entrelazada con las calles peatonales del casco antiguo, adoquinadas y con fachadas elegantes, muchas de la Edad Media. Para explorar esta ciudad fundada como colonia romana, se puede descargar Sur les Pas de Cézanne (En los pasos de Cézanne), un recorrido autoguiado que incluye la catedral de Saint-Sauveur, un mosaico ecléctico de estilos barroco, gótico y románico, desarrollado a lo largo de siete siglos, donde Cézanne asistía a misa los domingos.A pocas calles al sureste de la iglesia, el último departamento de Cézanne se encuentra a pasos del recién inaugurado Las Galinas, que ofrece un menú de tres pasos (35 euros) que incluye una deliciosa sopa de ajo. Es uno de los tantos restaurantes provenzales, incluido el Bastide Bourrelly con estrella Michelin, que se suman al fervor por Cézanne con menús inspirados en el pintor.En el corazón de los Valles Calchaquíes. La historia de un suizo y su visionario proyectoSitios de inspiraciónEn el barrio Mazarin, un bastión burgués del siglo XVII, una mansión ahora alberga el espacio de arte contemporáneo Gallifet, cuya exposición Échos de Cézanne reunirá a artistas emergentes y consolidados inspirados en Cézanne a partir del 1° de julio. "En mi vida, no entrará ningún Cézanne", proclamó Henri Pontier, curador de lo que hoy es el Musée Granet, en 1900. Su frase reflejaba la ambivalencia que Aix sentía hacia el artista que luego sería su hijo más célebre. Cumplió su palabra: Pontier murió en 1926 y el museo no adquirió un Cézanne hasta 1984. Décadas después, el museo es el centro de Cézanne 2025. En Cézanne au Jas de Bouffan (se inaugura el 28 de junio), el museo exhibirá 133 pinturas, dibujos y acuarelas prestadas por 75 instituciones de todo el mundo.El hilo conductor de la exposición es la finca rural Jas de Bouffan, al oeste del casco antiguo, comprada por el padre banquero del artista en 1859 como retiro bucólico. La mansión se convirtió en el eje de Paul. Utilizó sus paredes como lienzo durante 40 años y en la finca encontró campesinos que sirvieron como modelos para Los jugadores de cartas y comenzó su estudio obsesivo del cuerpo humano, que resultó en más de 200 obras como Bañistas.Las pinturas murales fueron retiradas meticulosamente con bisturí tras la venta de la finca en 1899, pero Cézanne 2025 las traerá de vuelta mediante proyecciones sobre las paredes. Los visitantes también podrán ver una obra que nunca se fue: L'Entrée du Port, hasta ahora desconocida y recientemente restaurada con gran esmero. Las visitas a Jas de Bouffan, que incluyen el primer estudio del artista, la gran cocina provenzal y el dormitorio de Madame Cézanne, solo se realizarán mediante recorridos guiados hasta el 2 de noviembre. También se podrá disfrutar de un paseo inmersivo por los jardines. El recién renovado Atelier des Lauves vale la caminata de 20 minutos cuesta arriba desde el centro, por la avenida que hoy lleva el nombre del artista. Cézanne construyó la villa dorada en 1901 para instalar su estudio, y allí murió en 1906 (abre el 28 de junio).Las canteras de Bibémus, rodeadas por Sainte-Victoire, ofrecen una perspectiva única del mundo creativo de Cézanne, a 6 km de Aix-en-Provence. Rodeado por la piedra ocre de la meseta rocosa pintó aquí 11 óleos y 16 acuarelas, incluyendo la mundialmente famosa La Roca Roja.
Del 23 al 25 de mayo, Bogotá será escenario de 'Van Gogh: la locura del color', una obra teatral que explora los dilemas emocionales y creativos del pintor neerlandés. La producción combina música, danza y proyecciones audiovisuales para sumergir al público en la mente del artista
La escritora, travestida de un joven antropólogo cultural, habla entre otros temas sobre la visualidad y aquí pone el foco en las fotografías del gran pintor francés.
Hombre de mal carácter tuvo una disputa con el Papa que le encomendó la realización de tamaño trabajo. Hubo problemas de moho que lo obligaron reiniciar la tarea que tardó más de 50 meses en concluir
El próximo 15 de mayo se lanzará la esperada expansión de Kingdom Come: Deliverance 2
Con despliegue monumental, el artista argentino muestra habilidad y amor por el oficio del pintor, con más de 70 obras y una instalación en el Museo Nacional de Arte Decorativo. En Versalles, entre sus dibujos, pasteles y óleos también rinde homenaje a Sergio de Loof, fallecido artista de los 90 que inspiró a muchos de los contemporáneos.
Exploración de la amistad entre Picasso y los galeristas Gaspar, así como su conexión con el movimiento surrealista, en exposiciones programadas para 2025 en el Museo Picasso de Barcelona
Acaba de morir a los 91 años, rodeado de su familia, uno de los pintores más influyentes del arte argentino desde los años sesenta.
El 6 de abril de 1987 David salió de su casa, situada en la barriada de 25 Años de Paz, alrededor de las seis y media de la tarde y nunca volvió
La galería Calvaresi presenta la muestra de Luis Centurión, "Y de hay", primera exhibición individual del artista nacido en Concepción del Uruguay. Se expondrán veinticuatro óleos de distintos períodos que van de la década del '50 a principios del '80. Curada por Santiago Villanueva, la muestra se desprende de un trabajo de investigación, restauración y puesta en valor que la galería inició en 2019. Leer más
Carlos Gallardo (1944-2008) era un artista que quería documentar el mundo de su tiempo. Como un arqueólogo disparatado pero meticuloso, juntaba cosas por donde iba: chapitas, jeringas, fotos, boletos, negativos, frasquitos, bisagrasâ?¦ toda recolección pasaba luego por el proceso de clasificación, documentación y archivo en su impoluto taller. Después, con ese conjunto de materiales inefables creaba objetos e instalaciones que daban cuenta de su circunstancia.Los mozos de la Casa Rosada, la antesala de Malvinas y un general desesperadoA casi veinte años de su muerte, la galería Oda (Paraná 759, 1º piso) emprendió una arqueología al revés: entrar en su taller ubicado en la esquina de Entre Ríos y Moreno para encontrar rastros de su paso por esta vida. Con la curadora Patricia Rizzo y de la mano de su compañero por 32 años, el gran coreógrafo Mauricio Wainrot, revisaron sus cajones y anaqueles (que están tal cual él los dejó). Sacaron a la luz una exposición que da cuenta de su perfil menos visto en sus exposiciones, el de pintor.El hilo invisible, así se titula, incluye de alguna manera esa esencia de recolector. Sus cuadros-objeto están hechos con soportes y objetos, como un viejo buzón, calendarios, cartas y fotos antiguas, postales, cajas, máquinas abandonadas, entre otros. Una obra tiene soporte mitad de plomo y mitad de cartón. Otro cuadro está pintado sobre una bolsa de correo canadiense. Gallardo lograba así sumergirse en grandes constantes existenciales: el ser, el tiempo, la memoria y la despersonalización del hombre contemporáneo. "Encontré que en un reportaje había dicho que él lo que buscaba era el hilo invisible entre las cosas y los acontecimientos. Y me pareció hermoso porque el arte justamente hace eso, señalar cosas que a veces uno ni siquiera está consciente y que el artista de alguna manera percibe", comparte Rizzo.El taller también se puede visitar para ver, por ejemplo, la gran instalación de jeringas que hizo para su muestra en el Museo Nacional de Bellas Artes en 2004, Chupasangre, o sus quince agendas forradas en plomo. "Era tan meticuloso y ordenado que fue facilísimo pensar esta muestra: estaba todo preparado. Lo difícil fue elegir qué dejar fuera", sigue la curadora. "Como un gran curioso, todo le llamaba la atención. Mirada de niño un poco", suma Wainrot.Gallardo era altísimo, casi dos metros, y de excelente humor. Así de grandes son sus pinturas y tienen mirada cenital o de drone, la misma perspectiva que él tendría desde arriba de sus hombros. A vuelo de pájaro, pinta escaleras, espacios interiores, pequeñas situaciones, donde el gran protagonista es el color. "La pintura siempre estuvo", dice Rizzo. Son obras que no se ven desde los 80. Varias nunca se expusieron.Como Diseñador de Comunicación Visual, fue Director de Arte del Teatro San Martín de Buenos Aires, de Editorial Abril, de Editorial Hyspamérica y de Ediciones Summa. En 1985, luego de ganar la Bienal de Diseño, obtuvo el Lápiz de Plata por la creación de afiches para el Teatro San Martín, donde comenzó una larga e intensa colaboración con Wainrot, creando escenografías y vestuarios para más de cuarenta obras. A partir de 1985, tras dejar la Argentina, se dedicó de lleno a la plástica.Juntos vivieron en Canadá, México, Suecia, Bélgica y Chile. Trabajó con The English National Ballet, Royal Ballet of Sweden, Ballet del Teatro San Carlo de Nápoles, Bat Dor Dance Company of Israel, Ballet del Teatro Colón, Ballet Nacional del Sodre, Singapore Dance Theatre, entre otras compañías de ballet y danza. En 2008, Gallardo recibió el premio Benois de la Danse, que se otorga anualmente en el Teatro Bolshoi de Moscú, a la mejor escenografía del año 2007, por la obra La Tempestad.Un maniático del orden y la limpieza, que supo convivir con un genio creativo... más relajado con la prolijidad de la vida cotidiana. "Era totalmente racional y, a la vez, totalmente creativo. Por la calle, iba peleándose con los cables, con los postes, con los camiones que pasaban por Avenida Independencia y que no podían pasar. ¡Consiguió que los camiones fueran por Garay! Era un luchador empedernido del orden y de la constancia de la organización. Cuando nos fuimos de la Argentina, yo tenía 39 y él 41. Dos años antes, había fundado con Ronald Shakespear la carrera de Diseño Gráfico en la UBA. Tenía esa cabeza ordenada y siempre pintaba. Su primera exposición fueron pasteles. A los 40 años dijo ¡no trabajo más, quiero dedicarme exclusivamente a la pintura! Nos fuimos a vivir a Bélgica. Yo le decía que se presentara en una galería de París, pero él no quería. No estoy listo, decía, y seguía pintando series nuevas. Se quedaba dos días, tres días, adentro del estudio y no se movía", cuenta Wainrot."Le ponía a sus pinturas los títulos de obras que yo hacía -continua Wainrot-. Por ejemplo, From far away (donde él hizo el vestuario) o Debajo del olvido, de la que pintó toda una serie. No sabíamos de quién eran las ideas. ¿Dónde empieza una idea? Él, por ejemplo, me preguntaba por qué no hacemos una obra sobre Janis Joplin. Gané premios por esa obra y la hicimos en todo el mundo. Pero fue una idea de él. Nos divertíamos muchísimo".En 32 años Gallardo y Wainrot no se separaron ni un día. Wainrot quedó a cargo de su legado y esta exposición es la primera que organiza para poner su obra en escena otra vez: "Quiero que la obra circule, que la tengan los museos. Algunos afuera tienen obras. Acá, por ejemplo, Chupasangre la hizo para el Museo Nacional de Bellas Artes y yo creo que esa obra tiene que estar ahí".Para agendarCarlos Gallardo, El hilo invisible. Galería Oda, Paraná 759, 1º piso, hasta el 26 de abril.
Filmin presenta 'Bonnard, el pintor y su musa', una biografía sobre la tormentosa relación entre Pierre Bonnard y su esposa Marthe, cuya vida quedó marcada por el arte y la tragedia
El INSS rechazó la prestación en 2019 al considerar insuficientes sus lesiones
"La pintura y la medicina son dos vocaciones paralelas en mi vida, que me han proporcionado extraordinaria felicidad y al mismo tiempo ciertas incomodidades", escribía el doctor y artista Florentino Sanguinetti en un ensayo de 2011 donde recorría sus años entre estas dos aguas. Murió ayer, un día antes de cumplir 94 años. Deja una trayectoria invaluable, como un médico noble y eximio, heroico en muchos momentos de su vida. Como pintor, también: en sus nueve décadas, llegó a reunir más de cien obras en una retrospectiva que se realizó en el Museo de Arte Contemporáneo de Unquillo, institución que ayudó a fundar.Porteño de siempre, nacido en 1932, egresado 1949 del Colegio Nacional de Buenos Aires, encontró en las Sierras de Córdoba un oasis para su retiro a partir de la pandemia, junto con su esposa, Solange Fernández Ordóñez, psicóloga y escritora. El mismo paisaje de los veranos de su infancia. Merecido descanso después de una incansable vida al servicio de los demás. Lo despiden con dolor sus cuatro hijos y enorme cantidad de amigos, colegas, discípulos y pacientes.Como médico, fue uno de los más distinguidos. La Academia Europea de Artes y Ciencias, con sede en Viena, lo designó miembro de la institución, en reconocimiento a su trayectoria. La Academia Nacional de Medicina le había otorgado el Premio Hipócrates, y fue homenajeado a sus 90 años por la Academia Argentina de Ética en Medicina. Entre sus logros está haber sido director del Hospital de Clínicas de Buenos Aires por diez años -donde además, creo el museo del hospital-. Como mastólogo, lideró la lucha contra el cáncer de mama. Fundó en 1974 el Centro de Patología Mamaria como parte de la Liga Argentina de la Lucha Contra el Cáncer (LALCEC): "Organicé el centro y con el tiempo se fueron cubriendo turnos de mañana y de tarde, con más profesionales. Pero para hacerlo puse como única condición desarrollar esa actividad en forma gratuita y así lo hice durante 43 años", contaba en una entrevista. Fue director del Programa de Detección de Cáncer Mamario, profesor de Cirugía de la Facultad de Medicina de la UBA y autor de casi un centenar de publicaciones científicas. También fue investigador del Conicet. Se especializó en cirugía mamaria y operó hasta el año 2013, cuando tenía 81 años. Continuó atendiendo en su consultorio hasta fines de 2019, por insistencia de sus pacientes. Se negaban a cambiarlo por otro.El 18 de julio de 1994, dirigía el hospital escuela más importante del país cuando voló la AMIA en un atentado, y le tocó liderar al equipo de salud que, por su cercanía con la mutual judía, recibió a la mayoría de los heridos. Decía que ese fue el día más importante de su carrera: logró salvar muchas vidas. "Suspendí las actividades de cirugías para dejar los quirófanos absolutamente a disposición. Al cabo de pocos minutos, empezaron a llegar los heridos en tablones, acostados sobre puertas. La gente traía a heridos muy graves directamente al hospital. Cortamos la calle Córdoba y se estableció una especie de trayecto rápido para que llegaran los pacientes", recordaba en entrevistas posteriores. En el Clínicas atendieron a unas 100 personas en pocas horas. Fueron operadas (algunas varias veces), otras internadas con diversos tratamientos, fracturas, cortes con los vidrios que volaron en todas direcciones. Organizó el triage y una comunicación eficiente con los familiares. No fue fácil comandar esa nave: "En un momento dado, me tuve que encerrar en la dirección para llorar solo, porque no podía más. Era una catástrofe tan inmensa, era una demanda tan enorme. Recibí por parte de todos mis colaboradores y de mi familia un apoyo importante, que hace que al recordarlo, me emocione muchísimo".Una anécdota trasluce su buen corazón, que no claudicaba en situaciones de crisis: "Se corrió la voz de que necesitábamos agua mineral, una información totalmente inútil e inexacta. Empezó a llegar una multitud de personas con grandes frascos. Alguien me dijo que no los dejara entrar porque molestaban y yo tomé la medida inversa: que toda la gente que acudía para traer algo fuera aceptada. No quise frustrar el gesto que tenía la gente de venir a colaborar. Y así fue como se armó una montaña de botellas". Cuando se reconstruyó el edificio de la mutual judía, fue invitado a colocar la piedra fundamental del nuevo edificio. Siempre lo recibían con honores, en cada aniversario.Un remanso en la pinturaEn una profesión tan intensa, a la que se entregaba con devoción, encontraba un remanso en la pintura. Pintaba desde niño, mucho antes de probarse el delantal blanco y colgarse para siempre un estetoscopio del cuello. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Múnich y expuso sus pinturas en el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires en 1995, y en galerías y museos de Múnich, Bonn y París, entre otras ciudades. Su obra está reunida en un libro monográfico de la editorial Más Sustancia. También es autor del libro Historia del Hospital de Clínicas, en coautoría con Federico Pérgola. "Para mí la pintura nunca fue un pasatiempo. Siempre me consideré un pintor profesional -declaró en una nota con la periodista Gabriela Navarra-. Conservo todas mis obras, que son más de 400. No tengo estilos ni épocas: pinto sin prejuicios. Es difícil hablar de la pintura porque la pintura está hecha para ser vista, para ser observada en silencio. Pero yo he pintado mucho abstracto y también figurativo. No he cultivado un estilo único". Nunca vendió sus obras. "No tengo marchand, nunca me interesó el negocio. He regalado, sí. Hay varios museos que tienen obras mías y también amigos, que felizmente tengo muchos también", decía.En un artículo titulado Medicina y Arte, encuentro de Vocaciones, escrito para el libro Bioética y humanidades médicas, describió las historias de personajes famosos que como él tuvieron dos fuertes vocaciones, como Louis Pasteur, bacteriólogo y pintor, o Antón Chéjov, escritor y médico. También analizó su propia obra: "Mi pintura se inscribe en esta visión barroca, donde lo lineal deja paso a lo pintoresco, y donde las figuras o las composiciones abstractas revelan confusión en un conglomerado de colores intensos que se mueven sin reposo. Toda la precisión que requiere mi actividad de cirujano desaparece cuando ingreso en la pintura con mis empastes borrosos. Los delgados y filosos instrumentos quirúrgicos dejan paso a las espátulas gruesas que permiten una factura expresiva, plena de ambigüedades, de movimiento y de musicalidad".Fue becario de la Fundación Alexander Von Humboldt y presidente de la Institución Cultural Argentino Germana, donde durante 50 años actuó como jurado para la selección de becarios por la Embajada de ese país. El presidente de Alemania Federal le otorgó la Orden del Mérito en reconocimiento a su labor de intercambio cultural entre Argentina y Alemania. Había llegado por primera vez cuando todavía era estudiante de Medicina. Durante el día asistía al Instituto de Patología y por la tarde a la Academia de Bellas Artes de Múnich, donde estudiaron Paul Klee y Vasili Kandinsky. "Fui el primer becario que llegó a Alemania después de la Segunda Guerra Mundial. Conocía el idioma porque lo había estudiado desde niño y eso me permitió ir a la ópera, al teatro, leer poesía, novelas o filosofía en alemán y generar muchas amistades", recordaba. La consideraba su segunda patria.Era un verdadero intelectual, de conocimientos científicos y de intimidad profunda, como se trasluce en sus obras pictóricas. Amigo de Jorge Luis Borges, el escritor había sido testigo de su casamiento.Su forma de ser era cordial, amena, cálida y siempre hospitalaria con su familia y sus numerosos amigos. Así lo despide uno de ellos: "Qué decir de Buby sin que se nos humedezcan los ojos. Se fue yendo lentamente, como los atardeceres de los veranos de Unquillo, en su terruño amado. Y aunque venía de una familia con larga tradición en el laicismo, en sus últimos días llamó a un sacerdote porque, dijo, quería morir en la religión católica. Él tenía esa forma tan especial de ser. Además de un científico y un artista destacado, era un verdadero caballero y un hombre de un corazón noble, que se traslucía en su limpia mirada, su sonrisa y su cálida cortesía. Un señor".
Nikas Stepanovich Safronov es una de las figuras más importantes del arte plástico ruso actual y mantuvo un cordial encuentro con pontífice en el Vaticano
Las piezas que se exhiben hoy en el museo ubicado frente a la plaza central de Villa del Totoral serán trasladadas -tras un plan de restauración- a la casa natal de Octavio Pinto, espacio en el que hoy funciona el Juzgado de Paz. Leer más
El Museo Van Gogh de Ámsterdam volvió a desestimar la autoría del artista neerlandés en el caso del cuadro Elimar, adquirido en 2016 por menos de 50 dólares en una venta de garaje en Minnesota, Estados Unidos, y atribuído la semana pasada al pintor de los girasoles por un equipo de peritos y especialistas.Un portavoz del museo ratificó hoy a LA NACION vía correo electrónico la desestimación que había trascendido en el medio especializado ArtDependence: "Basándonos en nuestra opinión, ya expresada en 2019 respecto a esta pintura, mantenemos nuestra postura de que no se trata de una obra auténtica de Vincent van Gogh".Sale a la luz una reliquia del Cervantes que sobrevivió al trágico incendio del teatroEl cuadro, inicialmente adquirido por un coleccionista de antigüedades, fue vendido posteriormente a LMI Group International, empresa neoyorquina especializada en análisis de datos aplicados al patrimonio cultural. La compañía, que se dedica a autenticar y valorar obras de arte mediante métodos científicos y tecnología patentada, publicó un extenso informe de 458 páginas en el que concluyó que Elimar había sido pintado por Vincent van Gogh en 1889, durante su internación en el hospital psiquiátrico Saint-Paul-de-Mausole, en Saint-Rémy-de-Provence, Francia.La controversia en torno a la autenticidad de la obra no es nueva. En 2019, cuando el anterior propietario intentó validar el cuadro, el Museo Van Gogh ya había rechazado la atribución. En un mail fechado el 1° de febrero de ese año, la institución explicó que, tras examinar detalladamente las imágenes enviadas y basándose en las características estilísticas de la pintura, no podía reconocerla como parte del legado de Van Gogh.El proceso de autenticación de LMI Group International contó con la participación de aproximadamente veinte especialistas, entre ellos historiadores del arte, conservadores, científicos y químicos. Según la firma, Van Gogh se habría inspirado en Retrato de Niels Gaihede, de Michael Ancher. La pintura representa a un conocido pescador de Skagen, en el norte de Dinamarca, con un gorro, una pipa en la boca y una aguja de coser redes en una mano, con un paisaje marino de fondo.Van Gogh no habría copiado la obra de Ancher, sino que la "tradujo". En su informe, LMI cita una carta que el pintor envió a su hermano Theo en 1890, en la que explicaba que no se dedicaba a "copiar pura y simplemente" obras de otros artistas, sino a "traducirlas a otro lenguaje, el de los colores, las impresiones del claroscuro y el blanco y negro"."Al integrar la ciencia y la tecnología con las herramientas tradicionales de la experiencia, el contexto histórico, el análisis formal y la investigación de la procedencia, nuestro objetivo es ampliar y adaptar los recursos disponibles para la autenticación de obras de arte basándonos en las propiedades únicas de las obras que están bajo nuestro cuidado", había expresado en un comunicado de prensa Lawrence M. Shindell, presidente y CEO de LMI.Según detalla el sitio estadounidense Artnews, LMI emitió un comunicado luego de que se hiciera pública la negativa del Museo Van Gogh, afirmando que estaban perplejos "ante el hecho de que el Museo Van Gogh haya invertido menos de un día laboral para rechazar de manera sumaria los hechos presentados (â?¦) sin ofrecer ninguna explicación, y mucho menos sin estudiar directamente la pintura, limitándose a observar una reproducción en formato JPEG.""Esperábamos que el Museo detallara los hechos específicos de nuestro extenso informe con los que sus expertos no están de acuerdo y las razones de ello, así como los datos que el Museo pueda tener y que, en su opinión, cambiarían la atribución, explicando por qué con particularidad. Hemos ofrecido conectar al Museo con los académicos y científicos que contribuyeron al informe para discutir sus hallazgos, y también hemos propuesto llevar la pintura a Ámsterdam para su estudio en persona", señaló LMI Group.