Tras conocerse la trágica noticia de la muerte de la turista brasileña Juliana Marins luego de estar más de tres días atrapada dentro de un volcán en Indonesia, el padre de la joven, Manuel Marins, escribió una emotiva carta para despedirla en medio de la conmoción por su caso. La publicista de 26 años cayó el sábado pasado dentro de una grieta del volcán Rinjani, el segundo más alto de Indonesia, mientras realizaba una caminata de varios días. El terreno es de difícil acceso, factor que dificultó las tareas de rescate. Cuando pudieron llegar a ella tres días después, la encontraron muerta.Horas después de darse a conocer lo ocurrido con Juliana, Manuel, a través de su cuenta personal de Instagram, primero plasmó la letra de la canción "Pedaço De Mim" ["Pedazo de mi" en portugués] de Chico Buarque (1978) junto a una foto de su hija, sonriente, delante de un paisaje verde. Horas después, subió una foto familiar con un extenso texto. View this post on Instagram A post shared by Manoel Marins Filho (@manoel.marins.3)"Juju, mi belleza, mi tesoro, mi hija, mi amor. Siempre fuiste muy especial. Traviesa, inquieta, con una preciosa sonrisa y unas inmensas ganas de vivir intensamente. Siempre preocupado por mí y Estela [su madre]", introdujo en una carta desgarradora por la pérdida de su hija en este fatal accidente. Y continuó: "A principios de este año nos dijiste que ibas a hacer este viaje de mochilera mientras eras joven y te apoyamos. Cuando te pregunté si querías que te diéramos algo de dinero para ayudarte con el viaje, dijiste 'nunca'. Y así viajaste con tus propios recursos que ganaste como resultado de tu trabajo. Y qué feliz fuiste de poder hacer realidad ese sueño. Y qué felices somos con tu felicidad. Seguiste haciendo lo que más te gustaba y eso nos reconforta un poco el corazón". View this post on Instagram A post shared by Manoel Marins Filho (@manoel.marins.3)Tras expresar que su presencia "permanece en la vida" de todos los que la conocieron y en los lugares en los que estuvo, Manuel aseguró que estará "especialmente" en su corazón, en el de su madre y en el de su hermana [Mariana]. "Vuela, Juju, vuela. Vuela a los brazos del Padre Eterno que te espera para guardarte por siempre en sus brazos de amor infinito", siguió el padre.A modo de cierre, volvió a despedirse de su hija: "Acá nos quedaremos, seguros de que algún día nos volveremos a encontrar y haremos ese vuelo en parapente que estábamos planeando para tu cumpleaños. Allá en el cielo, el buen Señor nos proveerá esto. De los que siempre te quisieron: papi, mami y Mari".El casoMarins estaba con otros seis turistas asistidos por dos guías el sábado por la tarde, según dijeron las autoridades del Parque Nacional de Gunung Rinjani. De acuerdo a relatos de testigos, la joven se quedó atrás del grupo para descansar y fue en ese lapso de tiempo en el que cayó dentro de la grieta.Al reportar el accidente a las autoridades, el lunes por la mañana equipos de rescate habían logrado localizarla mediante un drone. La joven estaba atrapada en un acantilado rocoso, a unos 500 metros de profundidad, en las laderas del Rinjani.Durante el proceso para poder alcanzarla, los profesionales se enfrentaron a terrenos extremos y condiciones climáticas cambiantes, con una densa niebla. Estas circunstancias redujeron la visibilidad en el lugar y aumentaron el riesgo de la operación, según las autoridades. Ya este martes, mientras todavía había indicios de que Marins seguía con vida, se desplegó un nuevo operativo alrededor de las 15 (hora local), aún con condiciones climáticas adversas. Finalmente, los rescatistas lograron llegar a ella, pero la encontraron muerta. Llevaba más de tres días sin comida ni agua. "Hoy, un equipo de rescate consiguió llegar hasta el lugar donde estaba Juliana Marins. Con intensa tristeza, informamos que ella no resistió. Seguimos muy agradecidos por todas las oraciones, mensajes de cariño y apoyo que hemos recibido", se indicó en un breve comunicado difundido en la cuenta @resgatejulianamarins, administrada por la familia de la joven oriunda de Río de Janeiro. View this post on Instagram A post shared by @resgatejulianamarinsSu familia aseguró que los guías la abandonaron durante más de una hora antes del accidente, publicó el medio brasileño G1. "Juliana estaba en el grupo, pero se cansó mucho y pidió parar un rato. Siguieron adelante y el guía no la acompañó", dijo su hermana Mariana.La caminata estaba programada del 20 al 22 de junio, con una duración de tres días y dos noches.
Luego de tres días de intensos operativos de rescate, se confirmó una noticia que conmovió a miles de personas: Juliana Marins, una joven brasileña de 26 años que había caído mientras realizaba una exigente caminata en el volcán Rinjani, en Indonesia, fue hallada muerta. Su familia fue la encargada de compartir el desenlace a través de las redes sociales, lo que generó conmoción entre quienes seguían de cerca su historia.Juliana era publicista y oriunda de Niterói, en el estado de Río de Janeiro. A comienzos de este año había iniciado una travesía como mochilera por el sudeste asiático. En sus redes sociales se presentaba como una apasionada de los viajes y los deportes al aire libre, y compartía postales desde playas, montañas, clases de yoga, travesías en moto e incluso rutinas de pole dance. Su estilo de vida libre y aventurero atrajo a miles de seguidores, por lo que su historia tuvo un fuerte impacto público. View this post on Instagram A post shared by @resgatejulianamarinsLa caminata que terminó en tragedia se desarrollaba en el Monte Rinjani, el segundo volcán más alto de Indonesia, con más de 3700 metros sobre el nivel del mar. Juliana formaba parte de un grupo de seis turistas asistidos por dos guías locales. Según el testimonio de su hermana Mariana en diálogo con el medio G1, la joven se sintió agotada durante el segundo día de caminata y pidió detenerse a descansar. En ese momento, el resto del grupo continuó sin esperarla. "Juliana se desesperó porque nadie volvió y se cayó. Abandonaron a Juliana", expresó con dolor.El guía que la acompañaba, Ali Musthofa, ofreció otra versión: dijo que solo estaba a tres minutos de distancia y que, al notar su ausencia, volvió a buscarla. "Vi la luz de una linterna en un barranco y oí la voz de Juliana pidiendo ayuda. Le dije que la ayudaría y traté de tranquilizarla", contó al diario O Globo. A partir de ese momento, comenzó una carrera contrarreloj para rescatarla.Así fueron sus últimas horasAunque hay pocos detalles confirmados sobre cómo vivió Juliana esos tres días en el volcán, se sabe que quedó atrapada en un acantilado de difícil acceso, a unos 350 metros de profundidad. En las imágenes captadas por un dron se la ve sentada en la ladera, consciente, sin medios para moverse. Según su familia, pasó más de 72 horas sin agua, comida ni ropa adecuada para las bajas temperaturas del lugar. Estuvo completamente sola, esperando ayuda en medio de un terreno hostil, con niebla densa, frío extremo y visibilidad reducida.Mientras tanto, dos equipos de rescate fueron desplegados por las autoridades indonesias. Sin embargo, las condiciones climáticas y las características del terreno dificultaron gravemente el operativo. El lunes, los rescatistas se vieron obligados a detener la misión al no poder asegurar correctamente el anclaje en la zona. Finalmente, el martes por la tarde se retomaron las tareas, pero cuando lograron llegar al lugar, Juliana ya no presentaba signos vitales.La caminata que había iniciado â??y que debía durar tres díasâ?? es considerada una de las más exigentes del país. Su familia insiste en que hubo negligencia por parte de los guías, al dejarla sola en un entorno tan riesgoso. La noticia de su muerte generó conmoción, sobre todo en Brasil, donde su historia fue ampliamente compartida. Además del dolor, dejó instalada una reflexión sobre los cuidados que deben garantizarse en este tipo de experiencias turísticas y la responsabilidad de quienes lideran actividades en entornos extremos.
Llevaba más de tres días desaparecida. Finalmente fue encontrada sin vida.Tenía 26 años y se encontraba haciendo senderismo.
Luego de conocerse la noticia de que Juliana Marins, una turista brasileña que estaba de vacaciones en Indonesia, se había caído el sábado pasado en un volcán y de que sus allegados habían iniciado una campaña para lograr un rescate con vida, este martes se confirmó su muerte. La familia, que había creado un Instagram especial para dar novedades sobre la crítica situación de Marins, informó así su fallecimiento: "Hoy el equipo de rescate consiguió llegar hasta el lugar donde Juliana Marins estaba. Con inmensa tristeza informamos que ella no resistió. Estamos muy agradecidos por todas las oraciones y los mensajes de cariño y apoyo que recibimos". View this post on Instagram A post shared by @resgatejulianamarinsSegún el diario O Globo, la joven de 26 años era publicista y oriunda de Niterói, estado de Río de Janeiro. Había iniciado su travesía como mochilera por el Sudeste Asiático en febrero de este año. En redes se mostraba como "apasionada por los viajes y los deportes al aire libre". En el último tiempo Marins compartió postales en los distintos países que visitó. Aventurera, publicó imágenes de travesías en moto, playas, picos montañosos, comidas típicas y clases de yoga. Además, destreza para sus bailes de pole dance. Su historia causó conmoción, sobre todo en Brasil, ya que estuvo atrapada tres días dentro del volcán Rinjani, uno de los más conocidos de Indonesia y el segundo más alto del país, tras caer mientras realizaba una caminata. El lunes por la mañana, equipos de rescate habían logrado localizarla mediante un dron y tomaron una foto suya en el volcán. La joven estaba atrapada en un acantilado rocoso, a unos 500 metros de profundidad. De acuerdo a lo que reportó el medio G1, en base al testimonio de Mariana -la hermana de Juliana-, la publicista había salido con un grupo de cinco personas y un guía local, y en el segundo día de caminata dijo que estaba cansada para seguir con el trayecto. Entonces, se habría quedado sola y en ese momento habría caído. Turistas que pasaron por el lugar notificaron que estaba encerrada en el acantilado y contactaron a sus allegados. "El guía siguió viaje para llegar a la cumbre. Nosotros solo tenemos esa información en base a medios locales [de Indonesia]. Juliana se desesperó porque nadie volvió y se cayó. Abandonaron a Juliana", se quejó Marina, según G1.Alertadas de la desaparición de la joven, las autoridades de Indonesia movilizaron a dos equipos de expertos para llegar al lugar. Este martes, mientras todavía había indicios de que Marins seguía con vida, se desplegó un nuevo operativo alrededor de las 15 (hora local), aún con condiciones climáticas adversas. Finalmente, los rescatistas lograron llegar a ella, pero la encontraron muerta.