Detrás de los flashes y los aplausos, hubo silencios que pesaban, tropiezos que no se contaban y decisiones que desafiaron lo que el mundo esperaba de él
El aclamado actor, productor y director estadounidense cumple 64 años y se consolida como figura influyente en la industria y símbolo de sofisticación, con una carrera marcada por constantes transformaciones estilísticas
Títulos como "The Mandalorian" y "Andor" expanden el universo de una galaxia muy, muy lejana en Disney+.
NUEVA YORK.- "¡¡¡Es tan pintónâ?¦!!!". En una reciente visita a Buenos Aires, fui con mi familia a ver Druk, en la calle Corrientes. Cuando el protagonista, Pablo Echarri, salió a escena, mi mamá â??mamá, la Dama de Hielo: adorable, sí, pero impecable, imperturbable, siempre con suave sonrisa pero jamás dada a un exabrupto o a algo que pudiese incomodar a los demásâ?? no pudo contenerse.En pleno teatro, se le escapó dicho comentario/suspiro en voz alta. Mi hija y yo nos miramos horrorizadas. Pero la entendíamos. Cuando desde el diario me pidieron, días atrás, que fuera a ver Good Night and Good Luck, la obra que con $3.78 millones en su primera semana estableció un nuevo récord de taquilla para obras que no son musicales en Broadway y está protagonizada por George Clooney, imaginé que me pasaría algo similar. Soy Generación X, crecí con E.R. Emergencias en la tele y nunca entendí cómo los pacientes no morían del corazón (aunque hubieran entrado por una uña encarnada) apenas el Dr. Ross los miraba fijo y les tomaba el pulso. Y cuando entre mis amigas se debatía el eterno "George Clooney vs. Brad Pitt", con la misma pasión con la que los fans del tenis discutían Federer vs. Nadal, yo siempre fui, para ambos casos, del equipo de los morochos sensuales y ligeramente peligrosos.En carne y huesoDesde sus inicios, Clooney no tocaba las tablas. La última vez había sido en 1986, en la obra Vicious, donde interpretó a un proxeneta y traficante de drogas con tanto realismo que esto le permitió conseguir un agente y, como dicen aquí, "todo lo demás es historia". Así que ni yo ni casi nadie, salvo políticos, celebridades, y supongo que vecinos de su famoso palacete a orillas del Lago de Como, tenía experiencia directa sobre lo que generaba verlo en vivo, en carne y hueso. La expectativa mataba al auditorio. Era, en su mayoría, femenino, bien vestido. A mis 51 años, yo era (o lucía, según fantaseo) de las más jóvenes. Que hubiera tantas entradas para la platea y los palcos en el rango de los 800 dólares dejaba claro el perfil del público. Por los comentarios en la fila, era evidente que había poco turista nacional o internacional, pero sí muchos neoyorquinos (sobre todo neoyorquinas) muy pudientes y muy bienpensantes, que votan al ala más progresista del Partido Demócrata, básicamente, el grupo para el cual Clooney es un santo patrón. Y el santo patrón, espléndido, estaba por salir a escena.Estética años 50La obra comienza con una cantante que interpreta estándares de jazz que funcionan como un coro griego que va comentando, o anticipando, la acción. Luego ella aparece entre escenas, otorgando una capa adicional de significado y emoción a la narrativa con temas que reflejan y amplifican los temas de la obra, como la integridad periodística y la lucha contra la censura. Su presencia en el escenario, ambientado como un estudio de grabación de CBS, establece el tono de los años 50 y subraya la tensión entre el arte y la política. Y, de pronto, aparece. Él; George. Solo, en el escenario. Pero, aunque estuve muy atenta, nadie suspiró. Nadie lanzó un comentario admirativo en voz alta. No solo porque el público era serio (de una encuesta informal que hice a la salida, ninguno había visto un musical que no fuese Hamilton en la última década), sino porque en la piel de Edward R. Murrow, Clooney no estaba irreconocible, pero sí... bastante feo. No por las arrugas marcadas â??que, de hecho, le suman gravitas, perfectas para encarnar al periodista que desafió con entereza y dignidad la caza de brujas del macartismoâ??, ni por el exceso de "bronceado de Lago de Como", como le gusta burlarse a cierta prensa conservadora. Lo que fallaba era el pelo. Un foco lo iluminaba cruelmente: negro azabache, teñido, engominado, con una raya al costado tan violenta como poco sentadora. Una de esas luces frías de oficina que hacen todo peor. Bien por Clooney, por su falta de vanidad. Pero el momento "mi mamá frente a Echarri" estuvo totalmente ausente. Y el pelo, como era de esperarse, llevó mares de tinta.Durante la promoción de la obra, Clooney confesó en varias entrevistas que sus hijos no paraban de burlarse de él por la cabeza teñida que debía usar para interpretar a Edward R. Murrow: "Dicen que parezco una versión deprimente de Elvis", comentó con humor en el programa de Jimmy Kimmel. La prensa no se quedó atrás: artículos en medios como The Hollywood Reporter y Variety se preguntaban por qué, a diferencia de otros actores del elenco, él no optaba por una peluca. Algunos, con más malicia, llegaron a decir que parecía salido de un episodio perdido de Mad Men ambientado en Transilvania. Y mientras uno se distraía con eso â??porque de tan comentado el pelo distraíaâ??, el argumento empezaba a hacer su trabajo. O a volver a hacerlo.El poder de los mediosGood Night and Good Luck está basada en la película homónima de 2005 nominada al Oscar, con guion de Clooney y Grant Heslov. La historia se centra en cómo Murrow, junto a su equipo en la CBS, desafía públicamente al senador Joseph McCarthy y sus métodos de persecución política bajo la excusa de combatir el comunismo. A través de emisiones televisivas sobrias y bien documentadas, Murrow expone las tácticas de miedo, difamación y falta de debido proceso que caracterizaron la llamada "caza de brujas". La película, en blanco y negro, es también una meditación sobre el rol del periodismo, el poder de los medios, y la necesidad de valentía ética frente al autoritarismo. El título proviene de la frase con la que Murrow cerraba sus emisiones: "Good night, and good luck". La gran diferencia es que, en el film, Clooney tenía un rol secundario. Pero, en Broadway, difícil pensar que alguien pague 800 dólares para verlo hacer otra cosa que no sea el papel principal. Y, efectivamente, eso es lo que hace. Para algunos críticos, quizá demasiado. Los actores que interpretan a los demás periodistas de CBS â??incluso cuando tienen líneas o están en primer planoâ?? no terminan de construir personajes con matices. Son muy buenos actores, pero casi todos parecen estar ahí para orbitar en torno a Clooney/Murrow como satélites que aportan contexto pero no tienen gravedad propia. Lo que se transmite es una redacción heroica, combativa, de hombres inteligentes y decentes que hacen lo correcto. Pero también bastante uniforme, en lo estético (magnífico, pero todo igual) y en lo emocional. La mayor lástima es lo que ocurre con el único personaje femenino con desarrollo propio: Shirley Wershba, interpretada por Ilana Glazer. Su historia es pequeña, pero potencialmente muy poderosa. Sin embargo, queda desdibujada, y no por falta de talento ya que Glazer logra dotar de alma a cada una de sus pocas escenas. Pero su arco dramático â??la dificultad de mantener una carrera cuando se es mujer, se está casada y se avecinan recortes en la empresaâ?? aparece como una anécdota lateral, un pie de página en la gran historia de hombres enfrentando al poder de otros hombres. Shirley tiene un conflicto profundo, que maneja con una mezcla de ironía y ternura que conmueve. En un momento los editores les comunican que uno de los dos â??ella o su marido, también periodistaâ?? deberá irse, y que "si están pensando en formar una familia, quizá este sea el momento". El marido la mira inmediatamente compungido, porque asume -como todosâ??que es ella la que marcha para el hogar. Pero Shirley, en cambio, lo chicanea con un guiño: "¡Cómo van a extrañarte todos acá!", le dice, y la frase funciona como una daga envuelta en celofán. No sabemos si es sarcasmo, humor, resignación o un pequeño grito de guerra. Pero queremos más. Y eso nunca ocurre. Porque la historia sigue siendo del hombre que se planta. De los compañeros que lo apoyan. De los jefes que dudan. De los senadores que acusan. Todo eso está extraordinariamente bien contado. Está extraordinariamente bien actuado. Pero no deja de ser una historia en la cual las mujeres miran desde un rincón, con suerte aportando alguna línea inteligente.Se puede argumentar que es una obra "de época" y que entonces la situación era así. Pero el punto central que hacen, y que se siente mucho más fuerte que en la película de 2005 es que mucho de lo malo que retratan del pasado está ahora presente. Para que no haya dudas, cada vez que alguna línea puede ser interpretada como una crítica a la actualidad, hay que dejar pasar un momento para que la gente deje de aplaudir o -en el caso de la proyección de una polémica imagen de Elon Musk- de abuchear. La diferencia es que, en lo que acontece a la situación de las mujeres -mujeres periodistas-, no parece haber un interés mayor por explorar si se mantienen los paralelos. PantallasHay unas "ellas", en cambio, que sí son claves en la historia, auténticas protagonistas. Son las pantallas. Parecería que hoy en día no hay obra que no las utilice como elemento central. Días atrás fui al Met a ver La flauta mágica, donde el uso de pantallas para la ópera fue fascinante y creativo. Incluso en la mencionada obra de Echarri en Buenos Aires, la pantalla se integran de manera efectiva. En Good Night, and Good Luck, durante largos minutos, se proyectan videos de McCarthy e imágenes de archivo, lo cual, si bien aporta contexto histórico, termina por restar intimidad a la puesta en escena. Ver a Clooney al fondo, reducido a una cara en la pantalla, tiene sentido porque es como si uno fuera el televidente de entonces, que lo ve desde el living de su casa. Pero hace que uno se pregunte si, volviendo a los 800 dólares que puede costar una entrada, no sería mejor tener al protagonista más cerca del proscenio, hablándole directamente al público. Sobre todo, porque el tema principal es que tener a Clooney de carne y hueso en Broadway es tan único. Por supuesto que la prensa conservadora fue escéptica respecto a las motivaciones de Clooney para regresar al teatro, sugiriendo que podría ser una estrategia para revitalizar su carrera en lugar de una elección artística genuina. Mucha gente que detesta a Donald Trump ve en la nota de opinión que Clooney publicó en The New York Times en 2004 diciendo que Biden había perdido sus facultades, la culpa del desastre electoral de los demócratas. Dentro de su propio partido, Clooney sabía antes de salir con el proyecto que había gente que lo miraba con resquemor, y este contacto directo puede ser una forma de sentir un baño de multitudes que ya no parecía tan garantizado. Cuando termina la obra, si uno se queda pacientemente esperando a la salida de actores, aparece Clooney, y como un caballero firma lo que sea y hasta se saca selfies sin ningún gesto de superioridad. Emerge de bambalinas con gorrita de béisbol, así que no se le ve el pelo azabache violento, y la magia se recompone. Por su actuación en Good Nightâ?¦, acaba de ser nominado a un Premio Tony al mejor actor protagónico. Pero el film, que en los EE.UU. puede verse en varias plataformas de streaming, no solo fue aclamado por la crítica y el público sino que recibió seis nominaciones al Oscar. Sigue siendo un producto superior con el que es duro competir. Y es difícil dejar de pensar que, con 800 dólares, uno aquí se compra una tele enorme entera.
Este jueves, George Clooney recibió su primera nominación a los Premios Tony, los galardones que reconocen la excelencia en el circuito teatral de Broadway, que se entregarán el próximo 8 de junio en el Radio City Music Hall de Nueva York, con Cynthia Erivo como presentadora. El actor de Hollywood fue ternado en la categoría de Mejor interpretación en un papel principal en una obra por su protagónico en Good Night, and Good Luck (Buenas noches, y buena suerte), la adaptación de la película de 2005 que él mismo escribió (junto a Grant Heslov), dirigió y actuó."Es emocionante tener cinco nominaciones para esta obra. Para todos los involucrados, esta ha sido una experiencia increíble. No podría estar más orgulloso ni sentirme más afortunado", expresó Clooney, según consigna The Hollywood Reporter. La obra, que estrenó el pasado 3 de abril, se centra en la legendaria exposición del periodista de noticias de CBS Edward R. Murrow sobre el senador Joseph McCarthy. En la película, el actor había interpretado al productor de televisión y socio de Murrow, Fred Friend, mientras que en las tablas de Broadway, Clooney se promovió al papel protagónico, que anteriormente había estado en manos de David Strathairn."No he hecho una obra en 40 años, así que es aterrador", había reconocido el actor y director durante una rueda de prensa en La Gran Manzana, según recogió la agencia de noticias Reuters.Sus nervios no solo tenían que ver con haber pasado tanto tiempo fuera de los escenarios sino, según él mismo admitió, con lo difícil que le resulta recordar un libreto a su edad, especialmente con once monólogos por delante. "Memorizar las líneas ha sido una pesadilla (...) ¡No recuerdo los nombres de mis hijos! ¡Tengo 63!", bromeó Clooney durante su paso por The Late Show with Stephen Colbert a mediados de febrero. "Es raro. En E.R. Emergencias hacíamos 12 páginas diarias de diálogo médico. Lo mirabas por la mañana y decías: '¡Está bien, vamos!'. Ahora, te hacés mayor y no podés recordar nada. Decís: '¿Qué me pasa? Bueno, no bebas vino esta noche'", agregó entre risas.Pero Clooney no fue la única estrella que recibió su primera nominación a los Tony. También lo hicieron la ex cantante de Pussycat Dolls Nicole Scherzinger por su rol en Sunset Boulevard; Sarah Snook -conocida por su trabajo en Succession- por su protagónico en El retrato de Dorian Gray; Bob Odenkirk -el abogado de Breaking Bad y Better Call Saul- por su papel en Glengarry Glen Ross y Mia Farrow, por The Roommate.DecepcionesSin embargo, hubo algunas figuras reconocidas que se quedaron fuera de competencia, como Denzel Washington y Jake Gyllenhaal, que encabezan el reparto de Otelo, una de las producciones más caras de Broadway; Robert Downey Jr., cuyo debut en Broadway, McNeal, no recibió ninguna nominación; Idina Menzel, protagonista del nuevo musical Redwood; el cantante de los Jonas Brothers Nick Jonas, con The Last Five Years; David Hyde Pierce, que tampoco fue ternado por su rol en Pirates! The Penzance Musical; o Rachel Zegler y Kit Connor, que no fueron considerados por su performance en Romeo + Julieta.Los musicales Buena Vista Social Club, Death Becomes Her y Maybe Happy Ending son los que lideran la lista con 10 nominaciones cada uno de cara a la 78ª edición de los Premios Tony. La categoría principal, Mejor obra, incluye a English, The Hills of California, John Proctor Is The Villain, Oh Mary! y Purpose. Audra McDonald recibió su undécima nominación -por su papel de Rose en Gypsy- y se convirtió en la artista con más nominaciones en la historia de los Premios Tony. Asimismo, Harvey Fierstein será reconocido con un premio a la trayectoria, mientras que Celia Keenan-Bolger recibirá el Premio Tony Isabelle Stevenson 2025 por su labor de defensa de las artes.
El creador de la saga admitió que tuvo una buena razón para darle este toque al personaje
El director de "El padrino" y "Apocalypse Now" obtuvo el mayor premio del Instituto Estadounidense del Cine. Leer más
El actor, que protagoniza la obra Good Night, and Good Luck en Broadway, hizo ese comentario durante un evento en el icónico restaurante Sardi's de Nueva York
El cosmos de La guerra de las galaxias encierra innumerables acertijos. A lo largo de las décadas en las que tuvo el control creativo de su propia franquicia, George Lucas le dio vida a numerosos personajes y a un universo que aún hoy, en manos de Disney, no deja de darle grandes alegrías a los fans. Y en el marco de una familia de héroes y villanos de enorme carisma, sin lugar a dudas uno de los que más se destaca es el maestro Yoda (Frank Oz), un eximio guerrero que entrena a Luke Skywalker (Mark Hamill) en su camino a convertirse en Jedi. Y en una reciente proyección, Lucas contó por qué decidió que ese personaje hablara de forma tan particular.Durante una proyección de El Imperio contrataca, George Lucas estuvo presente y dio una charla sobre distintos aspectos de esa película, que para muchos es considerada la mejor de toda la franquicia. Al comienzo de la presentación, el director recordó el génesis de su obra: "Yo escribí un plano de la historia y cuando terminé el guion de Star Wars tenía entre 130 a 180 páginas. Entonces lo corté en tres partes y pensé que iba a concentrarme en el primer tramo, porque jamás iba a conseguir el dinero como para hacer todo eso".Finalmente una pregunta realizada al director, apuntó hacia Yoda, y el porqué de su forma tan peculiar de hablar, de atrás hacia adelante. Y sobre esa característica manera de expresarse que tiene el personaje, Lucas explicó: "Lo hice porque si él hablaba de manera corriente, la gente no lo iba a escuchar. Pero si tenía algún tipo de acento, o si hablaba de una manera en la que era difícil comprenderlo, ahí sí las personas iban a concentrarse en qué estaba diciendo".El misterio finalmente quedó resuelto, y en último lugar, el creador de Star Wars aseguró: "Yoda era básicamente el filósofo de la película. Entonces tenía que encontrar una manera para que los espectadores realmente le prestaran atención, especialmente los chico de doce años".Como es sabido, Yoda es un personaje que caló muy profundo en la cultura popular, y su figura trascendió el universo de Star Wars. Esa curiosa manera de expresarse, fue y es imitada en innumerables series y películas, dándole a dicha criatura una fama que no necesariamente tienen todos los héroes de esa franquicia galáctica. La importancia de El Imperio contrataca"Estaba muy nervioso cuando comencé a preparar la continuación", admitió Lucas en una oportunidad, en la que incluso aseguró llegar a contemplar una dramática decisión: "Al principio hasta pensé en venderle todo a Fox y limitarme a tomar mi porcentaje de ganancias, irme a mi casa y olvidarme de Star Wars para siempre, pero la verdad es que ese mundo me tenía cautivado y entendía cómo respiraban y vivían esos personajes". Para Lucas el dilema era enorme, el estrés que le significó dirigir la primera parte lo había desgastado, las luchas contra los ejecutivos, el rogar por más dinero cuando la inversión no alcanzaba y las jornadas de filmación eternas lo dejaron sin ganas de encarar otro rodaje igual o más ambicioso.Para elegir un reemplazo en la dirección del segundo film de la saga, Lucas recordó a uno de sus profesores favoritos en la universidad de cine: Irvin Kershner. "De todos los chicos talentosos que hay dando vueltas, ¿por qué yo?", le dijo el hombre de 57 años. A esa pregunta, él respondió: "Bueno, porque sabés todo lo que tiene que saber un director de Hollywood, pero vos no sos Hollywood". Kershner a priori no se sentía tentado, él consideraba que la primera Star Wars había dejado el listón muy alto y, además, los proyectos con miles de efectos especiales tampoco lo seducían. Sin embargo, y ante la insistencia de su agente, finalmente aceptó. De esa manera, en 1980 El Imperio contrataca llegó a los cines de los Estados Unidos y consolidó el éxito de un universo cinematográfico que sigue vivo.
Martin consideraba "She's Leaving Home" como una obra maestra -asegura Far Out-, ubicándola como una de las composiciones más complejas y emocionalmente maduras de la banda, más allá de su producción técnica
En las profundidades de la bahía de Zihuatanejo, Guerrero, yacen los restos de una historia que marcó el siglo XVIII
George Clooney, uno de los actores más versátiles de Hollywood, ha dejado una marca imborrable en la industria cinematográfica.
Tras décadas en el cine romántico, George Clooney decide cambiar de rumbo en su carrera y alejarse de estos roles.
En el año 2014, George Clooney se casó con Amal Ramzi Alam Uddin, conformando de ese modo uno de los matrimonios más famosos de Hollywood. A lo largo de los 11 años que llevan juntos, el actor y la reconocida abogada forman parte de la élite de la industria, y alrededor de ellos no suele haber rumores de ningún tipo. Siempre que se los ve en público, ambos se muestran muy plenos en su matrimonio. En sintonía con eso, Clooney hizo una divertida declaración que no pasó desapercibida, y que habla de la armonía que vive la pareja en su intimidad.En el marco de una nota con CBS Mornings, George Clooney aseguró que estar casado es algo muy "sencillo", y luego detalló: "Recuerdo que hace un tiempo estuvimos en este programa, y dije que nunca habíamos tenido ninguna discusión. Y la verdad es que me siento extraordinariamente afortunado de haber conocido a esta mujer increíble. Siento como si me hubiera ganado la lotería". Sin miedo a ponerse cursi, más adelante el actor concluyó: "No pasa un solo día sin que piense que soy el hombre más afortunado del mundo. Eso es maravilloso". Esta no es la primera vez que la pareja se refiere a la inexistencia de algún tipo de discusión. Hace pocos años, como bien mencionó Clooney, el matrimonio apareció en CBS Mornings, y en esa oportunidad Amal aseguró en tono de risa: "Eso es algo que enloquece a algunos de nuestros amigos. De hecho tengo un primo, que lo primero que hace cada vez que nos ve, es preguntarnos si alguna vez nos peleamos por algo". Por estos días, George Clooney protagoniza en Broadway la obra teatral Buenas noches y buena suerte, basada en la película que él mismo dirigió en 2005. Esa pieza es uno de los mayores hitos de la temporada, y da cuenta del éxito sostenido del intérprete. Con respecto al cine, en el transcurso de este 2025 Clooney estrenará Jay Kelly, una película en la que compartirá pantalla junto a Adam Sandler, Laura Dern, Billy Crudup y Greta Gerwig. Un cambio de lookLa melena plateada de George Clooney, se convirtió en su arma de seducción durante años. Sin embargo, hace unas semanas el actor se sometió a una transformación que, por momentos, lo hizo pasar inadvertido por las calles de Nueva York. El protagonista de La gran estafa dejó atrás su sello para lucir un cabello castaño. ¿El motivo? El personaje que lo hizo subirse a las tablas de Broadway desde principios de abril. Su radical cambio en fotos y la reacción de su mujer Amal, a quien -según el propio actor- no le gustó nada su nueva apariencia. A mediados de marzo, los turistas que estaban por el SoHo, uno de los barrios más chic de Nueva York, tuvieron que mirar dos veces para ver si era él. Es que con su nueva melena oscura George Clooney estaba irreconocible. Esta metamorfosis tuvo que ver con su debut en Broadway, en la historia que trata sobre la legendaria exposición del periodista de noticias de CBS, Edward R. Murrow, sobre el senador Joseph McCarthy.Mientras los fanáticos miraban con cierto desconcierto su nuevo look, su mujer Amal fue tajante desde un principio. "Mi esposa lo va a odiar porque nada te hace parecer mayor que cuando un hombre mayor se tiñe el cabello", le decía el actor al New York Times un tiempo atrás, antes de teñir su cabello. Su premonición no solo se cumplió, sino que sus hijos se burlaron de su nueva melena, como también había anticipado. "Mis hijos se reirán de mí sin parar", imaginaba en referencia a sus gemelos, de siete años, Alexander y Ella.Además de su transformación física, Clooney tuvo que someterse a ciertas prácticas para entrar en personaje. Una de ellas fue comenzar a fumar, ya que este legendario periodista fumaba tres paquetes al día y murió a los 57 años por complicaciones de un cáncer de pulmón. "Tuve que mejorar mi capacidad para inhalar", le explicó al medio estadounidense. E inmediatamente confesó por qué lo hacía a escondidas: "Salgo para que los niños no me vean y fumo un poquito", agregó quien planea cambiar a cigarrillos de hierbas cuando suba al escenario.
El artista de Hollywood aclaró que no le importa lo que piense el presidente de Estados Unidos
El comienzo de la temporada de la Fórmula 1 siempre genera incertidumbre y las escuderías están expectantes por los desempeños de sus principales pilotos. Y lógicamente Mercedes era uno de los equipos con más atención después de la partida de Lewis Hamilton. Pero el buen comienzo de George Russell calmó las tensiones por saber qué sucedería después del campeón británico. Ello empujó a los máximos responsables de la escudería a comenzar con las negociaciones para ofrecerle una renovación millonaria a Russell. El piloto principal de Mercedes ocupa la cuarta posición del campeonato de pilotos tras las cuatro primeras pruebas, a sólo 14 puntos del líder, Lando Norris. Russell acumula tres podios en cuatro grandes premios, incluyendo un segundo puesto en Bahréin. Este arranque fortaleció su posición en las negociaciones con Mercedes, ya que el equipo busca asegurarle un nuevo contrato. Según algunos medios especializados se espera que Russell firme una extensión de dos años con opción para 2028 y que el acuerdo sería de unos 30 millones de dólares por temporada.El director del equipo Mercedes, Toto Wolff, ya había deslizado en 2024 que pretendía que Russell compartiera lugar, en un futuro, con Max Verstappen, pero esa postura, según aseguran algunos en los paddocks, habría cambiado. Explican que Wolff está satisfecho con la formación actual del equipo, ya que Russell sigue obteniendo resultados sólidos y el novato Andrea Kimi Antonelli se está adaptando a la Fórmula 1. Desde la salida de Hamilton, Russell asumió el rol de líder del equipo Mercedes y si bien la idea original de Wolff era seguir con el británico como segundo piloto, ahora se prepara para reflejar esa posición en el nuevo contrato, que además costaría significativamente menos que cualquier posible traspaso de Verstappen a Mercedes.Incluso, Wolff dejó en claro que Russell sigue siendo una prioridad, enfatizando: "No coqueteo fuera si estoy en una buena relación. Así que en este momento, eso [acercarse a Verstappen] no está en ningún radar".Las señales positivas de Russell en Bahréin terminaron por convencer a todos. Tuvo una partida impecable al dejar atrás a Charles Leclerc, se mantuvo siempre a tiro del líder, Oscar Piastri y pudo soportar todos los ataques de Norris sobre el cierre de la competencia.Y no fue sencillo hacerlo, porque el coche de Russell experimentó fallos electrónicos intermitentes, comenzando con una pérdida de datos en las pantallas de cronometraje. Después: a partir de la vuelta 46, el británico se vio afectado por una falla en el sistema de frenos y le informó a su equipo que la fuerza necesaria sobre el pedal cambiaba constantemente, lo que dificultaba mantener una frenada constante y aumentaba el riesgo de bloqueos. El problema lo obligó a ajustar su conducción vuelta a vuelta, especialmente en las fuertes frenadas de la parte final de la carrera. A pesar de las complicaciones, logró defenderse de Norris y asegurar el segundo puesto al llegar a la meta.Si se firma la renovación, con casi total seguridad, Mercedes le cerraría sus puertas a corto y medio plazo a Verstappen, cuya relación con Red Bull no pasa por su mejor momento. Incluso, cuando para incorporar a Max, existiría la vía de ceder a Andrea Kimi Antonelli a un equipo de menos nivel, aunque con esta cifra millonaria que Wolff le daría a Russell todas estas gestiones parecen algo poco probable.
Harper's Bazaar mencionó que el ex James Bond asistió al estreno teatral de Good Night, and Good Luck y sorprendió con un tributo afectuoso y espontáneo hacia su colega y amigo
Dos postulantes sorprendieron en los recientes exámenes de admisión en la selva peruana por la inesperada carga simbólica de sus nombres
A casi tres décadas del estreno, el actor continúa haciendo autocrítica sobre su rol en una de los films más criticados de los 90
La historia de Tom Michell y Juan Salvador, el pingüino que rescató en Uruguay en los años 70, parece sacada de una fábula escrita por un naturalista británico con alma de niño. Pero ocurrió de verdad: en Punta del Este, en pleno invierno, Tom encontró cientos de pingüinos muertos sobre la playa. Estaban cubiertos de petróleo. Pensó en retirarse, seguir de largo, pero uno se movió... Estaba vivo."Fue totalmente impulsivo, pero no sentí que tuviera opción. Era un animal en peligro y yo podía hacer algo. No dudé", cuenta Tom. Lo llevó al departamento donde se hospedaba y lo lavó con agua y detergente. Le sacó el petróleo como pudo, con paciencia Lo llamó Juan Salvador, como el protagonista del libro que estaba leyendo: Juan Salvador Gaviota. "Fue en ese momento que supe que ya no era un pingüino cualquiera. Era mi pingüino", agrega.Volver a Buenos Aires no fue sencillo. Esconder a un pingüino en un micro, lidiar con el olor del guano, pasar la aduana sin que nadie se diera cuenta... Todo un acto de ilusionismo improvisado que Tom relatará a continuación. Pero lo logró: Juan Salvador "cruzó el charco" embarcado y llegó al colegio St. George's, donde Tom trabajaba como docente. Allí, en una terraza, comenzó una nueva vida.En diálogo con La Nación desde su casa en Cornwall, Inglaterra, Tom Michell recuerda aquella historia de película ocurrida en Quilmes, pleno conurbano bonaerense, que llegará a las pantallas en abril. Michell es autor del libro The Penguin Lessons, donde narró su experiencia con Juan Salvador. Ese libro fue traducido a más de veinte idiomas y ahora fue adaptado al cine por Sony. En la película, el actor británico Steve Coogan interpretará a Tom.-Tom, ¿cómo y cuándo llegó a la Argentina?-Mi vida en Inglaterra era muy rural. Fui a la escuela, después a la universidad, pero siempre quise viajar. Mi familia es muy diversa: mi madre nació en Canadá, mi padre en Australia... Tenía abuelos y abuelas en distintas partes del mundo, en lo que se conocía como el "Imperio británico". Me contaban historias sobre la guerra en África, en el Lejano Orienteâ?¦ Todo eso encendió mi imaginación. Pero lo curioso es que nadie en mi familia tenía relación alguna con Sudamérica. Poco después de terminar la universidad, en 1975, vi un anuncio del Colegio St. George's y pensé que era perfecto para lo que yo quería hacer.-¿Cómo se dio su ingreso al St. George's?-Vi el anuncio en un diario inglés y me pareció la oportunidad perfecta para cumplir algunos de mis objetivos. Primero, tener un ingreso que me permitiera quedarme un buen tiempo en Sudamérica. Segundo, trabajar y conocer algo de la región. Y tercero, tener vacaciones largas para viajar. Quería ir a Tierra del Fuego, a la Patagonia, quería ver las Cataratas del Iguazú, los bosques de Brasil, viajar por el Amazonas, conocer todos los lugares emblemáticos.... Así que respondí al anuncio.-¿Cuál era su trabajo allí?-Fui profesor de Matemáticas y Química. Vivía en el colegio, como la gran mayoría de los alumnos. Y como yo había asistido a un internado, entendía ese mundo. Así que estaba preparado para ese rol, y por eso obtuve el trabajo.-¿Cómo fueron sus primeros días en la Argentina?-Me recibió el director, que me habló sobre la situación en Argentina, sobre el terrorismo, sobre la cantidad de personas asesinadas cada día. Pasamos por casas que habían sido bombardeadas o baleadas. Fue una forma de introducirme a la cultura local. Yo sabía que había mucha violencia, pero quería ver eso con mis propios ojos. Tenía 22 o 23 años. Cuando sos joven, estás lleno de energía. Y tampoco creí que iba a estar en peligro. Era extranjero, no quería involucrarme en la situación ni intervenir en nada. Recuerdo que al llegar al colegio me presenté en la cocina, conocí al chefâ?¦ Ese mismo día comí mi primer bife. ¡Increíble! Realmente increíble. Pensé: "Me va a ir bien acá".-¿Cómo se dio el viaje a Punta del este, en el que conoció a Juan Salvador?-Unos padres del colegio me habían dicho: "¿Por qué no vas a Punta del Este? Tenemos un departamento ahí. Te damos la llave". Aproveché todas las oportunidades que se me presentaban. Fue una especie de fiesta constante. Fui en invierno, el mar estaba realmente frío.-¿Cómo recuerda el momento en el que descubrió a Juan Salvador?-Era mi último día. Ya había empacado y no tenía nada que hacer antes de salir a cenar, así que decidí caminar por la playa. Mientras caminaba, empecé a ver pingüinos muertos en la orilla. Había varios. Me detuve a mirar toda esa devastación. Pensé: ¿qué clase de especie somos para hacerle esto a la naturaleza? ¿Cómo podemos ser tan estúpidos? Mientras observaba, vi que uno de los pingüinos se movía. Mi primera reacción fue pensar que estaba agonizando, que tal vez tenía que matarlo para que no sufriera. Pero cuando me acerqué, se incorporó. Estaba débil, pero vivo. Pensé: "Esto es extraordinario. Si este está vivo, quizás muchos otros también podrían estarlo. Tengo shampoo, tengo detergenteâ?¦ podría intentar limpiarlo". Lo inmovilicé con una red de pesca que encontré en la playa y lo llevé conmigo. Me sorprendió lo difícil que fue cargar a un ave de cinco o seis kilos por dos o tres kilómetros hasta la pensión.-¿Y el pingüino se resistía?-No tenía mucha opción. Lo llevaba patas para arriba, con un dedo entre las patas, lo justo para que no se escapara ni se lastimara. Yo tampoco quería que me tocara, ni tocarlo más de la cuenta. Cuando llegamos, pensaba cómo contenerlo, porque era bastante agresivo, no quería estar conmigo. Entonces lo puse en una bolsa de plástico, de esas naranjas que usábamos en la escuela para los botines de fútbol. La bolsa era perfecta. Lo metí ahí y empecé a lavarlo con detergente y agua. Parecía entender que yo estaba tratando de ayudarlo. En minutos empezó a cooperar. Abría las alas para que pudiera limpiarlas. Pasó a estar completamente dócil. Estuve una hora lavándolo, sacándole el petróleo del cuerpo, del plumaje, de la caraâ?¦ Fue muy intenso.-¿Tuvo alguna duda al principio sobre si rescatarlo o no? ¿O fue algo impulsivo?-Fue totalmente impulsivo. Pero, al mismo tiempo, sentí que no tenía opción. Era un animal en peligro y yo podía hacer algo. No dudé. Claro, me cruzó por la cabeza que alguien podría decir que estaba haciendo algo ilegal, pero pensaba: "Voy a decir que es una acción humanitaria". ¿Quién podría objetar eso? De todos modos, nadie me detuvo. Ni siquiera había gente alrededor. Nadie me vio. Así que lo lavé, lo limpié y, una vez terminado, lo llevé a la zona del puerto, donde estaban los barcos y los otros pingüinos, y lo solté ahí. Pero no volvía al océano... Intenté tres o cuatro veces que se fuera, pero no quería alejarse. Me seguía. Yo pensaba: "No puedo quedarme con un pingüino. Tengo 20 años. ¿Qué voy a hacer con un pingüino?". Pero me seguía... Entonces pensé: "Quizás debería llevármelo". En el fondo, sabía que había perdido parte de su impermeabilidad natural, lo había limpiado tan profundamente que probablemente ya no podía flotar bien. Y eso lo hacía dependiente de mí. Ya no podía sobrevivir en el agua.-¿Qué tamaño tenía el pingüino cuando lo rescataste?-Era pequeño, de unos 60 centímetros. Decidí llevármelo. Pero al hacerlo, sabía que le había cambiado la vida, que luego iba a ser imposible que vuelva a su hábitat natural. Por eso sentí que tenía la responsabilidad de cuidarlo hasta que pudiera volver al agua. Si es que podía.-¿Cómo fue el viaje de regreso a la Argentina con el pingüino?-Empecé a planear cómo pasarlo por la aduana. Pero antes, hay algo que tenés que saber sobre ese último día en Punta del Este. Fue muy temprano, ya tenía todo empacado, pero decidí salir a almorzar. Dejé al pingüino en el baño, que era el único lugar seguro, fácil de limpiar y donde él podía estar tranquilo. Había un pequeño restaurante, prácticamente vacío. Pedí chicharrones, una ensalada y una botella de Malbec. Llevé el libro que estaba leyendo: Juan Salvador Gaviota. Quise leer, pero no podía concentrarme. En ese momento pensé: "Ese tiene que ser el nombre del pingüino". Así fue como lo bauticé: Juan Salvador Gaviota. En ese momento se convirtió en mi pingüino.-Y hoy, casi 50 años después, estamos hablando de él.-Así es. Volví a la pensión y preparé todo para viajar. Tenía un gran bolso de papel y lo adapté para que pudiera ir adentro sin que se notara. Puse ese bolso dentro de otro más grande, para disimular. Y salí rumbo a la terminal.Tom recuerda al detalle aquél invierno. Interrumpe su propio relato con una anécdota: "Me senté en el fondo del micro, al lado de una chica muy joven. Nos pusimos a charlar durante el viaje hacia Montevideo. En cierto momento, ya cerca de la ciudad, mi equipaje empezó a emanar un olor inconfundible a guano de pingüino. La chica, que no tenía idea de que yo llevaba un pingüino escondido, me miró como si yo fuera el culpable del olor. Fue muy embarazoso".-A pesar de lo absurdo de la situación, ya lo había asumido como una responsabilidad.-Sí. Recuerdo estar ahí parado, pensando: "¿Qué estoy haciendo en medio de Montevideo con un pingüino cubierto en papel? Pero sí, ya lo había asumido como una responsabilidad".-¿Temía que el envoltorio se rompiese en el trayecto?-En esos años, las ciudades estaban llenas de chicos lustrabotas, de seis, siete, ocho años, con sus cajones y trapos, ganándose unos pesos. Uno se me acercó y me ofreció limpiar los zapatos. Acepté. Después de terminar, me miró â??algo poco común, porque esos chicos solían trabajar en silencioâ?? y me preguntó: "¿Eso que tenés ahí es un pingüino?". Yo me sorprendí, claro. Pero asentí. "¿Puedo verlo? "dijo. Así que abrí un poco el bolso y el chico se asomó. Miró al pingüino, el pingüino lo miró a él. Fue un momento hermoso. Le pedí un favor: "¿Podés conseguirme un balde de plástico lo suficientemente grande como para ponerlo adentro? Le ofrecí 20 pesos si lo lograba. Me miró muy serio y me dijo: "Que sean 50â?³. Acepté y volvió rapidísimo con un balde perfecto. Al final, le di 100 pesos de lo contento que estaba.-Todavía le faltaba la parte más difícil, la entrada a Buenos Aires.-No era como ahora. En esa época, por ser europeo, podía hacer una fila distinta, la de los "profesionales". En Migraciones me preguntaron si traía algo, dije que no. Me revisaron, todo parecía ir bienâ?¦ ¡hasta que el pingüino decidió hacer ruido! De repente, la caja empezó a sacudirse.â??¿Qué hay en esa caja?, preguntó el agente.â??Un pingüino, respondí sin más opción.â??¡No podés traer un pingüino a Argentina! â??me gritó â??. ¡Eso es ilegal! ¡Estás introduciendo una especie exótica!Me llevó a una oficina para interrogarme. Fue muy intimidante. Me acusaron de contrabando, de violar la ley. Yo intenté defenderme: "Mire, soy un experto en pingüinos", mentí.â??¿Un experto?, me preguntó, incrédulo.â??¡Sí! Lo cuidé durante 24 horas, más que cualquier otra persona. Es un pingüino argentino, una especie que migra por la costa. Él no necesita visa... Como está herido, tengo la responsabilidad de pasar con él.â??¿Tenés dólares?, me preguntó el agente.â??No, le respondí.â??Entonces lo vas a tener que dejar acá, ordenó.El pingüino, mientras tanto, se puso a defecar sobre la mesa. El hombre lo miró y dijo: "¿Cómo se supone que voy a cuidar yo de esto?"â??¡Exacto!, le dije. ¡Por eso me lo tengo que llevar!Y así fue como pasé con Juan Salvador por la aduana. Fue un milagro. Y lo llevé al colegio. Mi oficina estaba en el primer piso de una construcción de tres niveles. Tenía una terraza privada, arriba de la casa de los maestros. Pensé que podía vivir ahí. Había un desagüe, así que era fácil de limpiar, y él podía tener su espacio. Al principio lo dejé en el baño, para mantenerlo controlado. Los chicos todavía no habían vuelto al colegio. Pero cuando volvieron, les presenté a Juan Salvador.-¿Cómo hacía para alimentarlo?-Fui a comprar pescado, varios tipos, y se los llevé para ver si comía. No mostró ningún interés. Probablemente nunca había visto pescado así. Yo no sabía cuánto tiempo podía sobrevivir sin comer, pero sí sabía que no estaba comiendo. Entonces decidí intentar algo: abrí su pico y le empujé un pedazo. Se lo tragó. Lo intenté de nuevo, otro pedazoâ?¦ también lo tragó. Funcionaba. Así que probé empujar un trozo más grande, un poco más al fondo. Lo tragó. Yo estaba temblando, temía ahogarlo, pero de repente vi cómo movía la cabeza, los ojos, tragaba con naturalidad. En veinte minutos se había comido un kilo entero de pescado.-¿Tuvo problemas con las autoridades del colegio?-Primero hablé con la directora de la residencia. Sabía que una vez que lo viera, lo iba a aceptar. Después se lo conté a mis colegas. Y como era de esperar, apenas veían al pingüino, quedaban encantados. No tuve que esforzarme demasiado para que lo aceptaran. Todos se enamoraban de él. Le conté la historia al director: le dije que tenía una responsabilidad, que no podía simplemente devolverlo, que los alumnos estaban fascinados y que podía ser una experiencia educativa hermosa. "Bueno, veamos cómo evoluciona esto", me dijo.-¿Cómo lo veían los alumnos? ¿Como una mascota? ¿Como un compañero?-Los más grandes eran más reservados, claro, pero los más chicos estaban encantados. Interpretaban todos sus gestos como si fueran humanos. Juan Salvador te miraba como si entendiera lo que le decías, sin importar si le hablaban en inglés o en español. Era como tener un amigo trilingüe. Lo llevaban al campo de fútbol. Descubrimos que, mientras miraba un partido, se levantaba y se agachaba, como si entendiera el juego. Pero nunca se metía en la cancha. Tal vez intuía que ese desorden no era para él... Los chicos decían que era su entrenador. Se acercaba a mirar los partidos de los equipos más jóvenes. Y cuando caminaban cerca de él, muchos se paraban a hablarle. Yo escuchaba todo desde mi ventana y era genial. Algunos se le acercaban para contarle cosas, como si fuera un confidente. Todo el mundo se comportaba mejor cuando él estaba cerca. Era extraordinario. Incluso los miembros del staff se acercaban a saludarlo. Lo más notable era que no le tenía miedo a nadie. Era curioso, amigable, incluso con personas altas o imponentes. Medía apenas 60 centímetros, pero no se achicaba ante nadie.-¿Nunca pensó en llevarlo a la pingüinera del zoológico?-Un día empecé a preguntarme: ¿Es esta la mejor vida posible para él? Y sí, fui al zoológico de Buenos Aires para ver cómo vivían los pingüinos allí, para hablar con los cuidadores, entender si el entorno era adecuado para Juan Salvador. Vi una pileta donde había siete pingüinos, rodeados de paredes grises. Estaban quietos, sin interactuar, sin mostrar interés en nada... ¡Nada que ver con Juan Salvador, que siempre estaba activo, curioso, sociable! Le pregunté al cuidador qué necesitaban, cómo podía saber si estaba bien. Me respondió que si tenían acceso al agua, a la comida, no necesitabann nada más. Que lo importante es que estuvieran con alguien que los cuidara. Entonces pensé: "Tal vez no lo estoy haciendo tan mal". Pero igual siempre pensaba en cómo devolverlo al mar.-¿Dónde pensaba dejarlo?-Consulté la enciclopedia y descubrí que había colonias de pingüinos estables en Chubut. Tenía una moto, una Gilera 200cc que me había costado tres sueldos y se rompía todo el tiempo. Pero decidí intentarlo... Cuando llegaron las vacaciones de invierno, dejé a Juan Salvador en casa y me tomé el tren hasta Bahía Blanca. También cargué la moto. Desde ahí, conduje hasta la Península Valdés. La moto funcionó bien... ¡pero no encontré pingüinos! Entonces seguí hasta Punta Tombo. Manejaba a 20 o 30 kilómetros por hora, porque muchas rutas eran de ripio. Pero cuando llegué, vi cientos de miles de pingüinos y pensé: "Si Juan Salvador puede llegar hasta acá, va a estar bien. Va a sobrevivir".-¿Volvió a buscarlo?-Sí, pero a mitad de camino, en algún lugar entre Bahía y Buenos Aires, la moto volvió a romperse. Estaba en medio del desierto, años 70, sin tráfico. Tal vez pasaba un auto cada hora. Empecé a empujar la moto, sabiendo que tenía que hacer 30 kilómetros hasta el pueblo más cercano. Por suerte, una camioneta pasó y se detuvo. El hombre se rió cuando le conté la historia. "Estás completamente loco", me dijo. Y probablemente tenía razón. Cargamos la moto en la parte trasera, me llevó hasta Bahía, y desde allí tomé el tren de regreso a Buenos Aires. Me quedó claro que no podía hacer el viaje completo con Juan Salvador en esa moto, era demasiado peligroso e irresponsable. Tuve que aceptar que, al menos por el momento, no podía devolverlo al mar.-¿Cuánto tiempo más vivió Juan Salvador?- Un año después, más o menos, yo había hecho un viaje corto para visitar a unos amigos en el sur. Me habían invitado a una estancia. Cuando regresé, un colega me recibió con la cara desencajada. "Juan Salvador estaba bien â??me dijoâ??, pero hace un par de días dejó de comer. No reaccionó. Y al día siguienteâ?¦ murió". Me quedé helado. No me lo esperaba. Y así terminó la historia de Juan Salvador. Él había sido una presencia maravillosa en el colegio. Los chicos lo amaban. Fue una experiencia inolvidable.-¿Qué recuerdos tiene de él 50 años después?-¿Sabés? Juan Salvador se sentaba en mis pies y apoyaba la cabeza ahí para dormir. Yo me quedaba quieto, con un vaso de agua en la mano, mirando cómo caía el sol. Recuerdo que una vez le dije: "Quiero escribir un libro sobre vos". Y él levantó la cabeza, me miró, como preguntando por qué. "Porque creo que a la gente le vas a interesar", le respondí. Y cumplí.
"Viví amenazas hace año y medio, tuve que reportarlo", declaró el famoso productor estadounidense en entrevista con Rebeca Escribens
NUEVA YORK.- El actor George Clooney criticó la situación de la libertad de expresión y de prensa en Estados Unidos y el presidente, Donald Trump, contraatacó en Truth Social, llamándolo "estrella de segunda" y "politólogo fracasado"."¿Por qué el ahora desacreditado programa 60 Minutes publicaría un artículo exagerado sobre George Clooney, una estrella de cine de segunda y un comentarista político fracasado? Luchó con ahínco por la elección de Sleepy Joe [Biden] y luego, justo después del debate, lo despachó como un perro. Más tarde, supongo que por órdenes del equipo de Obama, se volcó por completo por Kamala, solo para darse cuenta de que no iba a salir bien", publicó Trump."60 Minutes incluso insertó fraudulentamente respuestas falsas en su desastrosa entrevista, emitida justo antes del día de las elecciones, en uno de los eventos más vergonzosos y deshonestos de la historia de la radiodifusión... ¿Y ahora George Clooney otra vez? ¡Su agente de prensa debería estar ganando una fortuna!", agregó.Ganador del Oscar por Syriana (y productor de Argo junto a Ben Affleck y Grant Heslov), el actor fue entrevistado durante el programa de la CBS 60 Minutes para promocionar la versión teatral de su película de 2005 Buenas noches y buena suerte sobre el célebre presentador Edward Murrow, protagonista en la propia CBS de un famoso enfrentamiento televisivo en los años 50 con el senador republicano Joseph McCarthy.Murrow era conocido por su integridad y seriedad. En 1954, en el programa "See It Now", emitió un reportaje dedicado a McCarthy en el que, utilizando imágenes de archivo y comentarios incisivos, destacaba las contradicciones, los métodos intimidatorios y la falta de pruebas reales de las acusaciones de McCarthy durante la "caza de brujas" contra supuestos comunistas infiltrados en el gobierno, los medios de comunicación, el ejército y otros sectores de la sociedad estadounidense, incluido Hollywood.En la entrevista, Clooney habló sobre la decisión de retirar el apoyo a Joe Biden en un artículo de opinión en The New York Times que, según muchos, habría llevado al entonces presidente a retirarlo.El enfrentamiento entre el gobierno y la prensa es "un choque que hace época", afirmó el actor, citando lo que ocurre en Los Angeles Times y el Washington Post, cuyos propietarios impidieron a la redacción tomar partido en favor del periódico en las elecciones presidenciales del pasado noviembre.Clooney, cuyo padre era periodista, también trazó paralelismos entre los acontecimientos escenificados en Buenas noches y buena suerte y las dificultades de los medios de comunicación actuales: entre los casos citados, el acuerdo de culpabilidad de ABC en la demanda por difamación presentada por Trump y la denuncia de 20 millones de dólares del presidente electo a CBS alegando que 60 Minutes hizo recortes cosméticos en la entrevista con la candidata presidencial demócrata Kamala Harris para mejorar su actuación en televisión."Cuando los otros tres poderes (ejecutivo, legislativo y judicial) nos fallan, la prensa debe tener éxito", dijo Clooney.Agencia ANSA
Los subsidios estadounidenses han marcado el comercio global de combustibles renovables. Indecopi, ahora, reaviva una medida clave contra el biodiésel subvencionado desde Washington. La sostenibilidad de los productores locales está en juego
El estadounidense George Foreman, el notable campeón mundial de los pesados, murió en absoluta paz el viernes por la noche, en Houston, Texas. Sin ocaso a sus 76 años y con la grandeza de su máximo tesoro: la familia, muy cerca de él. Sus doce hijos -una de ellas: Freeda, su favorita, murió en 2019- y sus 16 nietos y bisnietos, que estuvieron siempre atentos a sus necesidades.Con la muerte de Foreman, el boxeo pierde a uno de los monumentos más grandes del peso completo en tiempos modernos. Participe de un cuadro de honor de oro junto a Muhammad Alí, Joe Frazier y Ken Norton, en la década del '70. Su carrera tuvo una particularidad que ningún otro expuso en el pugilismo: supo reinventarse. Volver al cuadrilátero a los 39 años, tras una década de inactividad (1977-1987) para conmover al mundo con la reconquista de su corona perdida ante Alí, en 1974 en "La batalla de la jungla" en Zaire, a sus 45 años, 4 meses y 6 días. Sólo Bernard Hopkins lo superó en longevidad al consagrarse con más de 48 años. Tuvo además una particularidad admirable en dos franjas de vida muy opuestas; la primera: llena de omnipotencia, orgullo y vanidad que lo convirtieron en un ser resistido y poco amigable. Y la segunda, que lo transformó en uno de los personajes mas carismáticos y queridos en todo Estados Unidos.La dureza de su origenEs muy difícil asegurar cuando -realmente- nació Foreman. La fecha es variable. Oficialmente, se admitió el 10 de enero de 1949 pero los viejos y tradicionales medios indicaban el 22 de enero de 1948 en Marshall, Texas. Su infancia fue traumática dado que supuestamente su padre biológico fue un amante de su madre Nancy Ree y su contextura física: grande y fuerte distaba con la de sus siete hermanos: pequeños y débiles. Esto obligó al divorcio de Nancy y a una mudanza acelerada de Marshall y Houston.Estos avatares lo convirtieron en un peleador callejero, pendenciero y alcohólico. Hasta que decidió comenzar un cambio de vida en un centro de capacitación laboral para jóvenes en Pleasonts, California. Allí por casualidad, por su corpulento físico y fortaleza natural, descubrió el boxeo a través de su primer instructor: Doc Broadus, quién se convertiría en su primer manager.Los primeros éxitos y sus memorias con argentinosGeorge Foreman fue criticado por sus hermanos de raza al no cerrar su puño como protesta a las discriminaciones que su gente sufría en Estados Unidos, al consagrarse campeón olímpico en México 1968 en la ceremonia de consagración. Su primer hecho trascendente fue una señal de rechazo popular de su comunidad. Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida por Osvaldo Principi (@osvaldoprincipiok) Tuvimos el primer contacto con él junto a un grupo de argentinos la noche previa al combate entre el cordobés Juan Domingo "Martillo" Roldán y Tommy Hearns, el 28 de octubre de 1987, en el estadio abierto del hotel Hilton en Las Vegas. George, ya había regresado al cuadrilátero - "gordo y cuarentón"- y pocos creían en él. Esa vez, tranquilizó al cantante tucumano "Palito" Ortega, quien debía entonar el himno nacional la noche siguiente. "Palito", estaba nervioso y Foreman le indicó como subir al ring y dónde ubicarse a la hora de cantar. Posó en una foto masiva con la argentinidad "y todos lo aplaudimos cuando se marchó".Sin embargo, el gran cara a cara, se produjo en mayo de 2019, en la semana previa al match mundialista entre el mexicano Saúl "Canelo" Álvarez y el local Daniel Jacobs. El tema inicial fue evocar sus duelos con los argentinos Gregorio Peralta y Miguel Ángel Páez. Nos dijo sobre "Goyo": "Peleamos dos veces (1970-1971), hicimos veinte rounds. ¿Escúchame? Nunca pude darle un buen golpe. Era un gran mago. Tenía muchos trucos bajo la manga. Era como el mago Houdini. Te engañaba y quizás fue el mejor oponente que tuve en mi campaña. Al igual que Muhammad Alí, permanentemente te engañaba".Le recordamos también su pelea con el tandilense Miguel Ángel Páez, a quien noqueó en dos rounds en Oakland, en 1972. Prestó atención al recuerdo de una anécdota vertida por Héctor Di Pilato, entrenador de Páez, al advertir la pomposa llegada de Foreman al ring y la abismal diferencia física sobre el diminuto pesado argentino. Di Pilato le ordenaba a su pupilo: "No lo mire ¡Mátelo con la indiferencia!" Y todos volvimos a sonreír.Jamás mostró apuros en aquel reportaje. Disfrutaba de la exactitud de las preguntas y era práctico en sus respuestas. Sobre la conquista del Mundial ante Joe Frazier, en 1973, por KO en dos rounds, nos dijo: "Cuando ganás el campeonato mundial por primera vez y tienes lo que tuvieron Jack Dempsey, Joe Louis, John L. Sullivanâ?¦ es llegar al cielo. Es tocar el cielo. Es un momento como ningún otro. Decirte a ti mismo: ¡Soy el campeón mundial de los pesados! Es espléndido. Y sólo te das cuenta de lo que significa cuando te quitan la corona."Buscamos sus recuerdos, del Zaire, del dictador Mobutu y de su pelea perdida con Muhammad Alí, en 1974, cuando resignó la corona. Con simpatía y sin rencores nos explicó: "Recuerdo todo sobre Zaire porque estuve demasiado tiempo antes de la pelea allí. No debería haberme quedado tanto, pero me sentía muy confiado porque sabía que le ganaba hasta que sufrí un corte en mi ojo en los guanteos previos. Debí haberme ido y suspender la pelea. No tuve una buena puesta a punto y aquel derechazo de Alí terminó conmigo. Fue un derechazo como nunca vi en mi vida. ¿Si se convirtió o no en un capítulo deportivo-cultural este match? La verdad es que los deportes son fantásticos, pero son sólo deportes. Si quieres ver más allá de ello, caes en una trampa. ¡Fue muy entretenido! Si pudiese volver a los 25 años y repetir la misma experiencia en Zaire no me preocuparía tano y me divertiría mucho más."Su carrera y su vida tuvieron un acontecimiento especial. El 17 de marzo de 1977, tras perder por puntos con su compatriota Jimmy Young, se descompensó en los camarines, totalmente deshidratado y su vida corrió peligro. Vivió algo único que - emocionándose- nos explicó: "Perdí una batalla, solo eso, pero al llegar al camarín y lamentar en soledad la derrota tuve una visión: en un segundo yo estaba tendido. Alrededor no había nada. Era la nada misma. Nada cerca de mis pies ni de mi cabeza. Todo a mi alrededor era nada. Estaba muerto. En una fracción sentí la muerte, pero también sentí a Dios. Sentí que me rescataría de la nada dándome una segunda oportunidad. Durante diez años no cerré los puños y no boxeé. Lo que viví aquella noche en Puerto Rico cambió mi vida por completo y jamás hubiese creído que podía pasar lo que pasó".A partir de allí, Foreman se convirtió en un hombre de fe. Levantó su propia iglesia junto a su segunda esposa, Cyntia Lewis, convirtiéndose en ministro de la Iglesia de nuestro Señor Jesucristo. Sus mensajes llegaban plenos a la gente, pero fue estafado por sus contadores, por lo que su iglesia y su centro deportivo estuvieron a punto de desaparecer. Milagrosamente, la venta masiva de sus parrillas para hamburguesas George Foreman -su negocio incipiente- lo convirtieron, paulatinamente, en un poderoso accionista que llegaría a tener millones de dólares de ganancias mensuales.Volvió al boxeo el 9 de marzo de 1987. Calvo y con 121 kilos de pesos en Las Vegas. Batió a Steve Zouski, entre hamburguesas, risas y críticas. Efectuó desde entonces 23 peleas más hasta perder por puntos con Evander Holyfield en 1991 en su primer intento de reconquista mundial. Insistió y volvió a resignar una nueva oportunidad al ser derrotado por Tommy Morrison, en 1993 por la corona (OMB).Cuando nadie lo pensaba -y asumiendo muchas críticas- tuvo una tercera y última chance mundialista: un año después, ante Michael Moorer, a quién noqueó con un mazazo de derecha produciendo un milagro deportivo en Las Vegas. Era otra vez campeón del mundo. Sus ojos encontraron un brillo diferente al evocar este episodio, pero optó por una frase singular para cerrar la entrevista: "Servir a Dios fue una gran oportunidad. Mas tarde, convertirme en predicador de la palabra también. Nos vas a ganar dinero aquíâ?¦ pero es un viaje maravilloso ¿Lo mejor que tiene la vida? Es cuando nacen tus últimos nietos y ya tienes a tres de ellos jugando contigo en las rodillas y no se quieran ir. Es lo mejor. ¡No necesito nada más!Nos cuesta convertir aquella conversación jovial y magna en una nota necrológica inesperada.Completó un récord excepcional de 76 victorias (68 KO) y 5 derrotas. Se retiró en 1996. Su golpe devastador en un cuerpo de 1.91 metros, que soportó desde 95 a 125 kilos -según las etapas deportivas- lo convirtió en una leyenda. Ejemplar, remarcable y humana. Ideal para indicarle a todos los jóvenes cuál es el camino a seguir. Cuál es el camino correcto.
"Era alguien muy especial, pero sobre todo, una gran persona", expresó el presidente de Estados Unidos
El campeón de los pesados más longevo de la historia falleció este viernes, a los 76 años.Sus combates más emblemáticos quedarán grabados para siempre en la retina de los fanáticos del boxeo.La primera derrota de Big George, en Kinsasa ante Muhammad Ali, será recordada por siglos.
Lo confirmó su familia. Foreman fue medallista olímpico, dos veces campeón del mundo y protagonista, con Alí, de la célebre "Pelea en la Selva" en Zaire. Leer más
La noticia fue confirmada por su familia en las redes sociales. El histórico peleador llegó a ser campeón mundial en dos ocasiones.
Un enfrentamiento histórico en África central que transformó un evento deportivo en un símbolo cultural, político y mediático de alcance internacional
El ex medallista olímpico también fue campeón del mundo en dos ocasiones
El mundo del boxeo está de luto por la muerte del excampeón mundial George Foreman, a los 76 años. El legendario deportista protagonizó una emblemática pelea contra Muhammad Ali antes de recuperar el título dos décadas después.La noticia fue confirmada por su familia a través de un comunicado, donde expresaron: "Nuestros corazones están rotos. Con profundo dolor, anunciamos el fallecimiento de nuestro querido George Edward Foreman quien partió pacíficamente el 21 de marzo de 2025 rodeado de seres queridos. Un predicador devoto, un marido entregado, un padre amoroso y un orgulloso abuelo y bisabuelo. Vivió una vida marcada por una fe inquebrantable, humildad y propósito. Un humanitario, un olímpico y dos veces campeón de peso pesado del mundo que fue profundamente respetado, Una fuerza para el bien, un hombre de disciplina, convicción, y un protector de su legado, luchando incansablemente para preservar su buen nombre para su familia". View this post on Instagram A post shared by George Foreman (@biggeorgeforeman)La muerte de "Big George" impactó en el mundo del boxeo, que se lamentó y envió mensajes a la familia. Uno de ellos fue Mike Tyson, quien en sus redes sociales: "Mi más sentido pésame a la familia de George Foreman. Su contribución al boxeo jamás será olvidada". A finales de 2024, cuando Tyson volvió al ring para enfrentar a Jake Paul, un youtuber 31 años menor, Foreman aconsejó al boxeador profesional respecto al duelo: "El tiempo está del lado de Paul".Condolences to George Foreman's family. His contribution to boxing and beyond will never be forgotten. pic.twitter.com/Xs5QjMukqr— Mike Tyson (@MikeTyson) March 22, 2025Foreman, un histórico de los pesos pesados del boxeo, se distinguía encima del ring por su potente pegada, que era una de las más temidas por los competidores. Además, su carrera quedó marcada por logros que la hicieron más alucinante. El texano había obtenido el cinturón del mundo el 22 de enero 1973, pero un año después se lo arrebataría otro icónico del deporte: Muhammad Ali. Sin embargo, "Big George" insistió y 20 años después volvió del retiro para vencer a Michael Moorer y convertirse en el campeón mundial más longevo de su peso con 45 años.Nacido en Texas, Foreman comenzó su carrera en el boxeo como un novato medallista de oro olímpico que intentaba hacerse un lugar, mientras que ascendió a la cima de la división de pesos pesados al derrotar a Joe Frazier en 1973, logrando su primer título del mundo. Un año más tarde enfrentó a Ali en Zaire, en una pelea bautizada como "Rumble in the Jungle" ("El rugido en la Jungla", en español), donde perdió su invicto.Tras su retiro del boxeo profesional, Foreman continuó su carrera en otros rubros. Después de recuperar el trono en 1994 peleó solo cuatro veces más y luego se trasladó al mundo empresarial y a la actuación. Incluso, en 2023 se publicó la película "El gran George Foreman", que retrata minuciosamente la vida y trayectoria del emblemático boxeador. También fue conocido como el rostro de la George Foreman Grill, una rudimentaria máquina de cocina que vendió más de 100 millones de unidades y le generó muchas ganancias económicas.El día que Foreman recuperó el título mundial con 45, a 20 de haberlo perdidoCon información de AFP y AP
Tenía 76 años y lo informó su familia. Fue medallista olímpico y dos veces campeón del mundo de los pesos pesados.
Reconocido por su impacto en distintas generaciones del deporte, logró ampliar su influencia más allá del cuadrilátero mediante una exitosa carrera como figura pública, líder espiritual y empresario con alcance internacional
Es uno de los principales expertos mundiales en el movimiento conservador y el radicalismo de derecha norteamericano. Politólogo y profesor asociado en la Universidad de Alabama, ha investigado el comportamiento electoral, el papel de la religión, los partidos políticos, la derecha radical y el movimiento conservador en Estados Unidos. Autor de siete libros, sus principales títulos son "El conservadurismo en una América dividida: la derecha y la política de identidad"; "Cómo entender la extrema derecha" y "La mayoría moderada". En este extenso reportaje analiza los primeros días del segundo mandato de Donald Trump, las diferencias con su primera presidencia, los cambios en el electorado en la última década y la normalización por parte de la ciudadanía de las actitudes de la extrema derecha que no se hubieran tolerado hace tan solo una década. Leer más
En plena Fiesta del cine, con entradas a $3.000, se repuso la película que adelantó a "E.T.".Anécdotas increíbles del filme de 1977 sobre extraterrestres, OVNIs y más.
George Clooney es uno de los pocos que se ganó el título de galán de Hollywood con una cabellera llena de canas. De hecho, esa melena plateada se convirtió en su arma de seducción durante años. Sin embargo, hace unos días el actor se sometió a una transformación que, por momentos, lo hizo pasar inadvertido por las calles de Nueva York. El protagonista de La gran estafa dejó atrás su sello para lucir un cabello castaño. ¿El motivo? Un nuevo personaje que lo hará subirse a las tablas de Broadway a principios de abril. Su radical cambio en fotos y la reacción de su mujer Amal, a quien -según el propio actor- no le gustó nada su nueva apariencia.El pasado fin de semana, los turistas que estaban por el SoHo, uno de los barrios más chic de Nueva York, tuvieron que mirar dos veces para ver si era él. Es que con su nueva melena oscura George Clooney está irreconocible. Esta metamorfosis tiene que ver con su inminente debut en Broadway, en donde el artista volverá a protagonizar Buenas noches y buena suerte, aunque esta vez sobre las tablas. Esta adaptación teatral de la película de 2005 (en la que también participó Clooney) trata sobre la legendaria exposición del periodista de noticias de CBS, Edward R. Murrow, sobre el senador Joseph McCarthy.Si bien esta nueva versión teatral, que tendrá su estreno el próximo 3 de abril, fue escrita por el actor y su también coprotagonista Grant Heslov (quienes también hace dos décadas atrás colaboraron en el guion cinematográfico), hay algunas diferencias con el recordado film. Mientras que en 2005 George interpretó al productor de noticias Fred Friendly, ahora se pondrá en la piel de Murrow, papel que por entonces encarnó David Strathairn.Mientras los fanáticos miran con cierto desconcierto su nuevo look, su mujer Amal fue tajante desde un principio. "Mi esposa lo va a odiar porque nada te hace parecer mayor que cuando un hombre mayor se tiñe el cabello", le decía el actor al New York Times hace unas semanas atrás, antes de teñir su cabello. Su premonición no solo se cumplió, sino que sus hijos se burlaron de su nueva melena, como también había anticipado. "Mis hijos se reirán de mí sin parar", imaginaba en referencia a sus gemelos, de 7 años, Alexander y Ella.Además de su transformación física, Clooney tuvo que someterse a ciertas prácticas para entrar en personaje. Una de ellas fue comenzar a fumar, ya que este legendario periodista fumaba tres paquetes al día y murió a los 57 años por complicaciones de un cáncer de pulmón. "Tuve que mejorar mi capacidad para inhalar", le explicó al medio estadounidense. E inmediatamente, confesó por qué lo hace a escondidas: "Salgo para que los niños no me vean y fumo un poquito", agregó quien planea cambiar a cigarrillos de hierbas cuando suba al escenario.40 años después...Para Clooney este estreno no solo significa volver a ser parte de una historia que coescribió en 2005, sino que es su regreso triunfal a las tablas después de cuatro décadas. "No he hecho una obra en 40 años, así que es aterrador", confesó según la agencia de noticias Reuters, durante una rueda de prensa en La Gran Manzana.Los nervios de Clooney no solo tienen que ver con haber pasado tanto tiempo fuera de los escenarios, sino con lo difícil que le resulta a esta edad recordar un libreto. "Memorizar las líneas ha sido una pesadilla (...) ¡No recuerdo los nombres de mis hijos! ¡Tengo 63!", bromeó el actor durante su paso por The Late Show with Stephen Colbert a mediados de febrero. "Es raro. Cuando hice E.R. Urgencias, hacíamos 12 páginas diarias de diálogo médico y podías venir y sacarlo todo. Yo tenía 30 años (...) Ahora no puedo recordar nada", repitió.Si bien su estreno para el público está pautado para principios de abril en el Winter Garden Theatre, a partir de esta semana comenzarán las funciones de preestreno con prensa e invitados especiales. "Lo divertido de esto es que podemos hacer una obra sobre un tema que nos toca muy de cerca, que tiene que ver con decir la verdad", reflexionó.Buenas noches y buena suerte trata sobre el enfrentamiento entre Edward R. Murrow, un pionero del periodismo televisivo, y el senador estadounidense Joseph McCarthy, conocido por liderar las investigaciones anticomunistas de la HUAC (Comité de Actividades Antiestadounidenses) durante la década de 1950. La obra explora cómo Murrow y su equipo de noticias desafiaron la paranoia y la propaganda de la época, enfrentándose al gobierno federal y a una nación dividida.En esta puesta, Clooney estará acompañado por un gran elenco, entre el cual se encuentran actores como Mac Brandt, Will Dagger, Christopher Denham, Glenn Fleshler, Ilana Glazer, Clark Gregg y Paul Gross.
"Hay que seguir" es una frase que abunda (como pocas cosas) en estos tiempos. Indica que es lo que hay que hacer pese a determinada circunstancia, como si no hubiese alternativa. Bajar la cabeza o levantarla, según la situación, y seguir adelante. Llama la atención cuando se convierte en el título de una canción; así le sonó al guitarrista Luis Salinas, cuando la escribió. El 14 de marzo próximo, en el Teatro Presidente Alvear, Luis hará una visita transversal a su última publicación, que está compuesta de cinco álbumes: uno de música argentina, dos de latin jazz y fusión, otro de guitarra sola (donde aborda distintos géneros) y el último, el más novedoso, con su grupo y la participación de sus hijos Juan y Rita. Todo eso quedó compilado bajo el nombre de aquella canción.En esa retrospectiva seguramente suene aquella canción que tituló "Hay que seguir", porque parece representar su presente, a los 66; después de ese inventario musical resumido en cinco tomos, y después de sucesos personales de los últimos años que lo atravesaron con fuerza.Luis Salinas es el de aquellas tocadas en Oliverio, hace más de tres décadas, y el que fue invitado por artistas de fama internacional, como B. B. King, Hermeto Pascoal o George Benson. Es el que hoy, discretamente, sigue buscando la complicidad de su hijo Juan, también guitarrista, para seguir haciendo música. Y el que a veces marcha al ritmo de los tiempos de su hija Rita, a quien escucha con emoción cuando su voz -hoy es una chica de 14 años- queda impresa como testimonio de su nuevo disco.-¿El título surge de una hecho doloroso para la familia?-Dios ha sido generoso conmigo. No por la guita sino por esas cosas que he vivido como músico, como persona. Una de esas cosas fue conocer a Silvia, la mamá de mi hijo Juan. Fue la primera vez que fui a tocar a Rosario. Esa noche la conocí. Toqué en un lugar al aire libre y después fuimos a otro llamado La Puerta, donde terminamos haciendo una gran zapada. Fue como si estuviera escrito. Quise volver y pude hacer una Sala Lavardén. Ella conocía a gente de esa sala donde, casualmente, vuelvo a tocar el 10 de mayo próximo. Rosario fue el primer lugar que aceptó mi libertad artística. En Buenos Aires me costó más.-Silvia fue tu compañera y tu manager-Sí, en un momento también fue mi manager. Hay algo clave. Un día fuimos a ver a Paco de Lucía a Rosario y me mostró un test de embarazo. Era la llegada de Juan. ¿Si no era con ella, con quién iba a ser? Cuando el destino se la llevó, eso fue hace tres años, no sabía qué hacer, que decir, que pensar. Fue un gran amor. Fue una madraza. Su partida fue algo tan fuerte que me quedó en el alma. Y un par de semanas después salió esta canción: "Hay que seguir". La versión que grabamos es larga porque cuando la tocamos sentimos que ella estaba ahí, por eso no la queríamos largar. Y como era el tema más fuerte pensé que el disco [la colección de cinco volúmenes] se tenía que llamar así. Cuando toco esa canción, siento que la llamo y viene. No la tocamos siempre; fue duro para Juan. En España la tocamos y Juan estaba extrañando mucho a la madre. Y costó. Con los años uno aprende que la música es una energía espiritual. No son solo notas que aprendés y listo. Y el público sabe cuándo sos sincero.-¿Cuándo te das cuenta de eso?-Una vez [el productor musical] Tommy LiPuma me contó que [George] Benson le dijo: "Cuántas cosas tiene Luis para decir; ya se irá dando cuenta con el tiempo y las dirá de otra manera". En ese momento, para acallar las críticas quizás yo solo tenía que tocar un par de notas y nada más. Pero íntimamente me daba cuenta de que eso era mentira, porque solo sería para conformar a no sé quién. A mí, cuando tocaba los domingos en Oliverio, me decían: "Vos tendrías que hacer tal cosa o tal otra". Y yo respondía: "¿Por qué no dejan que el público decida? Si deja de venir, será que estoy equivocado". La gente respondió. Recuerdo un día que toqué con Frank Gambale. Hicimos un homenaje a Benson, con Guillermo Vadalá, el Negro Lozano y Jota Morelli. Terminamos de tocar y nos fuimos a tomar algo. Yo no me sentía bien y no sabía por qué, hasta que me di cuenta de que estaba yendo para el mismo lado. Que todo era al mango. Había un público para eso. Pero ese día fue clave. Al otro día empecé a tocar lo que me salía. Y me salió una zamba, un tango, un bolero.-¿Y ese eras vos?-Claro. Por eso comencé a cambiar el repertorio. Me pasó que se fue la gente cuando comencé a tocar ese repertorio. Pero después gané otro público. Si no disfrutás, no sirve. Una vez se lo dije a Juan: escuchá tus notas, escuchá a tus compañeros y disfrutá. Así la música sale favorecida. La mejor maestra es la propia canción, porque es la que te dice qué tenés que tocar. Si entrás en ese mundo ya está. No se trata de ver quién toca más. Está bien si te pasa de chico, pero ya de grande, no.-¿En qué momento te diste cuenta de esto?-Cuando sentí que me hacía bien cuando tocaba la guitarra. Mi viejo tocaba de todo. Yo fui una continuidad de él. Ningún músico es más importante que la música.-Algunos creen que sí.-Sí. Pero la vida pasa muy rápido, la tenés que disfrutar. Yo traté de competir conmigo. Y viví situaciones de competencia. Recuerdo una vez, en España. Estaba [el brasileño] Rubén Dantas, percusionista de Paco de Lucía. Mientras se armó una zapada, subió a tocar un vasco que intentó pasarme por arriba. Repetía todo lo que yo hacía, como un loro. Y me puse a competir con él. Y el brasileño, que estaba sentado en la barra y se dio cuenta de eso, desde el fondo nos dijo: "¡A ver si tienen más respeto por la música!". Tenía razón. De esas cosas se aprende. Todo eso cambió para bien. Mi viejo me decía: "Nunca abras la heladera en la casa de otra persona". Y cuando toqué con B.B. King, mi papá también me dijo que nunca dé un paso adelante cuando me invitan a tocar. Toqué con él, hice apenas una vuelta de solo y me quedé ahí.-Tu papá fue uno de tus maestros, por lo que contás.-Mi viejo, cuando tenía 11 años, en una radio de Sáenz Peña, tocaba el hi-hat con un pie y el bombo con el otro. Al mismo tiempo tocaba la guitarra y la armónica. Hugo Díaz hizo unos concursos, para ir a tocar con él. Mi viejo ganó pero mi abuela no lo dejó ir. Se puso tan mal, que Hugo Díaz le regaló una armónica. Le pedí que tocara un chamamé en uno de mis discos. Primero me dijo que no, porque yo tocaba con Franco Luciani y Antonio Serrano. Pero vino al estudio y el [ingeniero de sonido], el "Portugués" Da Silva, lo grabó sin decirle que lo estaba grabando. Él tenía una frase: "No sé si soy bueno, pero que soy músico, soy músico". Y yo lo abrazaba cada vez que decía eso.-¿Por qué ahora estás en un plan tan retrospectivo?-Hice lo que necesitaba hacer. Gané ocho Premios Gardel y fui nominado dos veces al Grammy, pero nunca pensé en eso. Pasaron nueve años hasta poder volver a grabar. Me dejé llevar, grabé todo y después comencé a ordenar.-¿Y la familia es el bonus?-Mi hija tiene la frase más linda que escuché acerca de la guitarra. Es de cuando tenía seis años: ¿Papá, tocar la guitarra es como cantar con las manos, no? Si tuviera una escuela de guitarra, lo primero que pondría, allá arriba, es la frase de Rita. Otra vez me dijo que la percusión no era para ella, porque pensaba cuando tocaba. Tiene 14. Es una mujer de hoy. Cuando estaba preparando esta grabación me preguntó si ella también podía grabar. Fue y cantó cuatro temas, de "Alfonsina y el mar" a un tema que cantaron Lady Gaga y Bennett. Que estén mis dos hijos acá hizo que se transformara en el disco más importante de mi vida.-¿Cómo vive Juan el hecho de ser "el hijo deâ?¦"?-Uno quiere darle a los hijos todo lo que puede. Como comprarle una guitarra cuando no tenía plata. Un día lo miré fijo y le pregunté: "¿Realmente la necesitás?". Al otro día, le compré la Fender. Desde ahí, acá todo fue en función de él. Pero es cierto que uno tiene que ser uno. Le dije algunas cosas. Que la música tiene que ser una necesidad. Una cosa es querer tocar y otra es necesitar hacerlo, más allá de que haya más o menos laburo. Otra es sacar lo que uno tiene adentro, porque eso te va a hacer distinto. Una vez estuve en un bar en los Estados Unidos, donde estaban tocando los músicos de Prince. En un momento apareció Prince, prendió un cigarrillo y se puso a tocar a lo West Mongomery. Después hizo otras cosas y yo lo veía cada vez más grande. Al final pude hablar un poco con él. Me dijo que él escuchaba a todos, pero después trataba de ser él, porque era lo más fácil. Esas cosas son las que le digo a Juan. El tiene que ser Juan abajo y arriba del escenario. Mirá, a mí me criticaban, decían que no paraba de tocar. Cuando grabé Salinas, me salió un disco ordenado. ¿Qué fue lo que dijo la crítica? "Este no es el Salinas que habíamos escuchado".-¿Rita va a seguir por el camino de la música?-No lo sé. Y tiene su carácter. Yo solo quiero que sea feliz. Es muy comprometida socialmente. Este disco es un gran regalo y estoy ansioso por tocar en el teatro.-¿Y cómo sigue esto?-Después del 14, en el Teatro Alvear, vamos a San Juan, San Luis y Mendoza. Después Rosario y Córdoba y hay ofrecimiento para Perú, Chile y Brasil. Hay una cosa dando vuelta, con [el tecladista] Ricky Peterson. Vamos a ver si se da eso. Estoy pasando un momento hermoso. Hace un tiempo pensaba: "¿Cuánto hace que no grabo?". Y empecé a buscar grabaciones, para ver si al menos podía subir algo a Spotify pero Dios estaba mirando, y después apareció esta posibilidad de grabar.Para agendarLuis Salinas, en vivo. Sala: Teatro Alvear (Av. Corrientes 1659). Funciones: 14 y 15 de marzo, a las 21.
A los 15 años, el actor enfrentó una batalla física y emocional, que casi arruina su confianza y sus sueños de llegar al estrellato
En la revista femenina Idilio, la fotonovela en Argentina adquirió una dimensión estética extraordinaria gracias a la mirada del fotógrafo George Friedman que se expone en una muestra en el Malba. En esas fotografías para historias folletinescas también se filtraba una mirada camp y algunos guiños pioneros de la cultura queer.
La pasión al principio no correspondida de Eric Clapton por Pattie Boyd se volcó en canciones eternas, como el himno "Layla", una de las más profundas composiciones del guitarrista
Desde Eric Clapton hasta Ronnie Spector, el guitarrista de los Beatles regaló obras maestras que enriquecerían otros álbumes y carreras icónicas en el rock, según Far Out
La exconductora de televisión, quien desde hace años no se le conoce una pareja estable, indicó que en un futuro le gustaría enamorarse
La polarización dentro de los Beatles se reflejó en un controvertido proyecto sonoro grabado por Lennon y su nueva pareja. Años después, este álbum sigue generando debates por su radicalidad, según Far Out
Alejado de Hollywood, el actor disfruta su finca en la Provenza, donde la rutina es más pausada, la música es protagonista y el tiempo en familia es lo más valioso, reveló en una entrevista con The New York Times
George Clooney ha estado saliendo a fumar a escondidas. No como su amigo Barack Obama solía hacerlo, cuando era candidato a la presidencia y su esposa, Michelle, lo presionaba para que dejara de fumar. A Clooney ni siquiera le gusta fumar. "Tuve que mejorar mi habilidad para inhalar", dijo. "Salgo para que los niños no me vean y fumo un poco". Planea cambiar a cigarrillos de hierbas cuando haga su debut en Broadway el mes próximo en una adaptación teatral de su película de 2005, Buenas noches y buena suerte.Fumar ha sido desagradable, dijo, porque en su clan de Kentucky "ocho tíos y tías murieron de cáncer de pulmón: es un gran problema". Señaló que su tía Rosemary Clooney, cantante y estrella de cine, tenía 74 años cuando murió en 2002 por complicaciones de un cáncer de pulmón. "Mi padre es el único que no fumaba y tiene 91 años".Clooney, de aspecto esbelto con una camisa negra y pantalones azul marino, se sentó en un sofá color de rosa a finales del mes pasado en Casa Cipriani, un hotel ubicado en Manhattan. Se sentaría allí durante las próximas cinco horas, hasta que el sol se pusiera sobre la bahía, sin molestarse en almorzar, sin mirar su teléfono, sin consultar a sus guardaespaldas, limitándose a contar historias fascinantes sobre el amor, Hollywood y la política, como una Sherezade moderna.A diferencia de la película, en la que interpretó el papel del no fumador Fred Friendly, el productor del periodista de CBS Edward R. Murrow, Clooney interpretará en Broadway al propio Murrow, quien tenía el hábito de fumar tres paquetes al día y murió en 1965 a los 57 años por complicaciones de un cáncer de pulmón. Una década antes de su muerte, Murrow fue uno de los primeros en informar sobre la relación entre el tabaquismo y el cáncer de pulmón en su programa See It Now. Fue el único episodio en el que no encendió un cigarrillo.Cuando Clooney dirigió su aclamada película, las organizaciones antitabaco le recriminaron que el personaje de Murrow, interpretado por David Strathairn, fumara sin parar. "Yo decía: 'bueno, todos murieron de cáncer de pulmón, no podés no hacer lo que es factualmente cierto'", recuerda. Su interés por lo que es factualmente cierto â??y por cómo los estadounidenses ya no parten de la misma base de hechosâ?? lo ha llevado de vuelta a una época en que el país consideraba a algunas personalidades de noticias de televisión como autoridades morales.Murrow estrechó lazos con los oyentes de radio durante la Segunda Guerra Mundial transmitiendo desde Londres en medio del bombardeo, y luego con los primeros telespectadores entrevistando a figuras célebres como John F. Kennedy y Eleanor Roosevelt, además de Lucille Ball y Desi Arnaz en el set de I Love Lucy. En See It Now, Murrow desafió a los poderosos, el más famoso Joseph McCarthy, el senador de Wisconsin cuyo nombre se convirtió en un "ismo" cuando difamó y escupió veneno indiscriminadamente, buscando comunistas y acusando falsamente a la gente de ser comunistas."No debemos confundir la disidencia con la deslealtad... No caminaremos con miedo los unos de los otros. No nos dejaremos llevar por el miedo a una era de irracionalidad", dijo Murrow en su ataque a McCarthy que se produjo unos meses antes de que el abogado Joseph Welch pronunciara su frase "¿No tenés sentido de la decencia?" durante las audiencias del Ejército-McCarthy.Clooney y su colaborador de toda la vida, Grant Heslov, escribieron la película y la obra de teatro. Habían concebido la película como una producción en vivo para CBS, como la nueva versión que Clooney hizo en 2000 de la película de Henry Fonda, Límite de seguridad."Siempre me entusiasmó el riesgo de no tener red", dijo Clooney, quien también presionó para hacer un episodio en vivo de ER cuando interpretaba al médico galán Doug Ross en el éxito de NBC. Pero después de que Justin Timberlake rasgara el traje de Janet Jackson y dejara al descubierto sus pechos durante el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl de 2004, los ejecutivos de CBS perdieron el gusto por arriesgarse con la televisión en vivo. Clooney tuvo que hipotecar su casa para ayudar a financiar la película en blanco y negro, que recibió seis nominaciones al Oscar, incluido el de Mejor guión.Clooney tenía la intención de interpretar a Murrow, pero después de la lectura de guion, le dijo a Heslov: "No tengo la seriedad necesaria". Heslov estuvo de acuerdo. Murrow tenía "el peso del mundo sobre sus hombros", dijo Heslov en una entrevista telefónica, "y en aquel momento George no lo tenía". Ahora, dos décadas después, a los 63 años, Clooney está preparado. "Siempre sentí que había tristeza en Murrow, y eso no era algo que pudiera asociarse conmigo a los 40 años", dijo. Ahora tiene que dar marcha atrás en el tiempo y cubrir su melena canosa con tinte negro."Mi esposa lo va a odiar porque nada te hace parecer más viejo que cuando un hombre mayor se tiñe el pelo", dijo. "Mis hijos se van a reír de mí sin parar".En cuanto a dar vida a la historia para los asistentes al teatro, Clooney dijo que el escenario se transformará en una redacción con unos 30 monitores en movimiento que mostrarán imágenes antiguas. David Cromer, el director de la obra y ganador de un premio Tony, recurrió al diseñador de video y proyecciones David Bengali, para que ayudara, como dijo Cromer, a "recrear lo que es ver cómo se hace la televisión"."Lo haremos en el escenario con cámaras y transmisión en vivo para mezclarlo con las imágenes reales", continuó Cromer, "así que verás a George y luego verás a Joseph McCarthy y verás a George y verás a Joseph McCarthy". Clooney dijo secamente: "McCarthy sigue siendo interpretado por McCarthy, por lo que estoy bastante seguro de que recibirá un Tony". Contó que antes del estreno de la película, el público que vio el preestreno se quejó de que "el tipo que interpretaba a McCarthy estaba sobreactuando".Clooney y Heslov empezaron juntos como actores en Los Ángeles, haciendo obras en pequeños teatros. Una llamada The Biz, dirigida por Miguel Ferrer, primo de Clooney, trataba de actores que intentaban triunfar. Y Clooney actuó en una obra sobre Sid Vicious llamada Vicious en 1986, que lo llevó al Teatro Steppenwolf de Chicago. Desde entonces no ha pisado las tablas.La gente puede pensar que es un bebé nepo (término para referirse a los hijos de celebridades que se benefician de las conexiones de sus padres para impulsar sus carreras), pero en realidad no lo es. Fue un ascenso largo y duro. Cuando llegó a Hollywood, fue chofer de Rosemary Clooney y su camarilla de cantantes. "Se hacían llamar las 'chicas malas'", dijo. "Bebían grandes vasos de vodka. Eran muy duras, malvadas y obscenas. Y cuando se ponían a cantar, tenían un talento increíble".Cuando la gente le dice que parece que le resulta fácil, dijo: "Me resulta fácil porque trabajo muy duro. Parte del arte de hacer lo que hacemos para ganarnos la vida es que debe parecer fácil".Casi cuatro décadas después, Heslov y Clooney subieron al escenario del Winter Garden Theater, donde el espectáculo comienza los preestrenos el 12 de marzo. Heslov dijo: "Los dos nos quedamos como: '¡Wow!'".Clooney admite que la idea de actuar en Broadway es desalentadora, aunque ha recibido cierto apoyo moral de su antigua pareja en ER, Julianna Margulies, quien acaba de terminar su propia actuación en Broadway en Left on Tenth, de Delia Ephron."Estoy aterrorizado", dijo. "¡No es broma! Voy a hacer 11 monólogos. Cuando te hacés mayor, tu memoria no es la misma. Cuando hacía ER, eran 12 páginas de diálogos médicos. Lo mirabas por la mañana y decías: "¡Está bien, vamos!". Ahora te hacés mayor y decís: '¿Qué me pasa? Bueno, no bebas vino esta noche'"."En nuestro mejor momento"Dijo que coescribió la película como una crítica a la mayor parte de la prensa que se inclinó antes de la invasión de Irak en 2003. Clooney criticó al presidente George W. Bush por la guerra mal concebida, y a él lo llamaron traidor por estar en contra. "Fueron tiempos muy duros", recordó.La película, dijo, trataba realmente de: "Necesitamos a la prensa" porque "el gobierno sin control es un problema".Ahora, con el presidente Donald Trump sumiendo a Washington en un tumulto, dijo Clooney, vivimos una época en la que "tomás una narrativa, te la inventás, no te preocupás por los hechos, no te preocupás por las repercusiones". Dijo que la obra "parece más sobre la verdad, no solo sobre la prensa. Los hechos importan".Ciertamente, hay ecos inevitables del Washington de McCarthy en el Washington de Trump, un lugar plagado de "hechos alternativos", como los llamó Kellyanne Conway, así como de teorías conspirativas, ataques temerarios y medidas punitivas. La Casa Blanca, por ejemplo, quiere que los empleados del gobierno delaten a quienes promueven programas de diversidad, equidad e inclusión. A los periodistas de Associated Press se les prohibió cubrir algunos eventos de la Casa Blanca porque el medio de comunicación se negó a referirse al Golfo de México como Golfo de América."Ya no hay normas que valgan", dijo Clooney. "Es como dejar que un bebé cruce la autopista 405 a media tarde".Se detiene, prefiriendo mantener una actitud positiva. "Creo en toda esa idea de que el arco de la historia se inclina hacia la justicia, y sé que ahora mismo no lo parece", dijo. "Creo que siempre hay oscilaciones del péndulo. Creo que la primera elección de Trump fue el resultado de ocho años de un presidente negro".En cuanto a la elección de Trump en 2024, dijo: "El gobierno de Biden fue terrible al explicar que somos una economía mundial, en la que en realidad nos iba mejor que a todos los demás países del G7. Fueron malos contando la historia porque su mensajero no funcionaba lo mejor posible, por no decir otra cosa".La decisión de ABC News de dar a la futura fundación y biblioteca de Trump 15 millones de dólares para resolver una demanda por difamación, y un posible acuerdo de CBS News â??Shari Redstone, la jefa de Paramount Global, empresa matriz de CBS, quiere la bendición del gobierno para adquirir Skydance â?? han provocado un escalofrío en las salas de redacción.Si Redstone llega a un acuerdo, Jake Tapper dijo en la CNN: "Sería la cadena de Edward R. Murrow a instancias de sus propietarios diciendo: 'No le diremos la verdad al poder. Aceptaremos el poder a expensas de la verdad'". Y Clooney secundó a Tapper, diciéndome: "Tiene un efecto escalofriante sobre la prensa".No sabe si el público verá su obra como una crítica a Trump. "Creo que les va a gustar oír las conversaciones sobre nosotros en nuestro mejor momento", dijo. "Murrow nos representó en nuestro mejor momento".La estrella que en su día fue bautizada como "El hombre vivo más sexy" por People, dijo que, en sus días de soltero de a pie, conoció a Trump. "Era un tipo de Nueva York", dijo Clooney. "Estaba en un restaurante y decía: "¿Cómo se llama esa camarera?" Trump incluso sugirió un médico que podría ayudar a Clooney con una lesión que había sufrido en el rodaje de Syriana, la película que le valió el Oscar al Mejor actor de reparto.Y añadió: "Tenemos que esperar que pueda tener esa noche de Scrooge en la que se despierta y hay algunos fantasmas de la Navidad que le dicen: 'Hay algunas cosas buenas que puedes hacer por la gente'".Clooney ha sido cortejado por algunos demócratas en altos cargos para que se presente a las elecciones presidenciales. ¿Se lanzaría alguna vez? "No", dijo, de manera algo convincente.Me pregunto qué opina del explosivo Elon Musk, quien está funcionando como un cuarto poder del gobierno. "Tuve un problema con él", dijo Clooney con orgullo. "Se enfadó conmigo porque compré, creo, el tercer o cuarto Tesla que se vendía y se estropeaba todo el tiempo". Lo mencionó en un artículo de Esquire en 2013 y Musk tuiteó sarcásticamente: "En otras noticias, George Clooney informa de que su iPhone 1 tenía una falla en 2007â?³. Clooney profirió un epíteto, diciendo: "¿Quién sos vos? Acabó siendo Elon Musk".Hazlo cuando te resulte incómodoEn un mundo con pocas autoridades morales, Clooney se remonta no solo a Murrow, sino también a su padre, Nick Clooney, presentador de noticias en Kentucky y más tarde de AMC, quien llamaba la atención a la gente durante la cena si menospreciaban a alguien o decían algo intolerante, y luego se levantaba de la mesa.De niño, recuerda Clooney, "siempre le decía: 'Bueno, ¿no podés dejar de escuchar para que podamos terminar de comer? La verdad es que, por supuesto, tenía razón. Él y mi madre nos enseñaron: 'Hay que hacerlo cuando es incómodo'".A Nick Clooney le gustaba subirse a una silla y recitar el discurso de Murrow Cables, sobre cómo la televisión se estaba convirtiendo no en una herramienta para informar, sino en un juguete para distraer, un argumento que auguraba la era de internet. Ahora los magnates de la tecnología han reemplazado a los magnates de las redes; controlan la comunicación â??y en gran medida las emocionesâ?? en los Estados Unidos. Clooney, quien no tiene presencia en las redes sociales, dijo que ve "mucha cobardía" cuando los magnates de la tecnología se inclinan ante Trump.Partes de ese discurso se han incorporado al guion, dijo. Murrow advirtió: "Este instrumento puede enseñar, puede iluminar; sí, e incluso puede inspirar. Pero solo puede hacerlo en la medida en que los seres humanos estén decididos a utilizarlo con esos fines. De lo contrario, no es más que cables y luces en una caja. Hay una gran batalla, quizá decisiva, que librar contra la ignorancia, la intolerancia y la indiferencia"."¿Qué pasará cuando no sea Edward R. Murrow quien se ocupe de la tienda, sino Tucker Carlson?". dijo Clooney, refiriéndose al comentarista de extrema derecha. "Es curioso cómo momentos realmente buenos e importantes también pueden abrir la puerta a cosas realmente horribles".Clooney intentó inculcar los valores de su padre. Luchó durante años para concienciar sobre el conflicto y la hambruna en Darfur. Entre otras obras benéficas, creó la Fundación Clooney para la Justicia con su esposa, Amal, abogada de derechos humanos, para "hacer justicia" y ayudar a las víctimas de abusos contra los derechos humanos, al tiempo que hace caer el mallete sobre los perpetradores.El pasado junio, Clooney y Obama aparecieron en una brillante recaudación de fondos en Los Ángeles, en la que se recaudaron 28 millones de dólares para el presidente Joe Biden. Cuando Biden pareció quedarse paralizado en el escenario, Obama se lo llevó. Clooney se quedó boquiabierto. "Lo vi durante horas un año antes en el Kennedy Center, y esa noche vi a alguien mucho menos agudo", dijo Clooney. "Siempre me ha gustado Joe Biden, y me sigue gustando".Pero tras el fracaso de Biden en el debate, Clooney escribió un ensayo como invitado para The New York Times en el que instaba a Biden a apartarse. La gente pensó que Obama estaba detrás de eso, pero Clooney dijo que lo hizo a pesar de que se le instó a no hacerlo.Muchos demócratas estaban agradecidos a Clooney, quien dijo públicamente lo que a ellos les daba pánico en privado. Biden, que entonces tenía 81 años, había prometido ser "un puente", pero se aferraba obstinadamente al poder. Pero el cordón sanitario de Biden en la Casa Blanca y algunos otros demócratas se enfadaron con el actor. El artículo suscitó un debate sobre si las celebridades deberían tener papeles tan destacados en un partido que ya se percibe como rico, costero y desconectado de la realidad.Biden abdicó de su responsabilidad ocultando sus incapacidades, me dijo Clooney, y "los medios, en muchos sentidos, fallaron".Trump se burló de Clooney en Truth Social, escribiendo en parte: "Clooney debería dejar la política y volver a la televisión. ¡El cine nunca le ha funcionado!". En una entrevista de septiembre con Jimmy Kimmel, Clooney bromeó, en respuesta a la sugerencia de Trump: "Lo haré si él lo hace".Señalé que Trump presionó para interpretar al presidente en Sharknado 3, poco antes de que iniciara su búsqueda en la vida real. Clooney respondió con un tono inexpresivo: "Todo lo que puedo decir al respecto es: él tiene una estrella en Hollywood Boulevard. Yo no".Sacude la cabeza. "La parte de esto que es una locura es que él es el 'hombre del pueblo'. Yo cortaba tabaco por 3 dólares la hora y vendía seguros puerta a puerta y no tuve seguro durante 10 años al principio de mi carrera"."Todo cobró sentido"Clooney llegó a Nueva York a finales de enero con Amal y sus gemelos de 7 años, Alexander y Ella. Tienen una casa en Inglaterra y otra en Kentucky, cerca de sus padres, quienes acaban de celebrar su aniversario de bodas número 65. Pero su residencia principal es ahora una granja en Francia."Al crecer en Kentucky, lo único que quería era alejarme de una granja, alejarme de esa vida", dijo. "Ahora me encuentro de nuevo en esa vida. Conduzco un tractor y todas esas cosas. Es la mejor oportunidad de tener una vida normal". Aunque le resulta "difícil" pasear por Central Park, dijo que está disfrutando de la ciudad y de poder llevar a sus hijos a la escuela."El héroe favorito de mi hijo es Batman. Le digo: 'Sabés que yo fui Batman'. Me dice: 'En realidad, no'. Le digo: 'No tenés ni idea de la razón que tenés'. Si supiera que yo era ese Batman, nunca me respetaría". Clooney se ha disculpado por su papel de Batman con pezones. "Estuve terrible en él", declaró a GQ.Hace poco fueron a jugar a los bolos. "Hacía 30 años que no jugaba a los bolos", dijo riendo. "¡Dios mío! Es algo increíble, envejecer, pensar que aún podés hacer cosas que te gustan". Aun así, sus hijos lo hacen sentirse más joven. "Vamos en el auto a la escuela y les hago escuchar heavy metal porque me gusta cuando cantan. Mi hija se ha enamorado de las canciones trágicas. Le encanta 'What Was I Made For?' de Billie Eilish y 'Without You de Harry Nilsson'". Pero son niños felices, así que tengo mucha suerte".Heslov dijo que Clooney se ha asegurado de mantener cerca a sus viejos amigos, para no estar rodeado de aduladores. Añadió que los gemelos de Clooney han tenido un efecto "profundo" en él, haciéndole sentirse "más cómodo" y ayudándole a darse cuenta de que debe "tomarse tiempo para disfrutar de las cosas".Clooney está entusiasmado con su papel protagónico en Jay Kelly, una nueva película de Noah Baumbach para Netflix, en la que interpreta a una estrella de cine querida por todos menos por sus hijos.Él y Brad Pitt están a punto de hacer otra película de Oceans. En esta, Clooney dijo irónicamente: "Es como si todos fuéramos demasiado viejos para hacer los trabajos que solíamos hacer". Señaló que tuvo una carrera más larga como protagonista porque no hubo una avalancha de ellos clamando por sacar a su generación de estrellas de sus tronos. "Eso nos dio a Pitt, a mí y a algunos de nosotros espacio para seguir trabajando", dijo. "Algunos tipos han tenido éxito recientemente, como Glen Powell y otros, y yo digo: 'Ese tipo tendrá una carrera muy buena'".¿Y cómo fue la transición de soltero glamoroso a esposo y padre? "No estaba realmente interesado en ser padre", dijo. "Entonces conocí a Amal y nos enamoramos. Debo decir que, después de eso, todo cobró sentido".La conoció cuando ella y una amiga pasaron por su casa en el lago Como de camino al Festival de Cannes. Antes de que llegara, su agente, Bryan Lourd, quien la había conocido, le dijo: "Te digo que te vas a casar con ella". Pero no confiaba en el gusto de Lourd. "Entonces entró Amal. Me quedé como: '¡Dios mío!' Entonces no pensé realmente que tendría muchas posibilidades con ella porque yo era 17 años mayor y ella parecía tener todo lo que necesitaba".Cuando ambos estaban en Londres unos meses más tarde â?? él estaba componiendo la banda sonora de una película y ella negociaba con los Hermanos Musulmanes para proteger los derechos de las mujeres en la nueva constitución de Egipto â??, la invitó a verlo componer. "Pensé, bueno, si alguna vez vas a impresionar a alguien, es con la Orquesta Sinfónica de Londres en Abbey Road".¿Por qué no se siente amenazado por el éxito de su esposa? "Estoy orgulloso de estar en la misma habitación que ella", dijo. "Estoy orgulloso de ser su esposo. Estoy orgulloso de ser el padre de sus hijos".Clooney es consciente del paso del tiempo. "Tuve una conversación con Amal cuando cumplí 60 años", dijo. "Le dije: 'Mira, aún puedo jugar baloncesto en toda la cancha. Todavía puedo correr. Todavía puedo hacer prácticamente todo lo que hacía cuando tenía 30 años. Pero en 30 años, tendré 90. Es una cifra real. Mi padre acaba de alcanzarla. Y hay cosas que no hacés por más barritas de cereales que comas. Le dije a Amal: 'Tenemos que centrarnos en los próximos 20, 25 años para asegurarnos de que hacemos todo lo que podemos'. No solo trabajar, porque nadie al final de su vida dice: 'Dios, ojalá hubiera trabajado más'".Se puso más contemplativo. "Hay algo en encontrar a la persona que necesitás, particularmente a cierta edad, y a partir de ahí todo es fácil"."Renovamos nuestra casa", continuó. "Amal decía: 'Quiero pintar esta pared de amarillo'. Bueno, si yo tuviera 27 años y me dedicara a la construcción, habría dicho: 'Bueno es un color estúpido'. Pero la verdad es que a los 60, simplemente decís: 'Está bien'. Hay tantas cosas que habrían causado fricción y no lo hacen".Puede que a Clooney no le gusten las paredes amarillas, pero se mantiene radiante. "Me saqué el premio mayor", dijo. "Todo ha salido bien. Si salgo a la calle y me atropella un autobús mañana, no sería un gran problema".
George Martin, fallecido en 2016, destacó cómo su obra monumental Pet Sounds influyó profundamente en la creación de Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band y en la música de los Beatles
La directora Halina Reijn eligió dicha canción para "Babygirl" desde el primer borrador del guion, con el fin de resaltar la vulnerabilidad y la conexión emocional entre los protagonistas
El presentador se refirió a lo que vivió el comediante en el escenario de la Quinta Vergara, donde estarán varios colombianos
Exiliado tanto de la Primera como de la Segunda Guerra Mundial, llegó a probar suerte en París y en Hollywood, pero terminó trabajando en la industria editorial argentina, entre los años '40 y '60. Esta exhibición curada por el argentino Facundo de Zuviría y el brasileño Samuel Titan por fin le hace justicia.
Fue el realizador de "Peligro en Miami" con Alec Baldwin, y "La trampa" con Owen Wilson y Morgan Freeman.Incluyó el hit de la banda argentina en "Tiro al blanco", con John Cusack, Minnie Driver y Dan Aykroyd.
La conductora de Magaly TV La Firme comentó la reciente interacción entre la "Señito" y el productor musical, asegurando que hubo un evidente intercambio de miradas y sonrisas. Además, destacó la invitación de George a Valcárcel para asistir juntos a la alfombra roja de Premios Lo Nuestro
El productor musical dio a conocer que no invitó a la salsera para que sea parte de dicha premiación, esto pese a que la 'Yaha' siempre estaba a su lado
Los hijos del príncipe William han pasado un rato de conexión juntos, promoviendo así el desarrollo de su infancia
Washington escribió una carta restando importancia a una incursión que devastó reservas estratégicas estadounidenses durante la Guerra de Independencia
El actor y cineasta se enfrenta a un emocionante reto en los escenarios. Interpretará a un influyente periodista y adaptará una obra cargada de significado histórico
El productor musical aconsejó a la salsera para que impulse su carrera internacional y reveló que Corazón Serrano participará en su próxima producción tropical
El reconocido productor musical dejó claro que su estadía en el país no es temporal y que está enfocado en su carrera y en nuevos desafíos dentro de la industria nacional
MAR DEL PLATA.- Bajo sus techos abovedados y sobre sus mosaicos y pisos de madera lustrosa de una Belle Époque fundante, se desplazaron desde Alfredo Alcón y Luis Sandrini a Rudolf Nuréyev y Catherine Deneuve; de Jorge Luis Borges y Ernesto Sábato a Alberto Sordi, y de George Bush a Lula Da Silva.El Teatro Auditorium es un espacio referencial de la actividad cultural y social no sólo de esta ciudad, sino de todo el país. Nació un 20 de enero de 1945 y este martes sucederá la celebración formal con una gran experiencia inmersiva y de connotaciones emotivas.Todo comenzará a las 20 con la presencia de autoridades y artistas en la plazoleta Almirante Brown donde se encuentra el acceso principal. Pantallas gigantes montadas especialmente permitirán seguir la ceremonia a quienes no logren conseguir su entrada. Desde performances a propuestas participativas, la celebración permitirá que los espectadores puedan ingresar al "mundo del teatro".Así como este martes se llevará a cabo el gran festejo, el Auditorium -que depende del Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires- celebra sus primeros 80 años de vida con diversas actividades especiales durante el verano que se suman a una cartelera ad hoc que propone 80 espectáculos programados para toda la temporada con tickets que van desde los 8.000 a los 10.000 pesos. Esa oferta incluye los nombres de Graciela Borges, Carola Reyna, Juan Palomino, Claudio Tolcachir, Luciano Cáceres, Rita Cortese, Cristina Banegas, Fabián Vena, Felipe Pigna, "Tata" Cedrón, Nora Cárpena, Mauricio Kartun, Jean Pierre Noher, Ernesto Claudio, Oscar Barney Finn y Patricia Palmer, entre muchos otros intérpretes, autores y directores.Su edificio es todo un símbolo. Ubicado sobre la rambla y "gemelo" al del Gran Hotel Provincial, forma parte indisoluble de la postal marplatense en la bahía de la playa Bristol y con los famosos lobos marinos custodiándolo todo.Nació como un salón de baile de elite anexado al Casino Central, pero, rápidamente, se convirtió en una sala teatral de importantes dimensiones que con el paso de los años fue sumando nuevos espacios hasta convertirse en un gran ámbito de producción multidisciplinaria.Durante enero y febrero, una muestra en su foyer principal, con entrada libre y gratuita, lo celebra. Allí están los ilustres que conformaron su historia y también la "foto de familia" de sus más de doscientos empleados."La historia del teatro es la historia personal de sus trabajadores, del público y de los artistas. En ese juego contamos algunas historias domésticas y también las de los grandes nombres que pasaron por acá", explica Marcelo Marán, quien fuera director del Auditorium - Centro Provincial de las Artes- durante tres gestiones; un teatrista sumamente respetado y reconocido, con una notable trayectoria como dramaturgo y director. En la actualidad, Marán está a cargo de la Dirección Provincial de Artes."Independientemente que es un teatro de la Provincia de Buenos Aires, es un emblema de Mar del Plata; los artistas quieren venir al Auditorium", sostiene con toda razón su actual director Vito Amalfitano, un comunicador muy conocido de la ciudad.Basta ascender los peldaños alfombrados de la escalera imponente que se inicia a metros de la arena para toparse con un gran foyer y el Café Teatral Emilio Alfaro, prólogo a la sala Astor Piazzolla, la vedette de esta casa. Allí, en ese enorme espacio con ventanas que dan a la plaza seca Almirante Brown y desde donde se divisa parte de la ciudad y el océano, se montó la muestra que celebra con textos e imágenes las ocho décadas de existencia del Auditorium."Hay un sentimiento de pertenencia de los empleados, los trabajadores están orgullosos de formar parte de este espacio", explica Amalfitano, mientras que Marán sostiene que "no es solo un teatro, sino un complejo cultural enorme que irradia sobre toda la región".En gran medida es un teatro de producción. Algo así como "el San Martín de Mar del Plata". "Aunque el teatro oficial no da tantos dividendos como el circuito comercial, hay artista que prefieren venir a ofrecer sus espectáculos a esta casa", afirma el director Amalfitano. "A veces, a nosotros nos resulta más fácil que a las salas comerciales contar con artistas encumbrados que desean formar parte de la programación", grafica Marán.El tiempo aquelAsí como nadie que visita Milán se pierde pasar por la famosa sala Alla Scala o el turista que pisa París no evita fotografiarse con la Ópera Garnier de fondo, todo aquel que arriba a Mar del Plata encuentra en el Auditorium no sólo un espacio de creación cultural y grandes propuestas escénicas, sino también una joya arquitectónica digna de admiración. En 1938, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires dio inicio a la construcción del Complejo Edificio Casino Hotel Provincial, los famosos colosos de ladrillos a la vista, piedras y ventanales inmensos que parecen ser simbióticos a la curvatura de la bahía natural que conforma la playa Bristol, la más famosa y popular de la ciudad. Estilo imperial, materiales nobles, dimensiones desmesuradas y elegancia desbordante. Todo acorde a una ciudad que miraba hacia Europa y que buscaba otorgarle esos aires a la nueva rambla que reemplazaría a la de madera, más precaria pero igual de querible.El responsable de la faraónica obra no fue otro que Alejandro Bustillo, el arquitecto que también construyó la casa matriz del Banco Nación en Plaza de Mayo o el Hotel Llao Llao de Bariloche, por sólo citar dos de sus obras más trascendentes."Este teatro posee una mística muy particular que, más allá de lo artístico, también tiene que ver con que se trata de un edificio que forma parte de la postal de Mar del Plata y de la cultura de la ciudad", reafirma Marcelo Marán.A pesar de ser un enclave escénico por excelencia, su primer destino fue otro. El 22 de diciembre de 1939 quedó inaugurado el edificio del Casino Central pero, durante sus primeros años, donde actualmente se encuentra la sala Astor Piazzolla -ex sala Auditorium-, funcionaba el llamado "Dancing", donde se reunían para bailar bajo los acordes de las orquestas de la época lo más granado de la sociedad marplatense y las familias patricias que llegaban a sus mansiones para pasar veranos enteros al refugio de los agobios del calor porteño.A partir de 1944, la Lotería Nacional de Beneficencia y Casino transformó el espacio del "Dancing" en el "Salón Auditorium" para la realización de acontecimientos culturales y con una capacidad multiplicada para aglutinar hasta mil espectadores.El 20 de enero de 1945, finalmente se inauguró el teatro con una temporada de grandes conciertos, con la participación de la Orquesta Filarmónica de la Asociación del Profesorado Orquestal de Buenos Aires, con ochenta maestros dirigidos por Héctor Panizza. También en aquellos tiempos, se ofreció una exitosa temporada de la compañía de arte infantil de muñecos y títeres Piccoli de Podrecca.Con los años, se anexó la sala hoy llamada Roberto J. Payró, a la que se accede desde el "Piso de los Deportes". Luego se sumarían la sala Gregorio Nachman y el Café Teatral Emilio Alfaro. Durante un tiempo funcionó el espacio alternativo La Nave -que se llama así porque allí se montó una muestra de Renata Schussheim que llevaba ese título y logró una trascendencia pregnante- y La Bodega, un acogedor reducto en el subsuelo.En el puerto, la sala Jorge Laureti acerca el Auditorium a otra postal indisoluble de la ciudad. Y, este año, la gran apuesta fue abrir la sala Bristol, que está dentro del Casino Central y que ofrecerá espectáculos de café concert con acceso directo desde el Auditorium.IlustresEl mano a mano de Marcelo Marán y Vito Amalfitano con LA NACIÓN se lleva a cabo en la oficina que ocupa el director del teatro. Rodeada por una finísima "boiserie", esas paredes vieron transitar a ilustres como Jorge Luis Borges."Llegó para un encuentro de escritores del que también participaron Ernesto Sábato y Adolfo Bioy Casares", recuerda Marán. Lo curioso de aquella visita es que al autor de El Aleph hubo que ayudarlo cada vez que necesitó utilizar el toilette anexado al despacho, ya que un escalón "tramposo" ponía en riesgo su estabilidad."También en ese recinto estuvo Catherine Deneuve", rememora Vito Amalfitano y uno no puede más que pensar en las ediciones del Festival Internacional de Cine que se llevaron a cabo en este lugar, algo que sigue aconteciendo antes que termine cada año. La sala Astor Piazzolla -otro marplatense ilustre- es la sede oficial de la competencia internacional del mayor encuentro de cine del país y de Latinoamérica.Geraldine Chaplin, Sophia Loren y Maria Grazia Cucinotta fueron algunas de las celebridades que también pisaron estos mosaicos, así como también lo hicieron Saulo Benavente y los bailarines Rudolf Nuréyev y Julio Bocca.Luis Sandrini, Tato Bores y Adolfo Stray hicieron temporada en estos escenarios. La actriz Eva Franco cedió sus pertenencias para ser lucidas en una muestra permanente. Y próceres del rock nacional como Luis Alberto Spinetta y León Gieco desafiaron la acústica perfecta de la sala principal.El maestro Mariano Mores dio su último concierto aquí, cuando ya había pasado largamente sus 90 años. Mirtha Legrand no se ha perdido estreno y, durante años, cobijó la entrega del Premio Estrella de Mar que reaviva las boleterías en la segunda parte de la temporada.Con actividad durante todo el año, el Centro Provincial de las Artes es sede del Festival de Teatro Independiente de Mar del Plata Guillermo Yanícola y, durante el mes de julio, se ofrece la programación de A desaburrir el invierno, propuesta para las infancias creada por Susana López Merino, quien fuera directora de la casa."Durante el año se realizan actividades que tienen que ver con lo performático, la diversidad y los Derechos Humanos", agrega Marán. Talleres, presentaciones de libros, la Escuela de Espectadores (creada por el académico y maestro Jorge Dubatti) y la Feria de Invierno, que cobija a la producción editorial independiente, son algunas de las propuestas que nutren la programación más allá del verano.En la época en la que Gustavo Giordano lo dirigió, un programa permitía que los niños marplatenses de bajos recursos pudieran conocer el mar, algo que resulta llamativo, pero que refleja la otra cara de una ciudad que también transita sus carencias. También el Auditorium abre sus puertas a las escuelas con programaciones de obras para las infancias y adolescencia y lleva a los barrios algunos títulos para ser montados en diversas instituciones.Las artes plásticas también fueron un puntal. Aquí se montaron muestras de Goya, León Ferrari y Carlos Alonso. Para la celebración de los ochenta años, Nicola Costantino, que fue responsable de la muestra que más público llevó en la historia del espacio, cedió dos de sus obras, mientras que Renata Schussheim también hizo lo propio con material de su acervo.La política también se hizo presente en el Auditorium, ya que fue una de las sedes de la Cumbre de las Américas que se llevó a cabo en 2005 en la ciudad y en la que participaron mandatarios como George Bush y Lula Da Silva. Nunca antes había habido un cerrojo de seguridad tan importante rodeando el edificio.En comunidadHace unos años, un papel incendiado que provino de la Falla Valenciana que se realiza regularmente en la cercana Plaza Colón provocó un principio de incendio en los techos del teatro. El rápido accionar de los bomberos y del entonces director Marán lograron que la cosa no pasase a mayores: "En ese momento se estaba arreglando la cúpula, que se había pintado con brea, con lo cual, si ese papel que voló tocaba el material, se prendía fuego todo el teatro".Mil y un anécdotas recuperan la historia de este ícono emblemático de "La Feliz" con trascendencia nacional y que también ocupa un lugar destacado en la querencia emotiva de los vecinos."En este teatro mucha gente egresó o vio egresar a sus hijos y a muchos otros les entregaron la escritura de sus casas", sostiene Marcelo Marán, mientras que Vito Amalfitano recuerda que "los egresados de la Universidad Nacional de Mar del Plata hacen su graduación acá".La Escuela Municipal de Arte Dramático dispone de los espacios del Auditorium para mostrar su trabajo, lo mismo que la Escuela de Artes Visuales Martín Malharro. "Hay un gran vínculo afectivo de la ciudad con el teatro", finaliza Marcelo Marán.Transitar hoy por la vereda del Auditorium es enfrentarse a la historia viva de Mar del Plata y también a los cientos de artistas que pueblan, durante todo el año, cada uno de sus escenarios. Cumple ochenta años y sigue marcando el pulso cultural de toda una ciudad.80 años del Auditorium, de martes a domingos desde las 16. Ingreso libre y gratuito (Boulevard Marítimo 2280, Mar del Plata)