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Fuente: Infobae
05/09/2024 20:27

El denigrante show de Tomás Angulo y Francis Herrera: las feroces críticas que recibe y las polémicas respuestas de los protagonistas

El psicólogo y la tiktoker se encuentran en el ojo de la tormenta después que Magaly TV La Firme difundiera polémicas imágenes de su show. Magaly Medina tildó al espectáculo de 'asqueroso' y 'vulgar'

Fuente: Infobae
05/09/2024 15:19

Francis Herrera no tolera críticas contra su polémico show con Tomás Angulo y causa revuelo con respuesta subida de tono

La tiktoker se dirigió a quienes critican su espectáculos, el cual viene realizando con el terapista de parejas. El show ha sido calificado de 'horroroso' y 'vulgar' por Magaly Medina

Fuente: La Nación
29/08/2024 02:36

Un mito del Bajo: el restaurante de culto que eligieron Francis Ford Coppola y los Red Hot Chili Peppers

"He visto la interacción entre los clientes y acá se han formado cosas increíbles, de una película a una gestión política, una obra de arte, de todo", cuenta Paulo Orcorchuk, bartender y propietario de Dadá Bistró (San Martín 941). En el Instagram del lugar se leen frases de los fundadores del dadaísmo y se ve a personajes como Francis Ford Coppola, Andrés Calamaro, Santiago Artemis, Leo Sbaraglia, Dolores Fonzi y Cecilia Roth, entre otros. Su clientela cosmopolita y ecléctica es, sobre todo, fiel: siempre regresa a este rincón del bajo porteño donde la bohemia de Buenos Aires se reúne. De artistas a oficinistas; de skaters a bodegueros. Para pedirse un mondongo en la vereda, un choripán en brioche con pepinos encurtidos y dressing de criolla en la barra, o un consagrado lomo Dadá con gratén de papas y mostaza Dijon en alguna de sus contadas mesas. "Hay gente que se baja del ferry o del avión y viene directo a comer el lomo Dadá. Clientes que vinieron hace 14 años y hoy vuelven y me preguntan por el plato. ¡Es el mismo! No cambié ni el proveedor", expresa Paulo, al frente del lugar desde hace 24 años.Todo sucede en un local de pequeñas proporciones que ocupaba una chocolatería hasta que, a fines de los años 90, dos primos y un colega se juntaron para abrir un bar donde, además, organizaban reuniones privadas. Esa voluntad de "tertulia" es lo que Dadá tomó del célebre Cabaret Voltaire de Zúrich, que en sus estrechos diez metros cuadrados fue cuna de la vanguardia europea surgida en 1916. En ese entonces, la ciudad suiza en virtud de su neutralidad amparaba a intelectuales y artistas de distintos países europeos. "Este también es un lugar muy relacionado con pensadores, con la parte intelectual de la política, que empezó a venir, y ahí se armaron muchos vínculos entre ministros, gobernadores, diputados. Viene la primera línea de todos los partidos políticos y lo bueno es que siempre pudieron convivir, de La Cámpora al radicalismo duro y el macrismo, muy cordiales entre ellos", sostiene Paulo.La cultura, por supuesto, también está presente en el ADN de Dadá, que llegó para insertarse en el circuito de una zona que incluía al histórico café Florida Garden y a la Galería del Este, ese recinto que juntó a toda la vanguardia de Buenos Aires: artistas plásticos, músicos, escritores, diseñadores, actores, bailarines, performers... View this post on Instagram A post shared by Dada Bistro (@dadabistro)Como todo bistró, Dadá tiene el toldo francés -original de 1935- y platos del día que amplían la carta con sugerencias como polenta con ragú de ternera, salmón en manteca de salvia con risotto de calabaza, spaghetti alla puttanesca con anchoas y alcaparras. A las 13 en punto empieza el desfile de ejecutivos que buscan un almuerzo decontracté. Desde la mañana ya suena jazz, las lucecitas están encendidas y las copas fajinadas: todo listo para que se abra la primera botella de la cava o se arranque con el cóctel del día.-Paulo, ¿cómo se fundó Dadá?-Nacimos en octubre del '98, y en el 2000 ya entré como propietario, cuando me enteré de que este lugar estaba enclenque: no lo iba a dejar caer. El fundador inicial fue Mario Salcedo junto con otras dos personas, él ya estaba en el bar que estaba en la Galería del Este, donde iba Borges. La movida comienza allí en los '60 y luego se traslada a esta parte, con el Bárbaro Bar. Mario, que venía del mundo de la decoración, también había participado en la construcción del bar Filo. Yo ya estaba en el barrio, vivía acá y sabía lo que estaba sucediendo. En el mètier gastronómico, lo que querés es tener tu propio lugar, así que cuando apareció la oportunidad, lo compré.-¿De qué manera se transformó en un punto de encuentro de la bohemia?-El Bajo de Retiro siempre convocó artistas: Galería del Este, Florida Garden, Filo... Dadá llegó después, cuando el circuito ya estaba generado. Toda esa secuencia de artistas se instaló en estas tres manzanas. La gente relacionada con este ámbito empezó a venir y se formó una comunidad de artistas plásticos en Dadá: Rómulo Macció, Rogelio Polesello, Jorge Frasca, León Ferrari, Felipe Noé. Todo esto fue después del 2000, se fueron congregando acá.-¿Cómo era cuando entraste como bartender propietario?-Dadá se abrió con esta impronta, pero con otra frecuencia gastronómica. Era un reducto pequeño, con poca afluencia; yo ya había trabajado en la barra. Mi carrera de bartender empezó en Filo en el '95, en el '99 me fui a Club Zen. Y ahí me llamaron de acá: vine y generé el vínculo, tanto con los dueños originales como con los empleados. Me fui a trabajar a Europa y allá me enteré de que lo ponían en venta. Trabajando afuera había ahorrado, averigüé los números y me daban. Hice la transacción desde Europa: llegué con la idea de volver a irme, pero me di cuenta de que no quedaba otra que quedarme. View this post on Instagram A post shared by Dada Bistro (@dadabistro)-¿Qué le sumaste al lugar?-Le metí mucha garra en la gastronomía y la coctelería, mucha prolijidad en la gestión, que no la tenía. Cierta cordialidad con los clientes. Con mi llegada hice fuerza con los tragos y los vinos, más un cambio en términos de música, así se afianzaba la noche. Y generé relaciones dentro de Dadá. Entre el público, y entre ellos y yo. Se dio como una sinergia que se nota, vos venís una noche y lo ves.-¿Qué conserva de sus inicios?-La fachada roja está desde que es Dadá, es un tono lápiz labial, que se mezcla con ocre. El toldo es de cuando acá había un Bonafide. Un día me chocan la camioneta, la voy a arreglar a Moreno, y el tallerista ve mi tarjeta de Dadá y me cuenta que él era el antiguo dueño del local, que el toldo era de 1935. Me dice que lo instaló él y me pregunta si está todavía. ¡No lo saco por cábala! En cuanto a la ambientación, el lugar original era casi como ahora, pero con todo más acotado, estructuralmente es el mismo, se fueron agregando cuadros, pizarras, carteles.-¿Cómo definirías la colección de arte que tienen?-Es muy pop, pero hay cierto popurrí. Tengo una obra muy emblemática que es de Ricardo Cinalli, que es un David invertido. También una muy linda de Rogelio Polesello que tiene una historia muy particular, porque Polo, como le decíamos todos, venía seguido, en grupetes de amigos. Teníamos una muy hermosa de Rómulo Macció, que era un gran artista y un tipo muy cabrón, de ir al borde de la pelea, arrancaba muy temprano a tomar Martini, así que se ponía provocador. Me había hecho una obra hermosa sobre la fachada de Dadá, pero un día se levantó, la descolgó y se fue caminando con ella bajo el brazo: la regaló con mucho amor y con mucha bronca se la llevó.-La música también está presente.-Tengo la foto de Miles Davis, que es mi preferido, y la de Nina Simone. La música es jazz hasta las seis de la tarde, después funk de los '80 y bossa. Me gustan mucho María Bethânia, Caetanoâ?¦ Me parece un género amoroso el que hacen: hay una poesía, es un idioma riquísimo. Fito viene seguido porque vive cerca, frente a la plaza. También Fernando Ruiz Díaz, líder de Catupecu Machu, Julieta Venegas. Y gente relacionada con la danza: de Mora Godoy a Paloma Herrera, Iñaki Urlezaga. Joaquín Cortés pasó una gran noche acá, se quedó zapateando hasta las siete de la mañana. Además vinieron muchas bandas internacionales: Oasis, Talking Heads.-Y los Red Hot Chili Peppers.-Sí, me llama una clienta y me dice: "Estoy yendo con una banda importante". Me imaginé a los Babasónicos, que siempre vienen. Cuando veo a Anthony Kiedis bajarse de la van me temblaron las piernas. Lo escucho desde que tengo uso de razón y una noche lo veo entrando a mi restaurante. Él no come carne, solo pescado, así que se pidió una trucha. Tampoco toma alcohol, solo agua. Me pidieron que no sacáramos fotos. Tampoco quiso que lo invitara. Pagó con su tarjeta de crédito, me quedé con el voucher con su nombre.-¿Alguna otra visita icónica?-Francis Ford Coppola, que vino recomendado por su socio, que tiene una bodega en Napa. Vino con su traductora y la tarjetita de Dadá. Después volvió al mes, tras filmar una peli que estaban haciendo acá, comieron un lomo y una ensalada, tomaron un rosado patagónico de Pinot Noir. Charlamos, pero tampoco me dejó invitarlo.-¿Por qué siguen vigentes?-Eso es de lo más increíble que pasa en Dadá: cada generación le pasa la posta a la siguiente. Ruth Benzacar venía muy seguido, luego su hija, y ahora sus nietos, Paloma y Nico. La nieta de Soldi o de León; Gimena y Agustina Macri. Lo viven como una historia, porque sus antecesores se lo contaron: ellos vienen a rememorar eso y el momento que vivieron acá sus familiares. Lo importante también es que vienen los nuevos artistas, que son emergentes y empiezan a venir de muy chicos. Allí se crea el mito: los que tienen ganas de ser grandes en el arte, por cábala o por lo que sea, tienen que venir.-¿Y Dadá que aporta al circuito?-Sensación de club, esa pertenencia que en otros lugares de Buenos Aires dejó de existir. Ese espíritu creo se vive más de noche, cuando todo es más efervescente. Siempre me quedo con una frase del chef Fernando Trocca: Dadá es inoxidable.

Fuente: Infobae
30/07/2024 02:25

Murió Francis, el gato de 14 años que nunca creció

El gato se hizo famoso por tener 14 años y contar con una apariencia que lo hacía lucir como un cachorro debido a un déficit de la hormona del crecimiento

Fuente: Infobae
27/07/2024 15:09

Polémica con Francis Ford Coppola: se filtró un video en el que besa a actrices de "Megalópolis"

El director de "El padrino" tardó 40 años en producir la película, pero su cuestionable actitud durante el rodaje ha empeñado las noticias en torno al proyecto

Fuente: La Nación
27/07/2024 03:00

Francis Ford Coppola: aparecieron videos que muestran al director besando a mujeres del equipo durante el rodaje de Megalópolis

En la última edición del Festival de Cine de Cannes, que se llevó a cabo en mayo, se estrenó mundialmente Megalópolis, la nueva película de Francis Ford Coppola. Sin embargo, el nombre del reconocido director comenzó a estar en boca de todos cuando se filtró la información de que el realizador había sido protagonista de "comportamientos inapropiados" con algunas de las mujeres del equipo durante la filmación. Este jueves, el tema volvió a las primeras planas de los principales medios estadounidenses cuando salieron a la luz dos videos que parecen corroborar aquella versión.La información, en principio, fue publicada por The Guardian. Aquel periódico británico indicó que testigos presenciales informaron la cuestionable escena, que transcurrió mientras filmaban en un club nocturno. "Entró al set y trató de besar a algunas de las extras femeninas que estaban en topless o escasamente vestidas", indicaron. Las mismas fuentes indicaron que el director de 85 es de la "vieja escuela" a la hora de tratar a las mujeres del elenco y del equipo de producción, y que en varias ocasiones las "empujó" para que se sentaran en su regazo.Si bien ella insistió siempre en que Coppola fue muy respetuoso con ella durante la filmación de Tetro, que se realizó en Buenos Aires, la actriz argentina Leticia Brédice contó en más de una ocasión que el director solía pedirle que se sentara sobre sus piernas. "Coppola con nosotras fue hiperrespetuoso, yo me sentaba arriba de él y decía 'esto es un honor'. Estaba enamoradísimo de mí. Muy enamorado. Yo llegaba a filmar y me decía 'vení' en italiano. ¿Te parece que le voy a decir 'no voy ahí'? ¡Yo me volvía loca! Hay personalidades que son gurús del espectáculo, que son solamente para aprender. Coppola nos disfrutó un montón. Y siempre fue respetuoso", le contó la actriz a Intrusos, en febrero de 2018.Lo cierto es que, más allá de esa extraña costumbre del realizador corroborada por la protagonista de Plata quemada y Caballos salvajes, este viernes Variety dio a conocer dos videos de la escena que despertó la polémica. La escena en cuestión, en la que aparece, Aubrey Plaza (The White Lotus) Nathalie Emmanuel (House Of Thrones) fue filmada el 14 de febrero, el Día de los Enamorados, de 2023, en una sala de conciertos de Atlanta, Georgia.Las fuentes afirman que el comportamiento de Coppola en aquel momento fue, al menos, "poco profesional". Según informó el medio, los extras presentes interpretaban a asistentes a una fiesta. "Algunas de las mujeres estaban en topless y otras escasamente vestidas", indica el medio, y señala que en total había entre 150 y 200 personas participando de aquella instancia del rodaje.Según indicaron dos personas que estuvieron presentes, "mientras dirigía, Coppola saltaba constantemente para besar y abrazar a varias mujeres, a menudo insertándose sin darse cuenta en la toma y arruinándola". Tras varias tomas fallidas, el realizador supuestamente tomó un micrófono y anunció a todos en la sala: "Lo siento, si me acerco a ustedes y las beso, sepan que es únicamente para mi placer".Una vez que se dieron a conocer los videos, que muestran al realizador acercándose a una joven que intenta mantener distancia, fueron varios los medios que se comunicaron con su representante para conocer la versión de Coppola sobre los hechos, pero no encontraron respuesta. Antes de que se hicieran públicas las imágenes, sin embargo, el realizador de El padrino y Apocalipsis Now, negó las acusaciones en una entrevista publicada en febrero por el New York Times. Cuando se le preguntó sobre los rumores que soslayaban su comportamiento durante aquella jornada de filmación en Atlanta, él respondió: "No es muy posible que haya pasado porque soy demasiado tímido".Mientras tanto, el coproductor ejecutivo Darren Demetre intentó defender al cineasta en una declaración en la que incluso admitió el contacto físico. "Hubo dos días en los que filmamos una escena de celebración al estilo Studio 54 en un club, donde Francis caminó por el set para establecer el espíritu de la escena dando amables abrazos y besos en la mejilla al elenco y a los actores de fondo", afirmó. Y agregó: "Su intención fue inspirarlos y establecer la atmósfera del club, que era tan importante para la película". Demetre añadió que "nunca tuvo conocimiento de ninguna queja de acoso o mala conducta durante el transcurso del proyecto".El informe de The Guardian citó otras conductas supuestamente poco profesionales en el set por parte de Francis, quien financió él mismo todo el proyecto de 120 millones de dólares. En tanto, una fuente confirmó a Variety que los miembros del equipo se miraron incómodos cuando Coppola besó y abrazó a los extras, pero que nadie se opuso públicamente ni intentó intervenir. "Como Coppola lo financió, no había un departamento de recursos humanos que se encargara de mantener las cosas bajo control", explicó una segunda fuente. "¿Con quién se suponía que debían hablar? ¿Quejarse con Coppola y denunciar a Coppola ante sí mismo?", ironizó.Ninguno de los dos coordinadores de intimidad que trabajaron en la película estaba en el set el día de la escena del club nocturno, y uno de ellos le dijo a The Guardian: "Realmente no puedo explicar el motivo por el que no estuvimos presentes". En los días posteriores a la escena en cuestión, una fuente de producción dijo que los miembros principales del equipo se preocuparon porque los videos del director dando besos sin consentimiento ya estaban circulando, por lo que recordaron a todos que sus acuerdos de confidencialidad establecían que no debían compartir imágenes de lo que ocurre detrás de cámara.

Fuente: La Nación
09/07/2024 06:36

¿Quieres ser John Malkovich?: la mano de Francis Ford Coppola, un actor harto del romanticismo y la resistencia a Tom Cruise

Durante años, ¿Quieres ser John Malkovich? descansó en los cajones de varios realizadores cinematográficos. La historia, una pieza filosófica o un extraño texto de ciencia ficción, era un delirio, y llevarla a la pantalla grande parecía prácticamente imposible. El proyecto, además, llevaba la firma de un guionista de televisión desconocido, sin grandes títulos en su currículum y una pretensión innegociable: John Malkovich tenía que interpretar a John Malkovich. ¿Cómo llegó ese guion a convertirse en uno de los estrenos más celebrados de 1999 que marcó el exitoso debut en cine no solo de su guionista sino también de su director?En ¿Quieres ser John Malkovich?, el escritor Charlie Kaufman cuenta la historia de Craig Schwartz (John Cusack), un titiritero sin trabajo ni autoestima que está casado con Lotte (Cameron Diaz) -una mujer obsesionada con su chimpancé- y que encuentra trabajo como archivador en el piso siete y medio de un edificio de oficinas de Nueva York. En ese diminuto espacio no solo se enamora de Maxine Lund (Catherine Keener), su sexy y manipuladora compañera de trabajo, sino que, además, descubre un portal que va directo a la mente de Malkovich.Trailer de ¿Quieres ser John Malkovich? - Fuente: YouTubeQuien logró poner en imágenes las ideas de Kaufman fue Spike Jonze, y el film vio la luz a fines de 1999 gracias a la productora de videoclips y películas Propaganda Films junto a Gramercy Pictures. La encargada de distribuirla fue Universal Pictures. La recaudación fue mucho más abultada de lo que se esperaba: superó los 23 millones de dólares. Además, fue elegida por la National Society of Film Critics de los Estados Unidos como la mejor película del año, obtuvo tres nominaciones a los Oscar y se alzó con un Bafta al mejor guion original y dos Independent Spirit Awards a mejor ópera prima y mejor guion de ópera prima.Una idea para pasar el tiempoCharlie Kaufman era neoyorkino más del montón en 1994 cuando escribió el film que luego se convirtió en un clásico de los 90. Tenía 35 años y un recuerdo agridulce del secundario. Ni siquiera era bueno en su trabajo: había conseguido un lugar en el equipo creativo de una sitcom y durante seis semanas no abrió la boca en la sala de guionistas. No le salían las palabras, confió en una columna que publicó en The Guardian. Para superar el bloqueo y esperar la siguiente temporada de contrataciones, decidió escribir su propia historia."Mi idea era escribir un guion y utilizarlo para conseguir trabajo", explicó, y contó que combinó dos ideas que por separado no iban a funcionar: alguien que encuentra un portal en la cabeza de otra persona y alguien que tiene una aventura con un compañero de trabajo. "Tuve una respuesta muy positiva. Empecé a hacerme un poco conocido. La gente lo leía y me decía lo divertido que era, me invitaban a reuniones, me decían que nadie haría la película nunca", repasó.El proyecto de Kaufman no era simple de realizar: si bien había elegido el nombre del texto solo porque le gustaba cómo sonaba "John Malkovich" y no por alguna otra razón filosófica o actoral, solo iba a aceptar convertir su historia en film si del proyecto participaba el mismísimo artista. Pero no lo conocía. Luego de más de una docena de encuentros fallidos con distintas productoras, el escritor perdió las esperanzas. Hasta que apareció en escena Francis Ford Coppola.El factor Coppola y la figurita difícilLa puntada que unió las vidas de Kaufman y el hombre que finalmente llevó su historia a la pantalla grande la dio Francis Ford Coppola en 1996: MTV estaba en su apogeo y Jonze era el hombre del momento gracias a los clips que había dirigido para los Beastie Boys, Björk, Fatboy Slim y R.E.M., entre otros tantos artistas. Además, había conquistado el corazón de Sofia Coppola, con quien pronto se casaría. Según una nota que publicó la revista Icon, de El País, el texto de Kaufman llegó a manos del artífice de El Padrino y Apocalipsis Now y fue el consagrado director quien pensó que la mente perfecta para ponerle imágenes era su futuro yerno, y le entregó el texto.El gesto de Coppola logró unir a un ignoto escritor con un joven dispuesto al experimento y a un arriesgado director de cortos con el texto perfecto para desembarcar en el cine. Y no se agotó ahí: todavía era necesario lograr que John Malkovich interpretara a John Malkovich. "Nunca fue nadie más, aunque tuvimos mucha presión de nuestros productores y financieros para que pensáramos en sustitutos", explicó el director sobre la necesidad de convencer al actor en una charla que dio en el Festival de Cine de Toronto en 2013. Ninguno de los dos conocía a Malkovich de forma personal. Fue, de nuevo. Coppola, quien ofició de puente: un día de diciembre de 1997 lo llamó a su casa de Francia y le pidió que fuera a París para reunirse con Jonze."Es curioso, me llevó mucho tiempo conocerlo y, cuando finalmente lo conseguí, su primera pregunta fue: '¿Por qué John Malkovich? ¿Por qué no Quieres ser Tom Cruise?'. Era la misma pregunta que nos habían hecho nuestros financieros. De hecho, su primera reacción cuando leyó el guion fue preguntarse si le había hecho daño a Charlie en el pasado, si se había acostado con la esposa de Charlie o algo así", recordó sobre aquel encuentro Jonze."Nunca pensé que alguien fuera lo suficientemente tonto como para filmar ese guion, pero no conocía a Spike", le dijo dos años después Malkovich a la edición estadounidense de la revista Rolling Stone. "Cuando me pidieron que lo hiciera, estaba un poco preocupado. No por el tono o el contenido, sino por la sensación de que, si hacés una película en la que tu nombre no está encima del título sino en el título, entonces puedes tener algunas tendencias narcisistas serias que requerirían atención", analizó. El actor primero se negó de forma rotunda. Luego ofreció financiarla y hacerla con Tom Cruise. Al final, cedió.En busca del desafío perfectoLa forma en la que el papel de Craig Schwartz llegó a manos de John Cusack también fue atípica. Lejos de presentarse a un casting, quedar en el radar de un director o elegir entre una decena de proyectos, el actor, que venía de protagonizar una seguidilla de comedias románticas, pidió en la agencia de Los Ángeles que lo representaba que le encontraran el "guion más raro e impredecible" que pudieran. Así lo contó él mismo en una extensa nota que le concedió la revista GQ."Todos ustedes tienen una caja negra o un libro rojo o lo que sea que sean esas cosas donde están los guiones que nunca se pueden hacer", recordó Cusack que dijo en la agencia. "Me refiero al guion más imposible de producir que tienen. Quiero saber cuál es su joya de kriptonita para la comercialización", insistió, cuando le ofrecieron algo que no colmó sus expectativas. "'¿Te refieres a ¿Quieres John Malkovich?', me dijeron. Así encontré el guion", continuó. Luego de leer el texto, Cusack quedó fascinado. "Como Indiana Jones, lo encontré, fui a la jungla y encontré este raro tesoro", recordó. "Fue muy divertido hacer esa película, muy divertido", aseguró sobre la experiencia.Un mundo lúgubre y pequeñoEl rodaje comenzó en el triste sótano en donde Craig Schwartz daba vida a sus marionetas. La idea de llevar el realismo al extremo que lograron en esa escena con la única luz de un foco doméstico se extendió durante toda la producción. Con el mismo norte, Spike Jonze mandó a construir el decorado a medida de la oficina de LesterCorp a la que el titiritero va en busca de trabajo y que está ubicada en el piso 7 y medio de un rascacielos de Manhattan. No tenía más de un metro y medio de altura. "Fue como estar en una casa de la risa de Wonka todo el tiempo. También recuerdo que teníamos un quiropráctico en el set porque, al final del día, todos estaban torcidos", recordó Cusack.Además de crear decorados especiales, la producción puso especial atención en la caracterización de los personajes. El caso de Cameron Diaz, quien sorprendió al público y a la crítica con un aspecto completamente desaliñado y una desconocida faceta dramática, dejó en evidencia que el objetivo se cumplió a la perfección. En una entrevista que le concedió a Cranky Critic, la actriz reflexionó: "No me di cuenta de que la gente no me iba a reconocer hasta que me vestí de Lotte y me quedé hablando con la gente que trabajaba en la producción. Simplemente asumí que sabían que era yo, pero pensaron que era una extraña".

Fuente: Infobae
24/06/2024 12:14

Francis Rossi, líder de Status Quo, reflexionó sobre el futuro de la banda: "No creo que volvamos a tocar"

La agrupación ya había intentado separarse desde los 80â?²s, pero ahora con la muerte de dos miembros fundadores, el final parece inminente

Fuente: La Nación
23/06/2024 00:36

Los Coleman, la familia que cumple 20 años en cartel, enamoró a Viggo Mortensen y a Francis Ford Coppola y es un fenómeno del teatro argentino

Sigmund Freud aportó su mirada psicoanalítica sobre la estructura que conforma la célula social llamada familia, donde describió tensiones, pulsiones y posibilidades, pensando en ese microuniverso como un reservorio que espeja lo macro de la sociedad. Podría pensarse que el famoso "padre del psicoanálisis" se hubiese hecho un festín al presenciar alguna de las 2159 funciones que lleva La omisión de la familia Coleman, desde su estreno en agosto de 2005."Es la tercera vez que la voy a ver", dice a LA NACION una señora de cabello entrecano, que forma la fila para ingresar a la función. A unos metros, dos adolescentes reconocían que habían llegado hasta allí impulsados por una docente de literatura del colegio al que asisten, en Parque Patricios. Acaso esa conjunción de espectadores, de rangos etarios tan amplios, explique parte de este inusual derrotero escénico.Claudio Tolcachir, autor y director de la pieza, entiende que el material va en busca de algunas líneas de pensamiento en torno a "cómo funciona en nosotros la desesperación, la inmadurez y el egoísmo", trascendiendo entenderla como "una obra que habla sobre la disfuncionalidad familiar", más allá que esas desavenencias insoslayables conforman un cierto estuche dentro de su narrativa.La propuesta, todo un fenómeno del teatro nacional, sigue presentándose los viernes en la sala Timbre 4 del barrio de Boedo, a la vuelta del histórico departamento PH donde nació, que no era otra cosa que el domicilio de Tolcachir."Los Coleman", como suele sintetizarse el título del material, es un extraño suceso que lleva 20 temporadas en cartel en Buenos Aires y ya recorrió buena parte del mundo, merecida performance por la profundidad de su texto y la envergadura actoral de sus intérpretes. "Aparentemente habla de una familia, pero no, se refiere a otras cosas; es como un buen Caballo de Troya para hablar de sistemas sociales y vinculares que atraviesan el tiempo y las culturas, lo cual hace que el público se sienta reconocido", remarca el director.Hace dos décadas, el dramaturgo encontró una forma de abordaje de quiebre, que luego fue replicada por otros materiales que también buscaron llevar a escena la naturalización del absurdo, lo cotidiano de la violencia y los silencios en torno a verdades. Un grotesco que retoma, en los modos contemporáneos, algo de aquel clasicismo insurrecto de Armando Discépolo. View this post on Instagram A post shared by Familia Coleman (@omision_de_la_familia_coleman)El origen"Los comienzos significaron una enorme incertidumbre y excitación. Recuerdo cuando fui convocando a cada actor para contarle que quería escribir una obra, algo que nunca había hecho. Era una gran responsabilidad llamar a los actores amigos para embarcarse en algo tan incierto", confiesa Claudio Tolcachir, quien agrega que "los personajes fueron pensados para cada actor que lo estrenó".Su metodología de escritura dramática fue personal. "A veces los engañaba y les decía 'vos solo sabés esto', pero en realidad había otro personaje que también manejaba esa información. Fue como crear una familia a la que yo podía conocer. En esas improvisaciones no había mucho de lo que después se vio, pero sí sus voces y su manera de pensar, la cadencia del hablar", remarca el director, quien actualmente también tiene en cartel Mejor no decirlo, la pieza con Imanol Arias y Mercedes Morán.En "los Coleman", lo no dicho también es la vedette. "Habla de temas universales. Es un clásico que mueve, moviliza", afirma Miriam Odorico, una de las protagonistas históricas y quien personifica a Memé. "Durante las primeras épocas, había grupos de psicoanalistas que venían a ver la obra, se llevaban el volante de difusión y, mientras atendían a sus pacientes, iban señalando a cada personaje; creo que Claudio supo interpretar los roles en un mecanismo de familia", dice Inda Lavalle, actriz que llegó al proyecto hace 20 años y cuyo personaje lleva su segundo nombre y su apellido materno reales, Verónica Zanelli.La aventura comenzó en esa sala minúscula de la Avenida Boedo, a la que para ingresar había que atravesar un largo pasillo y hacer silencio, porque el propietario del departamento 3 se molestaba con el teatro que había montado Tolcachir en el living de su casa. El vecino falleció, ese PH sigue siendo un espacio de aventuras escénicas y Timbre 4 se expandió con una segunda sala en un enorme predio sobre la calle México."Todos los años hay gente que cumple 17 o 18 y comienza a ir al teatro 'de adultos'. Mientras eso suceda, siempre tendremos público, porque es una gran propuesta para ser primera obra", reflexiona Jonathan Zak, licenciado en administración de empresas, quien ingresó a la compañía seis meses después de la primera función, cumple el rol de productor e hizo algunos reemplazos en escena. La tarea fundacional en torno a la creación de nuevos públicos es un aspecto que refuerza el valor del material.En númerosDe las 2159 funciones realizadas hasta hoy, 384 se desarrollaron en escenarios de 24 países diferentes. Además, La omisión de la familia Coleman fue subtitulada en ocho idiomas, participó en 54 festivales internacionales y recibió, en Argentina y en el exterior, 12 premios. 305.817 espectadores ya aplaudieron el material, una cifra muy alta para una propuesta de producción independiente y dinámica cooperativa.Más allá de Timbre 4, en Buenos Aires fue albergada por espacios del mainstream teatral, como las salas del Metropolitan y del Paseo La Plaza. Además, la pieza recorrió teatros de Uruguay, Brasil, Chile, Bolivia, México, El Salvador, Panamá, Costa Rica, Colombia, los Estados Unidos, Canadá, Italia, España, Portugal, Irlanda, China y Sarajevo. Este itinerario hizo que varios de sus intérpretes vivieran sus vuelos de bautismo y visitaran Europa por primera vez. Eso también implica pertenecer a "los Coleman". View this post on Instagram A post shared by Familia Coleman (@omision_de_la_familia_coleman)Indudablemente, la internacionalidad de la obra sorprende. A pesar que el material puede ser leído como una exhaustiva pintura con ciertos guiños de la idiosincrasia local, lo cierto es que hay tópicos universales que entran en juego y permiten una lectura amplia más allá de los límites del mapeo geográfico."Las situaciones son graciosas hasta que te va cayendo la ficha de un montón de cosas que tienen que ver con la relación entre hermanos, una madre corrida de su lugar, el espacio de la abuela; la obra refleja a cada espectador en su propia realidad", afirma Jorge Castaño, otro integrante de la primera hora que siempre interpretó el personaje del médico. "Llevo tantos años haciéndolo, que creo que ya me recibí", ironiza el actor.Así como Castaño ingresó al proyecto desde el vamos, la semana pasada se sumó Matías Marshall, el nuevo asistente de este espectáculo cuyo staff se encuentra en movimiento permanente.Si de incorporaciones se trata, la historia de Juan Zuluaga Bolívar y su vínculo con la obra es bien particular. El actor -nacido en Colombia- la vio en una de las funciones realizadas en la gira por Bogotá y quedó cautivado por la propuesta: "Me enamoré de Timbre 4, así que me vine a la Argentina a estudiar en este espacio maravilloso". Finalmente, las vueltas del destino lo llevaron a interpretar a Damián durante algunas presentaciones.También Adriana Ferrer se subió al barco para cumplir el rol de Memé: "Es muy difícil hacer un reemplazo. Miriam (Odorico) me acompañaba en los movimientos para que los aprendiera y, cuando hice mi primera función, el elenco me iba llevando por el espacio". Tanto Zuluaga Bolívar como Ferrer movieron los muebles de sus livings particulares para simular la puesta de Tolcachir y, viendo un video del material, lograron ir ensayando en la intimidad de sus casas. De eso también se trata.Natalia Villar reemplaza, desde el año pasado, a Tamara Kiper, otra de las actrices históricas. Su rol no es menor dentro del caos familiar. "Mi personaje aporta la voz más lógica, busca organizar el desorden, pero, por momentos, también desea que todo estalle. Es la que sabe pedir ayuda al que llega de afuera, está alerta a lo que está mal en su familia, pero no puede con eso".Fernando Sala, quien se integró a la compañía en 2012, le da vida a Marito, el personaje que, a simple vista, expone una disfuncionalidad, aunque enarbola su verdad en medio de un contexto también enfermo: "Claudio (Tolcachir) no le quiso asignar una patología específica, pero es evidente que la tiene. Desde esa impunidad, es quien dice las cosas sin filtros; pone en palabras lo que los otros no pueden o no ven. Y también lo que sienten los espectadores".En tantos años, la vida fue fluyendo a medida que "los Coleman" seguían dejando su huella escénica. Hubo noviazgos, divorcios, hijos que llegaron, actrices que fallecieron. "Cuando debutamos, yo no tenía canas", dice -entre risas- Gonzalo Ruiz, quien también forma parte del equipo desde 2005, cuando se puso en la piel de Hernán, "el remisero". Desde 2019, interpreta a Damián, uno de los hermanos gemelos, pero, en agosto, volverá a calzarse el traje de su personaje primigenio. La pieza está viva, los roles se intercalan. "Las giras nos fueron renovando las ganas de seguir haciéndola y que nada se automatice", reconoce.Espectadores ilustresEn 20 años, la obra fue vista por los más diversos públicos, incluidos algunos nombres famosos. En Madrid, la actriz Marisa Paredes no consiguió butaca y, para no perderse la función, se sentó en la escalera de la platea. En esa misma ciudad, Viggo Mortensen aplaudió de pie.A poco de estrenarse, aún cuando se presentaba en el living de la casa de Tolcachir, el director Francis Ford Coppola presenció una función y, antes de retirarse, le pidió al elenco que le firmara el libro editado con el texto de la obra.Norma Aleandro, Marcelo Tinelli, Graciela Borges, Juan José Campanella, Lucrecia Martel, Graciela Alfano y Mauricio Macri -cuando era el jefe de gobierno porteño- fueron algunos de los nombres famosos que no se perdieron la propuesta. Curiosamente, Mirtha Legrand, una teatrera que no se pierde estreno, aún no fue de la partida. "Hay que invitarla", sostienen los actores que forman parte del elenco actual, mientras se saludan con los que alguna vez pasaron por el staff.Todos están listos para la producción fotográfica con LA NACION y cumplir con el ritual del café previo a la función. Luego de los aplausos finales, llegará la segunda parte del protocolo: todos se quedarán a cenar, como lo hacen cada noche. View this post on Instagram A post shared by Familia Coleman (@omision_de_la_familia_coleman)AnecdotarioCon un cuaderno de bitácora implícito, actores y actrices tienen mucho para contar sobre todo aquello inusual que ha sucedido en torno al espectáculo. Hace 20 años, cuando terminó el ensayo general para actores amigos, la actriz Silvina Bosco le dijo a Claudio Tolcachir: "Me encantó, pero me voy rápido porque rompí bolsa hace un rato, pero no quería interrumpir"."Cuando fuimos a Sarajevo, ya había pasado el conflicto bélico, pero se veían las consecuencias, la destrucción. Seguramente por esa razón, en la función había un clima de algarabía, la gente entraba y salía mientras actuábamos, todo era felicidad luego de años muy duros", confiesa Gonzalo Ruiz.Jorge Castaño recuerda que "en una de las primeras temporadas, la asistente cortó la función porque había un hombre que se sentía mal. El público salió de la sala y se acostó al señor en la cama de la escenografía. El SAME llegó muy rápido, pero lo curioso fue que yo, que estaba con mi vestuario de médico, no podía salir del camarín porque le iba a generar al hombre la expectativa falsa que ya había llegado la ambulancia para socorrerlo".Para cumplir con la gira por China volaron durante tres días de viaje, casi el mismo tiempo que permanecieron en el país de destino. En el vuelo festejaron el cumpleaños de Miriam Odorico y fue tal el revuelo que los demás pasajeros los hicieron callar.Así como en Shanghái se encontraron con el público más extrañado por la propuesta debido al distanciamiento cultural, en Dublín, luego de la función, un espectador le preguntó a Claudio Tolcachir si se trataba de una familia irlandesa."La obra le dio una apertura a Timbre 4 en el mundo", entiende el productor Zak acertadamente. Así como el staff porteño cumplió con un rumbo de miles de kilómetros, también hubo elencos locales en algunas provincias argentinas y en Barcelona, ciudad donde Claudio Tolcachir dirigió a los actores catalanes. View this post on Instagram A post shared by Familia Coleman (@omision_de_la_familia_coleman)Cuando "los Coleman" argentinos visitaron algunos pueblos de España, dedicaban gran parte del día a recorrer las calles para invitar personalmente a los espectadores. Ese vínculo iniciático hizo que, en una de las funciones, cuando Miriam Odorico salió a escena, una señora le gritara "Miriam, Miriam: ¡vinimos!".Una de las particularidades de la fenomenología de la pieza es que los actores originales fueron creciendo, pero, desde ya, sus criaturas de ficción se mantuvieron en la edad que marca el libro escrito hace más de dos décadas. De hecho, el guion remarca que la hija de la familia cuenta con 17 años, pero la actriz que la interpreta ya cumplió los 47, aunque tal situación no genera ruidos en la credibilidad del relato. Algo similar sucede en la obra Brujas, que lleva 34 años en cartel y conserva gran parte de su elenco original.Palabras mayoresCristina Maresca interpreta, desde hace 10 años, a Leonarda Coleman, la abuela de la familia. "Me cuidan y me protegen porque soy la más viejecita", señala la actriz que derrocha simpatía y energía a la par que sus compañeros más jóvenes. "Mi personaje es la columna vertebral de la familia y genera mucha identificación en la gente mayor que viene a ver la obra", argumenta con razón.El rol de esa figura también despierta incomodidad y genera el planteo en torno al rol de los adultos mayores en el ecosistema social. "En un restaurante, luego de la función, una señora me encaró y me dijo: '¿De qué se ríe la gente?'". En igual sintonía se expresa su compañero José Frezzini: "La gente sostiene la risa hasta el final, aunque, por momentos, no hay nada de qué reírse".Cristina Maresca es la cuarta actriz que interpreta ese personaje. Antes lo hicieron Ellen Wolf, Araceli Dvoskin (ambas ya fallecidas) y Silvia Daurat.Minutos antes del comienzo de cada función, un engranaje perfecto se pone en marcha. Mientras LA NACION va cumpliendo con el registro fotográfico, cada actor aporta su organicidad al servicio del montaje. Cada cual hace lo suyo, en un mecanismo de relojería que lleva 20 años de funcionamiento perfecto. Mucho de esa intimidad se plasmará en un documental que está generando la productora audiovisual Les Mandingues.Las localidades de La omisión de la familia Coleman se agotan rápidamente. El público sigue haciendo ebullición ante la propuesta que los actores continúan ensayando cuando sienten que algo se "automatiza". Si el director se encuentra en Buenos Aires -dado que transcurre gran parte del año atendiendo la sede de Timbre 4 en España- también se encarga de hacer indicaciones y marcar el paso para que la cotidianeidad no "embarre" la cancha, para que no desvirtúe la idea matriz.Para agendarLa omisión de la familia Coleman. Viernes a las 21.45 en Timbre 4 (México 3554, CABA)

Fuente: Infobae
20/06/2024 18:58

César Acuña pide a Francis Allison postular a la alcaldía de Lima

El actual burgomaestre de Magdalena señaló sentirse capacitado para asumir el sillón municipal, pero aclaró que su candidatura debe pasar por una elección interna

Fuente: La Nación
07/06/2024 03:18

Francis Ford Coppola respondió a las acusaciones por comportamiento inapropiado con algunas mujeres, en el rodaje de Megalópolis

Durante la última edición del Festival de Cannes, el director Francis Ford Coppola fue uno de los mayores protagonistas. El responsable de Apocalipsis Now! presentó su último film, Megalópolis, pero también estuvo en el centro de un sonado escándalo, cuando en un artículo publicado en The Guardian, dos extras lo acusaban de comportamiento inapropiado en el rodaje de la fiesta inicial de la película. Y en una reciente entrevista, Coppola se refirió a estas denuncias y a la actitud que tiene con las mujeres.En el marco de una nota publicada en The New York Times, Coppola fue consultado sobre dichas acusaciones, y aseguró: "No soy toquetón. Soy demasiado tímido". Al momento de detallar sobre cómo se relaciona con las mujeres que lo rodean, el director recordó a su madre, Italia Coppola, y detalló: "Ella me dijo que si yo avanzaba sobre una mujer, eso significaba que no la respetaba. Y a las mujeres de las que me enamoré, ciertamente jamás les falté el respeto". Según el artículo publicado, Coppola había forzado a distintas mujeres "a sentarse en su regazo", e incluso había intentado "besar a varias que trabajaban como extras".Oportunamente, y luego del artículo que hacía mención a ese presunto comportamiento por parte del cineasta, el productor de Megalópolis, Darren Demetre, escribió un comunicado en el que detalló: "Jamás fui puesto al tanto sobre alguna queja de acoso o conducta inapropiada durante el transcurso del proyecto. Francis produjo y dirigió un film independiente enorme, tomando muchas decisiones difíciles con el fin de terminar su producto a tiempo y dentro del presupuesto, manteniéndose fiel a su visión creativa. Hubo dos días en los que filmamos una secuencia en un boliche, en donde Francis recorrió el set y estableció el espíritu de la escena dando gentiles abrazos y saludos al elenco y al personal detrás de cámara. Esa fue su manera de ayudar a establecer la atmósfera de ese local bailable, que era tan importante en el marco del film".El ambicioso proyecto Megalópolis"Megalópolis siempre estuvo dedicada a mi querida esposa Eleanor. Realmente esperaba celebrar juntos su cumpleaños, este 4 de mayo. Pero lamentablemente no pudo ser, así que permítanme compartir con todos un regalo en su nombre", escribió el realizador en su cuenta oficial de Instagram, desde la cual hizo la presentación. Eleanor Coppola falleció el 12 de abril pasado.En las primera imágenes de Megalópolis que fueron de dominio publico, la secuencia empezaba cuando el protagonista del largometraje, con mucho cuidado abría la puerta de la cúpula de un edificio -que semeja el célebre Chrysler Building de Manhattan- y caminaba lentamente hacia el borde del extenso balcón ubicado en el punto más alto de la construcción. Cuando parece a punto de saltar se escucha el grito de una voz poderosa que brama: "¡Tiempo, detente!". Todo se detiene a partir de esa orden, empezando por el cuerpo suspendido en el aire del personaje y es el propio actor, cuya angustia se refleja en su rostro (capturado por la cámara de Coppola en primerísimos planos), quien en ese momento vacila y retrocede en busca de un lugar seguro.Coppola acompañó la publicación de las primeras imágenes de Megalópolis en su cuenta de YouTube con una larga cita firmada por una "fuente conocida", la del experimentado crítico estadounidense Scott Foundas. Allí se lee que la película que sigue a esas imágenes de Adam Driver balanceándose ante el vacío en lo más alto de un rascacielos habla de "una civilización entera que se tambalea en una cornisa igualmente precaria, devorándose a sí misma en un torbellino de codicia desenfrenada, ensimismamiento y propaganda política, mientras unos pocos soñadores audaces empujan contra la corriente, esforzándose por marcar el comienzo de un nuevo amanecer".En lo que parecía ser el comentario de alguien que vio la película entera, no un breve anticipo de algo más de dos minutos, Foundas afirmó que, luego de largas décadas de planificación, Megalópolis es "el poderoso elixir" que Coppola acaba de crear: "Una película arrolladora y de gran formato, con ideas provocativas y una invención cinematográfica implacable, que desmiente los 84 años de su creador". Foundas también sugirió que no es una película sobre el fin del mundo tal como lo conocemos, sino que directamente "es el fin del mundo tal como lo conocemos".

Fuente: Perfil
18/05/2024 16:36

Francis Ford Coppola en Cannes: custodiado por sus nietas, su hijo y su hermana actriz

Con críticas divididas y con diez minutos de aplausos, este maestro del cine mundial, estrenó 'Megalópolis' en Cannes. Rodearon a Coppola, el elenco y su familia. Leer más

Fuente: La Nación
17/05/2024 21:18

Francis Ford Coppola en Cannes: los millones de Megalópolis, las acusaciones por comportamiento indebido y la secuencia desconocida de El padrino

Hace 45 años, Francis Ford Coppola apareció ante la prensa del Festival de Cannes para hablar sobre Apocalypse Now (con la que ganaría su segunda Palma de Oro), acompañado de su hija, Sofia. Este viernes lo hizo con Cosima, su nieta pequeña, de 13 años, de la mano, y la sentó a sus espaldas. "Como hice con su madre", explicó ante una abarrotada sala de prensa, volcada en vitorear al cineasta, que volvió a la competencia con Megalópolis: para unos, una obra que hace avanzar el cine por los caminos más arriesgados de la experimentación, jugándosela cada segundo con formatos y una tormenta de ideas; para otros, un dislate, una caída a los abismos de la simpleza, la imaginería barata y cierto machismo tras una mala digestión de política, sociología, historia, anuncios de Freixenet, el brilli brilli del director Baz Luhrmann y la vergüenza ajena que provocan los peores momentos de las hermanas Wachowski. Visto el ambiente del acto, había más apoyos de la primera facción.Coppola cruzó el jueves la alfombra roja bien escoltado por gran parte del equipo artístico, en el que se combinan rostros habituales en su carrera (Laurence Fishburne, que con 14 años trabajó en Apocalypse Now; su hermana, Talia Shire; o su hijo Roman Coppola) con nuevos integrantes de la banda: Adam Driver, Nathalie Emmanuel, Shia LaBeouf, Jon Voight, Giancarlo Esposito y Aubrey Plaza). Al cineasta se lo vio cansado, arrastrando los achaques de sus 85 años, apoyado en Romy Mars, la hija mayor de Sofia, y afectado por la muerte de su esposa, Eleanor, a la que dedica Megalópolis. Este viernes, en cambio, apareció más en forma, manejando con habilidad su vozarrón habitual y regalando perlas dialécticas. Tenía ganas de hablar, tras semanas en las que otros lo han hecho por él: desde la proyección privada en Los Ángeles, hasta las quejas de dos extras en The Guardian sobre su comportamiento inapropiado en el rodaje de la fiesta inicial de la película.Por de pronto, se definió en un estado de ánimo entre "el alivio y la alegría" tras la proyección el día anterior en el gran teatro Lumière del palacio de Cannes. Y ese sentimiento lo trasladó cuando le preguntaron sobre los 120 millones de dólares que costó Megalópolis, todos salidos de su bolsillo y por los que vendió parte de su imperio vinícola: "Mis hijos, sin excepción, tienen carreras maravillosas sin una fortuna detrás. Estamos bien. No importa. Les aviso: el dinero no importa. Lo importante son los amigos. Un amigo nunca te defraudará. El dinero puede evaporarse". Por eso, solo hay un título de crédito antes de que empiece el filme, el de su productora, American Zentrope."Lo que importa son los amigos"El cineasta es conocido por montar y retocar sus películas constantemente. "¿Sabes por qué lo hago? Porque me pertenecen". Nunca volvería a montar La conversación (su primera Palma de Oro) porque le gusta como está. "Tengo una secuencia más de El padrino que podría agregar algún día". ¿Hará lo mismo con Megalópolis? "Podría volver atrás y revisitar la epopeya en unos años", aunque dejó claro que no es una película testamentaria y que está escribiendo un guion para un nuevo proyecto.Megalópolis juega con la iconografía del imperio romano para trasladarse a un Nueva York distópico, algo que a Coppola le ha parecido obvio: "Porque la república estadounidense se fundamentó en la república romana". Y ya sabemos cómo acabaron hace 2000 años. "Nuestra política actual nos ha llevado al punto en el que podríamos perder nuestra república", comentó el cineasta. "No son los políticos los que van a ser la respuesta. Siento que son los artistas norteamericanos. Mi sueño, mi esperanza, es que sean los artistas de nuestro país los que nos iluminen". Y por eso le asusta "la ola fascista que sufre el mundo; cualquiera que haya vivido los horrores de la II Guerra Mundial, no quiere que se repitan".Y dicho esto, Coppola, que ha regateado nombrar a Donald Trump en la frase de la ola fascista, se dirigió al actor Jon Voight, conocido por sus ideas ultraconservadoras, para aclarar que en el equipo había gente de todo el espectro político, incluso de los más alejados a la ideología de Coppola. El veterano intérprete respondió que todo el mundo se hace la misma pregunta, en cómo ayudar al planeta para la próxima generación. Por eso apoya el mensaje del director: "Estoy de acuerdo con esta película, estoy de acuerdo en que los seres humanos somos capaces de resolver todos los problemas en los que nos metemos".Megalópolis sigue sin distribución en los Estados Unidos, aunque ya ha logrado compradores para casi todos los territorios europeos. De ahí su dolor y exasperación tras la proyección de Megalópolis en Los Ángeles, a finales de marzo, que acabó sin una oferta. "Los estudios están muy, muy endeudados y su trabajo no es tanto hacer películas como pagar sus obligaciones de deuda", analizó, para después sugerir que compañías tecnológicas como Apple, Amazon y Microsoft, "con mucho dinero", podrían ser el futuro y que "los estudios, algunos maravillosos, podrían no estar aquí en ese futuro". Su deseo es que la película se vea "en una sala para 500 o 600 personas que disfruten de la experiencia". "Lo del streaming es otro negocio".Su hermana, la actriz Talia Shire, estaba escondida entre el resto del equipo y sonreía con mirada de admiración cuando su hermano dijo cosas como que "el arte es como controlar el tiempo" o "la arquitectura es música congelada". Solo casi al final habló, obligada por Francis. "Él es un innovador. Mirar hacia atrás es cómodo, pero hay que avanzar, y Francis siempre piensa en ir hacia adelante. Ya era un innovador con nueve años, cuando estuvo un año sin moverse por la polio. Y [dirigiéndose a él] tú solo pensabas en caminar. Sé que cuando trabajo con Francis, avanzo".No ha sido ni mucho menos una despedida: "Espero estar aquí otros 20 años y por eso estoy con el nuevo guion". Aunque, probablemente influido por personas cercanas a él que han fallecido recientemente, como la mencionada Eleanor Coppola, o el hombre que le abrió la puerta a los rodajes, Roger Corman, Coppola reflexionó: "Mucha gente, cuando se muere, piensa en todo lo que pudo hacer y ni intentó. Yo no. He visto a mi hija ganar el Oscar, he hecho vino, he hecho todas las películas que quería hacer". Y concluyó que probablemente la muerte lo sorprenda así: trabajando.

Fuente: Perfil
17/05/2024 18:18

Francis Ford Coppola recibió abucheos en Cannes por su nueva película "Megalópolis"

La primera proyección pública de la obra experimental del veterano artista generó reacciones mixtas entre el público. Leer más

Fuente: Infobae
17/05/2024 16:04

Francis Ford Coppola sobre los USD 120 millones de dólares que gastó en Megalópolis: "El dinero no importa"

El director no se arrepiente de haber invertido una gran porción de su fortuna personal en una película que llevaba desarrollando por 40 años

Fuente: Infobae
17/05/2024 11:22

Francis Ford Coppola recibió abucheos en Cannes por su nueva película "Megalópolis"

La obra experimental del veterano artista desató reacciones mixtas en su primera proyección al público

Fuente: Página 12
16/05/2024 16:30

Festival de Cannes 2024: la tragedia de Francis Ford Coppola

Concebida a la manera de una fantasía retro-futurista, la película con la que el director de "Apocalypse Now" venía soñando hace más de cuatro décadas no está a la altura de su ambición.

Fuente: Infobae
14/05/2024 09:05

El proyecto más ambicioso de Francis Ford Coppola sale a la luz luego de 40 años

Se trata de "Megalopolis" que se prepara para impactar al Festival de Cannes antes de su lanzamiento en cines y acaba de lanzar su primer tráiler

Fuente: La Nación
14/05/2024 03:18

Chris Hemsworth, muy crítico contra Martin Scorsese y Francis Ford Coppola: "Ellos también tuvieron películas que no funcionaron"

Desde hace varios años, el cine de superhéroes acaparó la oferta cinematográfica. Grandes tanques cinematográficos como Avengers: Endgame o Guardianes de la galaxia se llevan toda la atención del público. Y si bien desde Marvel Studios celebraron el indiscutido éxito de sus títulos, eso también le valió al mundo de los superhéroes el recibir fuertes críticas por parte de prestigiosos realizadores, que no veían con buenos ojos el descomunal crecimiento de ese rubro. En una entrevista, Chris Hemsworth salió al cruce y se mostró muy molesto ante esos ataques.El actor que compuso a Thor en ocho largometrajes, confesó el dolor que le provocaron las opiniones lapidarias que Martin Scorsese y Francis Ford Coppola tuvieron contra las películas de Marvel. De ese modo, en diálogo con The Times of London, Hemsworth sentenció: "Se sintió muy duro, y me afecta, especialmente desde quienes son héroes. Fue algo que me hastió, que la gente ataque el mundo de los superhéroes. Ellos también tuvieron películas que no funcionaron, de hecho, todos las tuvimos".Más adelante, y molesto con las opiniones punzantes de las que fueron blanco las películas basadas en cómics de Marvel, el actor apuntó: "Cuando se ponen a hablar sobre qué es lo que anda mal con los superhéroes, yo pienso que está muy bien, pero que vayan y se lo digan a los miles de millones de personas que las disfrutan. ¿Acaso esa gente está toda equivocada?".En otro tramo de la entrevista, el australiano reflexionó sobre los hábitos actuales de los espectadores de cine, y subrayó: "El público no cambió debido al cine de superhéroes, el público cambió a raíz de los smartphones y las redes sociales. Las películas de superhéroes, de hecho, mantuvieron a la gente en los cines durante esa transición, y ahora los espectadores están volviendo. Así que creo que este género merece un poco más de respeto".Hace pocos años, las opiniones de Scorsese contra Marvel fueron incendiarias. Cuando fue consultado por la revista de cine británica Empire por su opinión sobre las películas de superhéroes, Scorsese las comparó con parques de diversiones y aseguró que en realidad no eran cine, muchos cuestionaron su punto de vista. Entre ellos estuvieron los actores Robert Downey Jr., Paul Rudd y el director James Gunn. Otros acordaron con él, como su amigo Francis Ford Coppola que no sólo declaró estar de acuerdo con Scorsese sino que redobló la apuesta para decir que en su opinión los films de Marvel son despreciables."Hay quienes dicen que las películas de Hitchcock eran muy parecidas entre sí y tal vez sea cierto. El propio Hitchcock se preguntaba si era así. Pero el modo en que son similares las superproducciones de hoy en día es diferente: muchos de los elementos que definen al cine como yo lo conozco forman parte de los films de Marvel. Lo que no tienen esas películas es un sentido de la revelación, misterio o peligro emocional. Nada está en riesgo. Esas películas se hacen para satisfacer una batería de demandas específicas y son diseñadas como una constante variación de un número finito de temas. Son secuelas solo en nombre: son remakes en espíritu (...) Esa es la naturaleza de las películas de Hollywood de hoy: productos creados a partir de la investigación de mercado, probadas en focus groups, revisadas, modificadas, vueltas a revisar y modificar hasta que están listas para ser consumidas", escribió Scorsese, que en principio aclaró que sus conceptos e ideas de los cinematográfico son personales y formadas según sus experiencias de vida y como espectador.Para reforzar los conceptos que lo pusieron en la mira de los fanáticos de Marvel, el director de Buenos muchachos decidió invocar los nombres de otros realizadores como ejemplo. "Para explicarlo de otra manera, diría que las películas de Marvel son todo lo que los films de Paul Thomas Anderson, Claire Denis, Spike Lee, Ari Aster, Kathryn Bigelow o Wes Anderson no son. Cuando miro una película hecha por cualquiera de esos cineastas sé que voy a ver algo absolutamente nuevo y que experimentaré algo inesperado y difícil de definir. Y que expandirá mi idea de lo que es posible transmitir a través de imágenes y de sonidos", explicó Scorsese antes de pasar al punto central de la polémica."La razón es simple. En muchos lugares alrededor de este país y del mundo, las películas de superhéroes son la primera opción en las salas. Es un tiempo peligroso para la exhibición de cine. La ecuación se dio vuelta, y el streaming es la forma de distribución principal de las películas. Aun así, no conozco ni a un realizador que no quiera crear films para la pantalla grande y que sus obras sean vistas en salas (â?¦). El hecho se mantiene: la mayoría de las salas están copadas por las franquicias de Hollywood", concluyó el realizador.

Fuente: La Nación
12/05/2024 21:18

Murió Roger Corman, el rey del cine clase B que impulsó las carreras de Martin Scorsese, Francis Ford Coppola y Steven Spielberg

Más que un cineasta, Roger Corman, que murió el pasado 9 de mayo en su casa de Santa Mónica (California) a los 98 años, era una leyenda. Forjó el destino del Nuevo Hollywood de los años setenta porque fue quien le dio la primera oportunidad en los rodajes a Francis Ford Coppola, Martin Scorsese o Peter Bogdanovich y con él empezó su trayectoria Jack Nicholson. Apostó por un cine independiente, de consumo y llegada fácil, de rodajes a la carrera, lo que no estaba exento de cierta pulsión artística, y además de los mencionados, James Cameron, Ron Howard, Joe Dante, Carl Franklin, Gale Anne Hurd, Monte Hellman o Jonathan Demme le deben que les dejara ponerse detrás de una cámara por primera vez. En un comunicado publicado ayer con el anuncio de su muerte, su familia contó que falleció rodeado de sus seres queridos, y lo definió así: "Era generoso, de corazón abierto y amable con todos los que lo conocían [...]. Cuando se le preguntó cómo le gustaría ser recordado, dijo: 'Yo era cineasta, solo eso".El sobrenombre de rey del cine de serie B, con su capacidad para sacar adelante 500 películas, ensombrece su gusto por un cine de terror, basado principalmente en relatos de Edgar Allan Poe, casi siempre con Vincent Price de protagonista, que deja títulos como La caída de la casa Usher (1960), El cuervo (1963), La máscara de la muerte roja (1964), junto a otras apuestas como El hombre con visión de rayos X (1963) o La tiendita del horror (1960). Esa década, la de los sesenta, fue su época dorada. Las generaciones posteriores sí entendieron que ese legado merecía ser honrado: recibió el Oscar de Honor en 2009 y en los últimos años apareció en las ceremonias de entrega de premios de las estatuillas de Hollywood y del festival de Cannes (el año pasado uno de sus mayores fans, Quentin Tarantino, lo acompañó para entregar un premio en la ceremonia de clausura del certamen francés). En X otra leyenda, John Carpenter, escribió ayer: "Roger Corman, uno de los directores de cine más influyentes de mi vida, ha fallecido. Fue un privilegio conocerlo. Era un gran amigo. Él moldeó mi infancia con películas de ciencia ficción y epopeyas de Edgar Allen Poe. Te echaré de menos, Roger".Corman fue un tipo sagaz, de los primeros que entendió en el mundo de cine que lo importante era que se hablara de las películas, aunque fuese mal, y usó a su favor siempre la publicidad negativa y la polémica, como la que acompañó a Los ángeles salvajes (1966), en su estreno en el festival de Venecia; a El viaje (1967), en la que Peter Fonda protagonizaba una inmersión en el LSD, al que recurría su personaje, un director hundido, para superar el abandono de su esposa (el guion era de Nicholson); o a cualquiera de sus films que metieran en su menú desnudos y sexo, violencia y temas sociales. Puede que por ello encontrara eco en Europa: es el cineasta más joven que fue objeto de una retrospectiva en la todopoderosa Cinemateca Francesa. Ocurrió en 1964, cuando Corman tenía 38 años.Su capacidad brutal para producir películas también se basó en cierta falta de vergüenza, por la que fue a veces criticado: sí, con él empezaron varias generaciones de artistas, y les dejó hacer algunas apuestas artísticas, pero siempre que no se alejaran de la marca de la casa del terror barato y de rápido consumo. A cambio, sus films eran escuelas intensivas de rodaje para técnicos y equipos: El clan Barker (1970), su película sobre una matriarca de gánsteres, Ma Barker, y sus hijos matones, no soportó el paso del tiempo pero en el reparto aparecen Shelley Winters, Robert De Niro, Don Stroud, Pat Hingle y Bruce Dern. Corman intuía rápidamente quién rendiría en la pantalla: Jack Nicholson, Dennis Hopper, Ellen Burstyn, Sylvester Stallone o De Niro son solo algunos de los intérpretes que se iniciaron con él en el cine. Y como recuerda The Hollywood Reporter, Nicholson hizo su debut en la pantalla grande a los 21 años en Grita, asesino (1958), producida por Corman.El productor contrató a un joven Scorsese para dirigir Pasajeros profesionales (1972) y a Demme para escribir Jaula caliente (1974); convirtió a Hurd (productora posteriormente de Terminator, Aliens: el regreso, Armageddon o la serie The Walking Dead), recién graduada de la universidad, en su asistente de producción y más tarde en su jefe de marketing; le dio a Cameron el trabajo en 1980 de diseñar accesorios para Batalla más allá de las estrellas; Coppola, a quien encontró cuando llamó a la universidad de UCLA preguntando por el mejor estudiante de montaje que tuvieran, dirigió para él Demencia 13 (1963), y Bogdanovich sacó adelante un lustro más tarde Míralos morir, con Boris Karloff.A Ron Howard, al que se le había acabado su carrera de actor infantil, le abrió las puertas de la dirección con su primer largometraje, El gran robo del auto (1977). Cuando Howard se quejó por la negativa del productor a pagar por más extras en varias secuencias, Corman le espetó una de sus frases míticas y por demás acertada: "Ron, si haces un buen trabajo para mí en esta película, nunca tendrás que volver a trabajar para mí". Con el tiempo, todos estos jóvenes le guardaron cameos en sus películas a modo de homenaje: Corman aparece en El padrino II, El silencio de los inocentes, Apolo 13, Filadelfia y El embajador del miedo, entre otras.Roger Corman nació en Detroit y su familia se mudó a Beverly Hills, cerca de la meca del cine, cuando él tenía 14 años. Se graduó en 1947 en Ingeniera industrial en Universidad de Stanford y posteriormente sirvió en la marina tres años. Cuando volvió a casa, el mundo de la ingeniería ya no le interesaba, y aceptó un trabajo en el estudio 20th Century Fox como cadete, hasta convertirse en analista de guiones. Sin embargo, no logró ascender mucho más, renunció y se fue a Oxford a realizar estudios de posgrado en literatura inglesa. Desde París, empezó a vender reportajes y cuentos a revistas, y así comenzó de nuevo. Cuando regresó a los Estados Unidos, trabajó como agente literario. Inspirado por el absoluto horror de los guiones que leía, decidió probar suerte en la escritura. En un documental, contaba: "Me pareció una manera fácil de ganar dinero, así que me senté y pasé muchas noches haciendo un guion llamado Highway Dragnet", que vendió a Allied Artists por 4.000 dólares, y se convirtió en la película Conciencia culpable de 1954.Pero donde aprendió su oficio fue en la American International Pictures, del productor Samuel P. Arkoff, que realizaba películas de género baratas, pensadas para públicos de autocines. Corman entendió que había dos virtudes inherentes a ese estilo: había que contar las historias visualmente y había que trabajar rápido. En AIP produjo ocho películas solo en 1956, y de 1955 a 1960 se le atribuye la producción o dirección de más de 30 películas, todas tenían presupuestos de menos de 100.000 dólares, y la mayoría se realizaron en menos de dos semanas. Corman, en su productora, llegó a hacer films en cinco días.En los años setenta, porque Corman era inquieto, además de la producción, se lanzó a distribuir cine de autor extranjero, a través de su compañía New World. Estrenó en su país Gritos y susurros (1972), de Ingmar Bergman; Amarcord (1974), de Federico Fellini; La historia de Adela H. (1975), de François Truffaut; Dersu Uzala (1975), de Akira Kurosawa; El tambor, de Volker Schlöndorff, y Fitzcarraldo (1982), de Werner Herzog. Su alma inquieta lo llevó también a filmar en diferentes países, incluida la Argentina, en donde, gracias a una alianza con Héctor Olivera, realizó diez películas coproducidas entre Aries Cinematográfica Argentina y su propia productora.Cuando recibió el Oscar de honor, en su discurso explicó: "Muchos de mis amigos, compatriotas y personas que comenzaron conmigo están aquí esta noche y todos han tenido éxito. Y creo que lo han logrado porque tuvieron el coraje de arriesgarse, de apostar. Pero apostaron porque sabían que tenían la capacidad de crear lo que querían hacer. Es muy fácil para un gran estudio o cualquier otra persona repetir sus éxitos, gastar grandes cantidades de dinero en remakes, en películas de franquicias con efectos especiales. Pero creo que las mejores películas que se hacen hoy nacen de cineastas originales e innovadores que tienen el coraje de arriesgarse y apostar. Por eso les digo: 'Sigan apostando, sigan arriesgándose".Años antes su discurso era algo más amargo: solía quejarse de que los estudios de Hollywood le habían robado su mercado: desde el éxito de Tiburón y La guerra de las galaxias, las majors se centraron en ciencia ficción y superhéroes, abandonando décadas de grandes presupuestos centradas en el drama. Según él, algunos de sus hijos cinéfilos habían matado al padre. "En las películas de ciencia ficción, el monstruo debe ser siempre más grande que la protagonista". Una máxima con la que no le fue nada mal, como alardeaba desde el título de su autobiografía, publicada en 1990: How I Made a Hundred Movies in Hollywood and Never Lost a Dime, o, en castellano, Cómo hice cientos de películas en Hollywood y nunca perdí un céntimo".

Fuente: Infobae
05/05/2024 03:22

"Megalópolis": se reveló el teaser de la película más arriesgada de Francis Ford Coppola

El director invirtió décadas y una fortuna personal en su proyecto más ambicioso hasta la fecha. Adam Driver protagoniza el primer adelanto compartido antes de su debut en Cannes

Fuente: La Nación
04/05/2024 19:00

Francis Ford Coppola reveló las primeras imágenes de su nueva película, muy cerca de su estreno en Cannes; "un film arrollador"

Cuando faltan apenas dos semanas para su estreno mundial en la competencia oficial del Festival de Cannes 2024 se conocieron las primeras imágenes de Megalópolis, uno de los más ambiciosos proyectos cinematográficos de toda la carrera como director de Francis Ford Coppola. Son menos de dos minutos y medio que en realidad no podrían definirse de la manera tradicional como un tráiler, sino el breve desarrollo a lo largo de ese escueto tiempo de una única escena protagonizada con exclusividad por Adam Driver en la cornisa de un rascacielos de lo que parece ser una gran ciudad.Coppola difundió este acercamiento inicial a la película que financió con su propio dinero el mismo día en que su esposa hubiese cumplido 88 años. "Megalópolis siempre estuvo dedicada a mi querida esposa Eleanor. Realmente esperaba celebrar juntos su cumpleaños, este 4 de mayo. Pero lamentablemente no pudo ser, así que permítanme compartir con todos un regalo en su nombre", escribió el realizador en su cuenta oficial de Instagram, desde la cual hizo la presentación. Eleanor Coppola falleció el 12 de abril pasado.Casi no hay palabras en el anticipo que también difundió Coppola a través de su canal oficial de Youtube. La secuencia empieza cuando Driver, con mucho cuidado, abre la puerta de la cúpula de un edificio -que semeja el célebre Chrysler Building de Manhattan- y camina lentamente hacia el borde del extenso balcón ubicado en el punto más alto de la construcción. Cuando parece a punto de saltar se escucha el grito de una voz poderosa que brama: "¡Tiempo, detente!". Todo se detiene a partir de esa orden, empezando por el cuerpo suspendido en el aire del personaje y es el propio Driver, cuya angustia se refleja en su rostro (capturado por la cámara de Coppola en primerísimos planos), quien en ese momento vacila y retrocede en busca de un lugar seguro.Coppola acompañó la publicación de las primeras imágenes de Megalópolis en su cuenta de Youtube con una larga cita firmada por una "fuente conocida", la del experimentado crítico estadounidense Scott Foundas. Allí se lee que la película que sigue a esas imágenes de Driver balanceándose ante el vacío en lo más alto de un rascacielos habla de "una civilización entera que se tambalea en una cornisa igualmente precaria, devorándose a sí misma en un torbellino de codicia desenfrenada, ensimismamiento y propaganda política, mientras unos pocos soñadores audaces empujan contra la corriente, esforzándose por marcar el comienzo de un nuevo amanecer".En lo que parece ser el comentario de alguien que vio la película entera, no un breve anticipo de algo más de dos minutos, Foundas afirma que, luego de largas décadas de planificación, Megalópolis es "el poderoso elixir" que Coppola acaba de crear: "Una película arrolladora y de gran formato, con ideas provocativas y una invención cinematográfica implacable, que desmiente los 84 años de su creador". Foundas también sugiere que no es una película sobre el fin del mundo tal como lo conocemos, sino que directamente "es el fin del mundo tal como lo conocemos".Grandes figurasDriver personifica en la película a César, un arquitecto con grandes ambiciones que vive y trabaja en una ciudad ficticia con las características de Nueva York, cuya visión choca de frente con la que tiene el alcalde (Giancarlo Esposito). En el medio de ambos aparece la hija de este último, interpretada por Nathalie Emmanuel. El extenso elenco incluye a dos destacadas figuras que son familiares directas de Coppola: su hermana Talia Shire y el hijo de ésta, Jason Schwartzman. También aparecen en el film Shia LaBoeuf, Jon Voight, Dustin Hoffman, James Remar, Aubrey Plaza, Grace Vanderwaal, Laurence Fishburne, D. B. Sweeney, Chloe Finneman, Isabelle Kusman y Bailey Ives.Todavía no se conoce el calendario oficial completo de días y horarios para las proyecciones de las películas en competencia dentro del Festival de Cannes, pero desde hace varios días se sabe que Megalópolis tiene asegurado un estratégico lugar para la gala de su estreno mundial el próximo viernes 17 de mayo, tres días después de la apertura oficial de la edición 2024 de la muestra de cine más importante del año.Coppola puso en 2022 de su bolsillo los 120 millones de dólares requeridos por una compleja producción que se fue convirtiendo en el proyecto de su vida. Para concretarlo decidió inclusive vender buena parte de su exitoso emprendimiento vitivinícola de bodegas y viñedos en Napa, al norte de California.Desde los años 80El primer guion de Megalópolis fue escrito por Coppola en la década de 1980. En ese momento ya tenía en claro que la película iba a ser una historia de amor. "Una mujer está dividida en medio de la lealtad hacia dos hombres. Cada uno de ellos se acerca a ella con un principio filosófico distinto. Uno es su padre, que la crió, le enseñó latín en su regazo y está consagrado a una visión mucho más clásica de la sociedad, al estilo de Marco Aurelio. El otro en su amante, enemigo del padre y defensor de la idea de saltar hacia el futuro por encima de la basura, según dice, que contamina a la sociedad desde hace 10.000 años", dijo el realizador hace poco a la revista GQ.Coppola se juega buena parte de su propio patrimonio en esta jugada de riesgo. Hasta ahora no logró asegurarse la distribución de Megalópolis en Estados Unidos, lo que le permitiría vislumbrar la recuperación de al menos una parte de la enorme suma que invirtió en la película. La prensa de Hollywood señaló después de la primera proyección, realizada el mes pasado en Las Vegas ante colegas, amigos, actores, figuras influyentes de la industria y potenciales distribuidores, que estos últimos mantienen fundadas dudas respecto del recorrido comercial de la película debido al carácter casi experimental de la obra, muy en línea con los últimos trabajos conocidos de Coppola, entre los cuales se incluye Tetro, que se rodó en Buenos Aires en 2008. Nadie espera que Megalópolis obtenga del público una respuesta masiva similar a la que tuvieron las obras más exitosas de la carrera del realizador como El padrino, Apocalipsis Now y Drácula.Por ahora, el único mercado que tendría ya confirmado un distribuidor es Francia. Así lo adelantó la revista de actualidad Le Point, al informar que la firma parisina Le Pacte adquirió los derechos del film para su estreno en ese territorio por una cifra que no trascendió. Le Pacte también publicó este sábado en su cuenta oficial de YouTube el clip de casi dos minutos y medio con las primeras imágenes de Megalópolis, pero su CEO Jean Labadie había dicho unos días: "Todavía no tenemos la película completa. No hay nada firmado hasta ahora".Algún posible interés de parte de las plataformas de streaming aparece en suspenso debido a las estrictas reglamentaciones que fija el Festival de Cannes para los títulos que participan de la competencia oficial por la Palma de Oro. Deben obligatoriamente estrenarse primero en los cines dentro de Francia y no pueden hacerlo a través de alguna plataforma global, recién habilitada para difundirla 17 meses después de su exhibición en las salas. Esa limitación condiciona la adquisición de los derechos internacionales desde el mundo del streaming.La gran vidrieraCoppola parece confiar ciegamente en Cannes como la mejor vidriera para encontrar interesados en distribuir Megalópolis alrededor del mundo. "Francis Ford Coppola es parte de la familia de Cannes, no sólo porque obtuvo aquí dos Palmas de Oro, sino que también estuvo muy cerca de nosotros", dijo hace un par de semanas Thierry Frémaux, el responsable máximo de la programación artística del festival.Sobre Megalópolis, Frémaux agregó: "Comenzó a editarla hace un año. Como él y yo hablamos con bastante frecuencia, lo único que quería saber era qué estaba haciendo con ella. Hace algunas semanas, no meses, me dijo: "Bueno, ya terminé, ¿quieres verla? Le dije que sí y luego aceptó mi invitación de venir a Cannes este año". Reveló también que Coppola siempre pensó en llevar su película a la competencia oficial. "Era eso o nada -aseguró-. No viene a perder el tiempo. Quiere mostrar su película y enfrentarse a cineastas jóvenes y directores consagrados. Ya ganó dos Palmas de Oro y tal vez quiera ganar la tercera".Este año se cumplen las bodas de oro del primer triunfo de Coppola en Cannes. Se llevó en 1974 la Palma de Oro por La conversación. Cinco años después volvió a triunfar en la competencia oficial con Apocalipsis Now. Medio siglo después sueña con repetir la historia de la mano de Megalópolis.




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