El productor musical expresó su molestia por una nueva versión de Hay Niveles lanzada por Leslie Shaw con músicos bolivianos y afirmó que evalúa retirar el tema del mercado por conflicto de derechos
La ley establece condenas de 15 a 20 años por terrorismo. "Hemos pedido al Ministerio Público que actúe con la debida celeridad, que pueda rápidamente admitir esta denuncia", dijo el ministro de Justicia César Siles. Leer más
El desequilibrio económico sacude los mercados en la frontera con Perú, mientras la moneda de Bolivia pierde terreno y genera escasez, alzas de precios y temor a una crisis aún más profunda, según los expertos
El análisis de precios en supermercados bolivianos revela que algunos productos importados desde Perú han aumentado significativamente su costo, afectando la decisión de compra de los consumidores locales
El tipo de cambio en Desaguadero alcanzó niveles históricos, elevando los precios de productos importados desde Perú y obligando a las vendedoras bolivianas a dejar de comercializarlos por los altos costos
Fue la máxima autoridad en la Bombonera aquella noche y cuenta que tomó la decisión de suspender el partido enseguida.Sin embargo, no la comunicó para resguardar la seguridad de la gente y de los futbolistas."D'Onofrio salió al campo, pero no tuvo ninguna influencia en la decisión, pero si yo se la decía ya se filtraba", contó.
Ocurrió el pasado sábado, en Quilmes, cuando el hombre se subió a la vereda con el auto, chocó contra un local y fue increpado por un vecino.En redes sociales primero se instaló la versión de que había sido asesinado a golpes, pero en verdad se había ahorcado.
Un hombre de 36 años de nacionalidad boliviana quiso sobornar a la policía en un control policial y fue detenido en el barrio porteño de Liniers.El hecho ocurrió cuando la Policía de la Ciudad detuvo la marcha de un vehículo que circulaba con la patente obstaculizada y el conductor intentó sobornar a los efectivos para que lo dejaran seguir.Al revisar el rodado, los oficiales determinaron que la chapa se encontraba adulterada y procedieron a identificar al conductor, quien contaba con la licencia vencida.En ese momento, el implicado le ofreció dinero a los efectivos para que lo dejaran retirarse del lugar.Fue entonces que se procedió a demorarlo y a requisar el vehículo donde fueron encontrados más de un millón de pesos, una cédula boliviana a nombre de un tercero y una cédula automotor que no correspondía al rodado en cuestión.En primera instancia intervino la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°53 a cargo de Matías Di Lello que dispuso no adoptar flagrancia. Luego, se realizó una consulta con el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N°53 a cargo de María Fabiana Galleti quien solicitó que se labren actuaciones por "averiguación de ilícito" y se detenga al implicado.Asimismo, ordenó que se dé aviso al Consulado de Bolivia, Migraciones e Interpol para que secuestren el automóvil, la documentación y la patente, y que esta última sea enviada a scopometría para determinar su veracidad.Por último, el procedimiento culminó con el traslado del imputado y los elementos incautados a la Comisaría Vecinal 9 B.Intentó coimear a policías en LiniersEl soborno, también conocido como "coima", se enmarca dentro de lo que se conoce en el derecho como "cohecho activo" [el que ofrece la "coima"] y "cohecho pasivo" [para el que recibe el soborno]. Estos delitos están tipificados en los artículos 256 y 258 del Código Penal.Se considera "cohecho activo" a la acción que lleva adelante una persona que ofrece o entrega dinero u otros beneficios a un funcionario público para que realice, retarde o deje de realizar un acto relacionado con sus funciones.La sanción de este tipo de delitos busca proteger la integridad y la imparcialidad de la administración pública, castigando tanto al que ofrece como al que acepta el soborno. Las penas pueden incluir prisión de uno a seis años e inhabilitación especial perpetua para el funcionario involucrado.El antecedente de eneroA fines de enero, un hombre y una mujer que no tenían toda la documentación de la camioneta en la que circulaban fueron detenidos durante un control vehicular tras intentar sobornar a efectivos de la Policía de la Ciudad a fin de evitar que se les labrara una infracción y poder seguir su viaje hacia "un bautismo".El hecho, que fue difundido por la fuerza de seguridad porteña, ocurrió en la autopista Ricardo Balbín, en la bajada Ingeniero Huergo, cuando personal de la División Anillo Digital detuvo la marcha de una camioneta Toyota Corolla Cross para una identificación de rutina.El conductor, de nacionalidad peruana, carecía de la documentación del vehículo y les dijo a los agentes "si podían arreglar de otra manera", en alusión a otorgar dinero para poder continuar su camino.Mientras esta situación ocurría, un segundo automóvil detuvo su marcha del cual se bajó una mujer conocida del hombre involucrado. Esta se acercó a los agentes y también les insinuó si la situación "se podía arreglar de otra manera, ya que se dirigían a un bautismo".El hombre le dijo a la oficial, que contaba con un dispositivo de grabación colocado en su pecho: "¿Podemos conversar de verdad? ¿Me puede ayudar? No encuentro la tarjeta".La mujer policía respondió: "Soy personal policial y le solicité la documentación. Necesito la cédula del vehículo, su licencia de conducir y la autorización de manejo".Según se puede escuchar en la filmación que los uniformados hacen en este tipo de controles en la ciudad de Buenos Aires, el conductor vuelve a la carga e insiste con el pago de una "coima"."¿Cómo podemos arreglar? No la quiero ofender, pero tengo dinero efectivo. Tuvimos familia hace siete días, ella [por su pareja] está buscando el DNI. Tenía que venir a un bautismo. Mi mujer quedó en casa porque tenemos seis nenes. ¿Cómo podemos arreglar?", insistió el infractor.La respuesta de la oficial fue: "Estoy trabajando, señor. Yo no voy a arreglar nada, señor. Necesito la documentación del vehículo. Lo único que hago es cumplir con la ley y pedirle la documentación del vehículo para que pueda seguir circulando".En tanto, la mujer que venía en otro automóvil se sumó al diálogo y también intentó sobornar a la mujer policía al señalar que en su poder tenía "200 mil pesos". Ante esta situación y tras consultar con la Unidad de Flagrancia Este, a cargo del fiscal Mariano Camblong, se dispuso la detención de las dos personas y el secuestro de los dos rodados y los teléfonos celulares de las dos personas.
Debido a esto el jefe de cartera Carlos Eduardo del Castillo pidió a las autoridades que investigan esta polémica decisión que se encarguen de ir hasta las últimas consecuencias luego de que una medida de prisión domiciliaria fue aprovechada por Leonardo Rubio Castañeda, oriundo de San Vicente del Caguán
La polémica entrevista realizada por el youtuber peruano 'Roberto Viajero Vlogs' ha encendido un debate en redes sociales
El coronel boliviano Oscar Armando Caba Hurtado, que fue detenido a unos 30 kilómetros de Rosario, después de aterrizar con una avioneta con 475 kilos de cocaína que provenían de Santa Cruz de la Sierra, fue condenado en un juicio abreviado a siete años y dos meses de prisión. El militar boliviano no habló ante los fiscales de la causa y no dio indicios sobre el destino que tenía el cargamento de drogas que transportaba.El procedimiento abreviado fue acordado por los fiscales Claudio Kishimoto y Francisco Bernhardt y también participó la Procuraduría de Narcocriminalidad. Por su parte, fue homologado este viernes por el juez de Garantías Eduardo Rodrígues Da Cruz.El hecho ocurrió a fines de octubre y fue poco frecuente, porque el vuelo narco fue identificado por el radar ubicado en la localidad de Tostado, al norte de Santa Fe, que confirmó que se trataba de un vuelo irregular, lo que motivó que se ordenara el despegue de un avión EMB 312 Tucano de la Fuerza Aérea Argentina, que logró visualizar a las 15.35 del 30 de octubre, cerca de Reconquista, un Cessna 206, con matrícula CP-3350, que correspondía al Estado Plurinacional de Bolivia, con cuyo piloto se intentó establecer contacto radial, sin resultado.Según la causa judicial, después de esa maniobra se dispuso su seguimiento, tras lo cual, minutos más tarde la avioneta comenzó a descender, y aterrizó a las 17.30 en un campo ubicado en la localidad de Andino, a unos 30 kilómetros de Rosario.Allí comenzó una nueva aventura para el piloto. Caba Hurtado aterrizó donde tenía previsto hacerlo. En la aeronave que tenía una matrícula falsa quedaron 475 kilos de cocaína. El coronel del Fuerza Aérea boliviana, que está imputado por una masacre en el golpe de Estado en Bolivia, viajaba solo. La cabina no tenía asiento para un copiloto. Ese espacio se había utilizado para acomodar la carga de panes de droga que tenían loa inscripción de un toro.A Caba Hurtado lo detuvieron después de que un joven que lo encontró en el río llamó a los Bomberos de Luis Palacios. Luego llegó Gendarmería y el piloto quedó arrestado. El militar no tenía su celular. Se sospecha que lo tiró al río, pero no lo admitió. Tampoco se encontró un GPS en la avioneta, algo que llamó la atención de los investigadores. El único registro que hay hasta ahora es el de los radares de Santiago del Estero y Tostado, que identificaron el vuelo de esta avioneta como Tránsito Aéreo Irregular (TAI). Se sospecha que Caba Hurtado traía esa cantidad de cocaína desde Bolivia. No se descarta que la ruta incluya a Paraguay.Por consejo de su abogado, Caba Hurtado se negó a declarar a lo largo del proceso que terminó en un juicio abreviado. El letrado que lo defiende es Hugo Leguizamón, que tuvo contacto en causas en las que había gente vinculada a Esteban Alvarado. Esto despertó suspicacias entre los investigadores, que además miran la zona donde aterrizó la avioneta con atención. El piloto le habría dicho al joven que lo intentó ayudar en el río que su intención era llegar a Ibarlucea, que está a unos 30 kilómetros de donde aterrizó este militar boliviano.Ibarlucea era un lugar que Fabián Pelozo usaba para acopiar cocaína o "enfriarla" como se denomina en la jerga. Parte de esa droga era de un personaje pesado: el narco boliviano Jorge Adalid Granier Ruiz, conectado con el grupo brasileño Primer Comando Capital, y quien -según la DEA, como señala el expediente- proveía de cocaína al jefe narco rosarino Esteban Alvarado.Fue en Ibarlucea donde el nombre de Pelozo comenzó a aparecer ligado a una trama trágica. No muy diferente al doble crimen en Esteban Echeverría. El 29 de enero de 2022, Iván Giménez, su pareja Érica Romero y la bebé Elena Giménez de un año y medio, fueron ejecutados al salir de una boda de dos narcotraficantes Esteban "Pinky" Rocha y Brisa Leguizamón, que habían decidido hacer un despampanante festejo al reunir a la crema del narcotráfico de Rosario.Horas después de la boda el nombre de Pelozo empezó a mencionarse en el círculo de la banda de Los Monos, cuyos algunos de sus integrantes habían estado en la fiesta de casamiento. Iván Giménez, uno de los ejecutados, era cliente de Calavera.Anteriormente, su nombre también aparecía unido a historias tremendas con Esteban Alvarado. Pelozo apareció también mencionado por el testigo Carlos Argüelles, que fue asesinado en septiembre de 2021, tras declarar como arrepentido en la causa contra Alvarado, condenado a prisión perpetua. El mecánico advirtió que Pelozo era parte del clan Alvarado y que ambos habían asesinado a Nahuel Fernández, que está desaparecido desde agosto de 2018.El testigo dijo que Calavera había colocado el cadáver del joven en un recipiente con cal y luego lo enterraron. Uno de los miembros de la banda de Pelozo, Oscar Godoy, fue asesinado el 19 de octubre de 2022. Cuando los fiscales de la Unidad de Criminalidad Organizada Matías Edery y Luis Schiappa Pietra revisaron el lugar se toparon dos tanques de 200 litros con cal que estaban enterrados y coincidían con el testimonio del testigo ejecutado. Nunca se pudo probar lo que dijo Argüelles, pero las sospechas permanecen intactas.
Se trata de Oscar Armando Caba Hurtado (57), detenido en octubre del año pasado en Santa Fe.En su país está acusado de 10 crímenes tras la renuncia del expresidente Evo Morales, en 2019.
Este sujeto llegaba al aeropuerto José María Córdova, procedente de Punta Cana, y fue interceptado por las autoridades
Mientras que el exdirigente Julio Mamani aseguran que no existen pruebas concretas ni escasez en el mercado local que respalden la denuncia. Sostienen que, de haber un desvío significativo, ya se sentirían los efectos en los centros de abasto
El artista conversó con Infobae Perú, donde habló sobre su trabajo en la nueva novela de Michelle Alexander, cómo maneja las críticas en su carrera y lo agradecido que está con el público peruano.
En Tucumán detuvieron un camión en un control vehicular que había salido de la localidad salteña de Güemes. Los paquetes tenían un símbolo asociado a un grupo de traficantes de drogas de alta calidad.
ROSARIO. No hay muchos misterios: el avión boliviano encontrado por el propietario de un campo cerca de la localidad entrerriana de La Paz regresaba a Santa Cruz de la Sierra casi vacía, después de dejar en suelo argentino la cocaína que había traído. El dueño del Cessna 206, matrícula CP-846, es el piloto boliviano Kevin Roca Alpire, de 63 años. Los investigadores de la Policía de Entre Ríos están tratando de determinar ahora si las huellas halladas en la aeronave corresponden a este hombre, que cuenta con antecedentes de narcotráfico de cocaína.El nombre de Kevin Roca Alpire tuvo trascendencia en Bolivia hace más de una década al protagonizar un accidente aéreo con la aerolínea Aerocon, de Beni, en la frontera con Brasil, donde murieron ocho personas. Este piloto boliviano figura en los registros oficiales de aquel país como propietario y comandante del monomotor abandonado en un campo del noroeste entrerriano.En enero pasado fue secuestrado otro avión, un Cessna 210, pero esta vez en Ibicuy, en el sur de la provincia mesopotámica; tenía un cargamento de 359 kilos de cocaína. Se presume que esta aeronave había salido desde la zona de Beni, en Bolivia, y recorrió unos 1600 kilómetros hasta aterrizar de emergencia en la zona de islas del delta entrerriano. La policía provincial detuvo a un piloto brasileño y a una mujer que lo acompañaba, Jade Isabela Callaú Barriga, que fue reina de belleza en Bolivia y tiene un lazo de parentesco con el narco boliviano Jorge Adalid Granier, preso en el penal de Ezeiza y socio de un jefe narco rosarino, Fabián "Calavera" Pelozo.Avión Entre RíosEl nuevo hallazgo de esta avioneta narco cerca de La Paz enciende alertas sobre las rutas nuevas que están ganando espacio en el aire, que tienen que ver con una triangulación entre Bolivia, Paraguay y la Argentina. El objetivo del traslado de estas cargas no tendría que ver con el consumo interno en las principales ciudades del centro del país, como Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, sino con ubicarlas en embarques que tienen como destino países de Europa, Asia y Oceanía, donde la droga adquiere un valor mucho mayor.Fuentes del Ministerio de Seguridad de Entre Ríos confirmaron a LA NACION que tienen identificado al dueño de la avioneta, que es un piloto boliviano de larga trayectoria y con supuestos lazos con el narcotráfico. Los peritos están tratando de establecer si las diez huellas detectadas en la aeronave secuestrada pertenecen a este hombre, que podría haber sido quien piloteó la aeronave en el espacio aéreo argentino. Si logran confirmar estos datos se cursará un pedido de detención de Interpol, advirtieron las fuentes.El hallazgo de la aeronave se produjo en San Gustavo, en el departamento La Paz. "Cuando el personal policial, después del aviso del dueño del campo, revisó la aeronave no encontró sustancias estupefacientes. Solo había tanques con combustible. Pero el olfato de los perros especializados marcaron lo que se conoce como 'olor muerto' de cocaína", explicaron los investigadores consultados."Evidentemente, la cocaína que llevaba el avión fue descargada y cuando el piloto regresaba a su país tuvo un desperfecto técnico y tuvo que abandonar la aeronave", afirmaron las fuentes consultadas. La investigación del caso quedó a cargo del juez federal de Paraná, Leandro Ríos.Después de que se secuestrara el avión, agentes de la policía de Entre Ríos realizaron por la zona una búsqueda del piloto con cámaras térmicas y perros, pero no tuvieron resultado positivo. El piloto huyó después de que la avioneta aterrizara por falta de combustible. Tenía un problema en uno de los tanques. Cuando abandonó la Cessna 206 olvidó unas cajas de alfajores Havanna y paquetes de sal marina y unos vinos de la bodega Catena Zapata.Logística variableLo que marca este hecho, con otra avioneta como flete de carga, es que el transporte de la cocaína cambia de manera casi permanente. Desde hace unos años, a partir de la pandemia, según los especialistas consultados, se consolidó una ruta aérea de la cocaína que es una especie de triángulo: Bolivia, Paraguay y Argentina.En la zona de Cochabamba, Santa Cruz de la Sierra y Beni, en Bolivia, se produce la pasta base y luego la cocaína, que se envía al Chaco paraguayo, una región poco habitada e inhóspita en Paraguay donde se consolidan los cargamentos que aterrizan en pistas clandestinas, según el investigador de la Universidad de Asunción Carlos Pires. Luego, a través de la Hidrovía o por avionetas, las cargas de cocaína llegan a la Argentina, fundamentalmente a Rosario y Buenos Aires, y a Uruguay, donde son camufladas para salir rumbo a Europa o Asia, donde el valor de la droga es más de diez veces mayor. Lo que observan desde hace tiempo los investigadores de Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar) es que los vuelos se realizan en el límite entre Argentina y Uruguay sobrevolando las inmediaciones del río que marca la frontera entre ambos países. La sospecha es que en esa zona es más difícil una intervención aérea cuando las aeronaves narcos vuelan por momentos en cielo argentino y por otros en el uruguayo.Los investigadores evalúan si esta avioneta hizo un viaje similar al Cessna 210 que aterrizó de emergencia en Ibicuy con 359 kilos de cocaína, en enero pasado. En ese momento, Néstor Roncaglia, ministro de Seguridad de Entre Ríos y exjefe de la Policía Federal, señaló a LA NACION que la trayectoria de vuelo de la avioneta da indicios de que se dirigía hacia la provincia de Buenos Aires. Allí está muy cerca el puerto de Zárate-Campana.Contactos internacionalesEl análisis de los investigadores de la Procunar es que uno de los que tiene influencia desde hace por lo menos tres años en esa ruta es el boliviano Adalid Granier. Aunque a fines de enero fue condenado en Salta a diez años de prisión por narcotráfico, su nombre aparece como una sombra ante cada avioneta secuestrada, porque era uno de los que manejaba la logística a través de esa vía en la zona.El problema que enfrenta la Justicia argentina ante este tipo de hechos es la reticencia que tiene Bolivia a colaborar. La Justicia boliviana es indiferente a todos los pedidos que se hacen desde la Argentina. Por caso, jamás avalaron una extradición de un narco de ese país a la Argentina. Con Paraguay hay mejor vínculo, pero muchas sospechas de la penetración del narcotráfico a nivel institucional.Los vuelos narcos provenientes de Bolivia y de Paraguay llegan cada vez más cerca del centro del país. Eso es algo que antes no ocurría. Los llamados "bombardeos" de droga eran el método más usado en el norte de la Argentina, a pocos kilómetros de la frontera con Bolivia, cuando no había intermediación de Paraguay. Salta y Santiago del Estero eran las provincias donde más se daba esta metodología, que consiste en que la avioneta "pierde" altura para arrojar los bultos con la droga en puntos fijados con GPS. En las inmediaciones generalmente hay cómplices que en pocos minutos se llevan el cargamento.Ahora las avionetas hacen recorridos más largos. Por ese motivo se incorporaron más radares para tener un mejor control aéreo, como el que se puso en funcionamiento el año pasado en Tostado, norte de Santa Fe. La vigilancia de los cielos la lleva adelante el Comando Conjunto Aeroespacial para hacer que el tráfico aéreo que circula en la Argentina respete la normativa vigente. De lo contrario se transforma en un TAI: tránsito aéreo irregular. Como ya ocurrió en varias ocasiones, los cazas de la Fuerza Aérea pueden interceptar a las aeronaves sospechosas e instarlas a aterrizar. La Argentina nunca sancionó una ley de derribos de aeronaves en tránsito ilegal, tal como sí lo hicieron otros países de la región, como Brasil. A fines de octubre pasado, otro Cessna 206 aterrizó cerca de Pueblo Andino, a unos 35 kilómetros de Rosario. Según la ministra Patricia Bullrich, los radares habían detectado ese vuelo ilegal y la aeronave fue obligada a descender por dos cazas de la Fuerza Aérea. El piloto Oscar Armando Caba Hurtado, que era comandante de la Fuerza Aérea boliviana, logró huir hasta que fue detenido cuando intentaba cruzar el río Carcarañá. En el Cessna 206 llevaba 475 kilos de cocaína, lo que da una idea, además, de cuánto pudo haber cargado el avión abandonado días atrás en el norte entrerriano. La sospecha es que aquella droga pertenecía a Granier y Pelozzo, que montaron en Ibarlucea una especie de hub narco para la exportación. Este grupo se dedica a la logística, una tarea que, dentro del negocio del contrabando internacional de droga, es una de las mejores pagas.Granier tiene estrechos contactos con el grupo criminal brasileño Primeiro Comando Capital (PCC). Granier fue detenido a finales de marzo de 2023 en un control de tránsito en la pequeña localidad de Jaraguari, en el estado de Mato Grosso do Sul. Se movía con identidad falsa. Un mes antes había sido procesado por el juez federal de Salta Julio Leonardo Bavio, quien lo acusaba de ser "organizador de transporte de estupefacientes agravado por el número de personas intervinientes", por un cargamento de 389 kilos de cocaína interceptado en septiembre de 2020.Este hombre supo alojar en su departamento de la calle Rodríguez Peña 1057, en el barrio porteño de Recoleta, a uno de los líderes más poderosos de la organización brasileña: Gilberto Aparecido Dos Santos, alias Fuminho, que fue detenido por la DEA y la Policía Federal de Brasil en Mozambique al inicio de la pandemia, en 2020.Zona desprotegidaEn la zona del delta del Paraná el tráfico aéreo ilegal es incesante. La escasa población que habita en esa zona hace complejas las investigaciones. No hay testigos, ni cámaras ni señal de celular. En medio de la pandemia ocurrió otro hecho extraño en esa región. El 20 abril de 2020, cuando Rosario estaba desierto por las restricciones para circular, en la isla frente a la ciudad, una avioneta hizo un vuelo rasante y arrojó una bolsa gigante de plástico blanca y verde. Al otro día, un baqueano, en medio de la desolada isla El Chaparro, encontró el bulto, que guardaba 29 panes de cocaína que tenían una marca particular: PCU.Nadie le dio relevancia a esa sigla "desconocida", que apareció en ese lugar inhóspito, donde no había testigos, ni ningún sospechoso. Tampoco se investigó con profundidad el "bombardeo de cocaína" en medio de la fragilidad y desconcierto que imponía un país paralizado, en el que la justicia funcionaba también por zoom.El 18 de julio pasado, más de cuatro años después, el periodista Kevin Sieff, del Washington Post, publicó una extensa historia sobre el narco uruguayo Sebastián Marset en el que aparecía esa fotografía que había sacado con su celular un agente de la comisaría Nº1 que se encuentra en el arroyo Charigue, en jurisdicción de Victoria. La publicación del periodista norteamericano se centró en Marset, que se autoadjudicaba ser el líder de PCU.Marset es un narco con aires de magnate que tiene gustos estrafalarios; actualmente está prófugo, y enfrenta pedido de captura de cinco países. La esposa de este hombre de 32 años, fue detenida en agosto pasado en el aeropuerto de Barajas, Madrid.La metodología que usaron los pilotos fue el llamado "bombardeo" de droga, pero algo salió mal. Los investigadores no lograron determinar qué había detrás de esta operación. Verificaron si en Paraguay había información que pudiera servir para determinar si Marset estaba detrás de este vuelo, pero no pudieron avanzar en esa línea.La droga se hace visible de forma misteriosa, como ocurrió en este caso, cuando algo falla, por un error de los narcos, como ocurrió en Ibicuy y en La Paz. Eso explica muchos secuestros que parecen casuales, como este caso, y marcan el inicio de expedientes judiciales que enfrentan dificultades para enderezar una investigación que logre avanzar hacia los dueños de los cargamentos. Por ese motivo los narcos eligen, para su logística de tráfico, este tipo de territorios desolados donde no hay cámaras ni testigos que puedan aportar información.
La Policía logró rastrear por GPS el celular de Miguel Oviedo, lo que permitió la detención de la pareja y sus presuntos cómplices en una vivienda de Lurín, donde se encontraron el celular y la tarjeta bancaria de la víctima
Joseph Charly Ponce Sarzuri está acusado de montar un millonario fraude inmobiliario a través del que vendía terrenos pertenecientes al Estado.La maniobra fue descubierta por un grupo de twitteros que se hicieron pasar por compradores.
El hombre es expulsado del país 12 años después de ser condenado
ROSARIO.-Jorge Adalid Granier se transformó desde hace casi una década en un engranaje clave de la logística narco en Sudamérica. Está preso actualmente en el penal de Ezeiza, provincia de Buenos Aires, con uno de sus socios rosarinos: Fabián "Calavera" Pelozo, con quien -según las investigaciones judiciales- tenían armada una aceitada empresa criminal para la llegada de cocaína a la Argentina, con el objetivo de multiplicar su valor al ubicarla en los mercados de Europa y Asia. Granier se movía como pez en el agua por los países de la región, como Bolivia, donde se produce la cocaína y Paraguay, transformado en un hub narco, según los investigadores.El otro socio de Granier, con base en Brasil, era un peso pesado: Gilberto Aparecido Dos Santos, alias "Fuminho", uno de los jefes máximos de Primer Comando Capital (PCC). Fuminho vivía con Granier en Buenos Aires, en un departamento en barrio Norte, ubicado en Rodríguez Peña 1057. Fuminho fue detenido por la DEA y la Policía Federal de Brasil en Mozambique al inicio de la pandemia. Su caída mostró la capacidad de movimiento del cartel.Los vínculos y la cantidad de droga que movía desde Bolivia y Paraguay hacia Argentina lo ubican a Granier como un jugador de relevancia, que -de acuerdo a los investigadores de Procunar- sigue activo, algo que lo evidencia el movimiento de un triángulo de la logística de la cocaína, que incluye a Bolivia, Paraguay, Argentina y Uruguay. La sospecha es que detrás del cargamento de 360 kilos que se secuestró en una avioneta en Ibicuy hace dos semanas, cuando la aeronave aterrizó de emergencia en un campo, está la sombra de Granier. La mujer que iba en la avioneta, Jade Isabela Callaú Barriga, más conocida como "Chabela" en redes sociales, ganadora de Miss Fexpo Borja 2019, sería sobrina del narco boliviano.Granier recibió a fines de enero su primera condena en Argentina, luego de que fuera sentenciado a 10 años de prisión en Salta, acusado del tráfico de cocaína, tras el secuestro de un cargamento en 2020 en Ramallo. Por recomendación de la defensa, el narco boliviano admitió su culpabilidad y acordó un juicio abreviado en el marco de la acusación que hizo el fiscal federal Carlos Amad. Es que si no lo hacía podía estar más tiempo en la cárcel, ya que la mayoría de los integrantes de esta organización ya fueron condenados. La pena fue dictada por el Tribunal Oral Federal Nº2 de Salta en un juicio abreviado en el que Granier Ruiz admitió su responsabilidad en el transporte de 389 kilos de cocaína que fueron incautados en la ciudad bonaerense hace más de cuatro años. Además, Granier deberá pagar una multa de 2,7 millones de pesos, unos 2570 dólares, lo que en términos de plata narco es menos que un vuelto: el cargamento incautado estaba valuado en más de 1,5 millones de dólares.Esa carga fue secuestrada el 24 de setiembre de 2020 en manos de Adelaida Castillo, alias la Reina Titi, una expeluquera de Salvador Mazza, en la frontera con Bolivia, que se trasformó en una de las gerentes del poderoso clan Loza, cuyos miembros habían caído en 2018 y dos años después varios de sus integrantes fueron condenados a 10 años de prisión. "Madrecita", como la llamaban los miembros del clan en las comunicaciones telefónicas, usaba una red de mensajería encriptada llamada Surespot en la que no se utiliza número telefónico.Hay otro cargamento secuestrado de 1166 kilos de cocaína que era trasladado desde Salta hacia la provincia de Buenos Aires, donde aparece la sombra de Pelozo y Granier. "El principal responsable de esta operatoria fue Valdemar Loza, quien días antes de ser detenido se reunió con Jorge Granier", señala el documento judicial al que tuvo acceso LA NACION. Los sospechados figuraban en las agendas del teléfono de Loza. Dejaron de usar esos números telefónicos días después de la detención del narco, que ocurrió el 17 de diciembre de 2017. Loza fue condenado a 15 años de prisión.Más de seis años en la miraGranier era investigado desde hace por lo menos seis años, pero misteriosamente nunca nadie lograba detenerlo con evidencia. Estuvo prófugo hasta marzo de 2023, cuando fue detenido por la policía brasileña en Jaraguari, a 47 kilómetros de Campo Grande, Matto Grosso. Meses después fue extraditado a la Argentina en junio de 2023 por pedido de la justicia federal, y alojado en la cárcel de Ezeiza.El 12 de julio de 2019 se inició una investigación tras una denuncia anónima que señalaba que Jorge Granier y su hermano Jean Carlo Granier, socios de Pelozo, "traficaban estupefacientes desde Bolivia, pasando por la ciudad Rosario, los cuales eran comercializados en la zona norte del conurbano bonaerense, en los partidos de Escobar y Pilar". Jean Carlos Granier vivía en un departamento a cinco cuadras del Congreso de la Nación y se movían en un BWM. "La investigación estuvo a cargo de la Unidad Especial de Lucha Contra el Narcotráfico y Crimen Organizado del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires y, al no obtener resultados de interés, el 7 de octubre de 2020 se dispuso el archivo de las actuaciones", señala la investigación de Procunar.Granier mantenía vínculos con Pelozo, un narco rosarino, detenido en 2022 en Córdoba. Según Procunar, la DEA (la agencia de Drogas estadounidense) lo identificó como proveedor del capo rosarino Esteban Lindor Alvarado, al menos desde 2013. La organización tenía conexiones en Salta, Córdoba, Rosario y Buenos Aires, y utilizaba pistas clandestinas para recibir y distribuir grandes cargamentos de droga.Como reconstruyeron los fiscales, Granier y su socio rosarino, "Calavera" Pelozo, administraban rutas aéreas desde Bolivia hacia distintos puntos de la Argentina. Por cada servicio de "taxi aéreo", con capacidad para alrededor de 400 kilos de cocaína, cobraban unos US$ 300.000.Una de sus clientes fue Reina Titi, que se animó a reclamarle por un faltante de droga al narco boliviano. Granier le reenvió un audio de la persona que se había encargado de acondicionar la droga: "Hermano, decile que la gris es la que tiene todo el papel film, todo papel film esa era la gris, era gris clarito, no era cinta gris como la vez pasada esa plomo, era más clarito y tenía todo el film afuera".Ese audio reenviado, le aclaró Granier Ruiz a Castillo, era de "su muchacho". Pero los investigadores no sabían cómo se llamaba el joven en cuestión. Hasta que cruzaron datos de otro expediente: era "Calavera", con una pista clandestina para "bombardear" o aterrizar en Monte Maíz, Córdoba, y su propia casona en Ybarlucea, donde la "Reina Titi" y otros clientes pasaban a retirar los cargamentos. A la altura de su apodo, Pelozo tiene varios crímenes en su haber. En Santa Fe. Pero también en Buenos Aires.Para algunos investigadores, la sociedad entre el argentino, el boliviano y el brasileño podía cristalizarse en el primer cártel de la región. En su país, arrastra otra investigación, esta vez por lavado de activos.Por el cargamento de 389 kilos de 2020, el mismo tribunal de Salta, aunque diferente integración, ya condenó a la "Reina Titi" Castillo a 13 años de prisión en 2022; a Pelozo, a 9 años de prisión en 2023, y la jueza federal María Alejandra Cataldi, en representación del TOF, homologó el acuerdo de juicio abreviado con Granier Ruiz el 26 de diciembre de 2024.Lo que se sospecha es que esta organización narcocriminal continúa activa: un mes después de la sentencia a Granier Ruiz, su sobrina Jade Isabela Callaú Barriga, más conocida como "Chabela" en redes sociales, ganadora de Miss Fexpo Borja 2019, aterrizó con 359 kilos de cocaína en Ibicuy, Entre Ríos.Según publicó el sitio Encriptdata, la familia reconoció el parentesco: "Somos familiares por parte paterna, pero casi que no hemos convivido mucho porque vivían en otra ciudad. Nosotros creemos que ella fue de acompañante del piloto para ganar dinero. Porque nosotros somos de escasos recursos. Depende de dónde vaya, tenemos entendido que pagan 10, 15 y hasta 20 mil dólares, pero no estamos seguros. Nosotros no tenemos conexiones con el narcotráfico. Ella tomó una mala decisión solamente por el dinero".
El Proyecto Pasto Grande y OEFA implementaron barreras para evitar contaminación de recursos hídricos. Autoridades continúan supervisando el impacto ambiental